GUARDIANES | LA OSCURIDAD: FASE 1, PLUTON

Sangre Solaris por todas partes

El cuerpo de Martha, lo miraba fijamente justo antes de desaparecer, la mujer de antes entro. Solo que ahora su cabello era verde y sus ojos rojos.

—Marcus no pierdas de vista lo real

—¿Qué? —Pregunto Marcus incrédulo.

Inmediatamente todo alrededor de Marcus comenzó a girar convirtiéndose en nada más que líneas de colores, el suelo bajo sus pies desapareció.

—¿Que demonios sucede?

Todo absolutamente todo desapareció y se encontró cayendo hacia un asteroide, cuando cayó vio a Keith parado viendo una casa.

Lo siguio adentro de la casa y vio a Sara, está salía de la biblioteca y dejo caer sus cosas al ver a Keith.

A pesar de que quería quedarse una fuerza lo jalo lejos de la casa velozmente, provocando que todo a su alrededor desapareciera.

«¿Hola?» entre el silencio solo la voz de aquel chico se escuchaba evitando que se perdiera. «¿Hola? ¿Alguien me escucha?»

Cerro los ojos lentamente hasta quedar profundamente dormido, solo flotaba en ese extenso mar de colores sin formas o algún sentido.

●  ●  ●

Cuando despertó hacia frio en la habitacion, se sorprendió al ver que habia hielo en el cuarto, bloqueando algún modo de escape. Sus piernas estaban congeladas e inmovilizadas.

No se podia levantar debido a unos grilletes de oro en sus muñecas. Trató de abrirlos pero no pudo, habían sido astutos al ponerle cadenas de oro y no de hierro, metal, o incluso la plata. Aunque Marcus evitaba rotundamente usar esta última debido al gran esfuerzo que debía hacer para moverla.

Marcio y Thomas entraron en la habitación ambos tenían los ojos naranjas y los brazos y algunas partes del cuerpo cubiertas de lava y roca volcánica.

—Traidores, confiamos en ustedes y nos traicionaron —Grito Marcus molesto.

—Bueno, digamos que Keith tiene una mejor perspectiva, un mejor plan y un mejor beneficio. —Dijo Thomas haciendo fuego sobre su mano —Es mejor que esa profecía suya, además Keith ganará, es imposible que un montón de niños malcriados puedan contra un dios.

—En realidad yo jamás pensé en unirme a ustedes, tu y Sara dan pena y de Martha ya ni hablar, es tan... Estúpida...

—Callate...

—...Cree que el mundo es color de rosa...

—Basta...

—Es ingenua, inmadura e incluso, me atrevo a decir que es una zor...

—Cierra la boca —Grito Marcus liberandose de las cadenas fácilmente.

Comenzó a flotar, de sus manos salía un humo lila, la profecía estaba aumentando su poder. Alimentaba el desarrollo de sus habilidades.

Con sus poderes formó una espada de oro, plata y metal. Era bastante larga y tenía un filo que solo necesitaba rozarte para acabar contigo.

En la otra mano de formó una cadena, está la lanzó hacia Marcio y lo jalo. Mientras con la otra partia a Thomas a la mitad, pero este, ya en el suelo, utilizo sus poderes para regresar el tiempo solo en su cuerpo.

Volvió a levantarse y detuvo a Marcus parando el tiempo, él y Marcio se podían mover a la perfección, solo Marcus estaba en pausa.

Marcio congeló sus pies y sus manos, para después encender una pequeña flama en su mano la acercó a los ojos de Marcus para que pudiera verla.

Comenzó a mover la flama frente a los ojos de Marcus, después la apagó. Thomas lo levanto y lo puso sobre la cama, las cadenas lo volvieron a enrollar esta vez más fuerte que antes.

Marcio se acercó a él y levanto su camisa exponiendo su trabajado abdomen. Prendió una llama ligeramente más grande que la anterior en su dedo índice y lo acercó lentamente al cuerpo de Marcus. Quemó algunas líneas en el abdomen, algunas se curaban rápidamente, otras se tardaban más pero al cabo se curaban.

—Fue su culpa que Mario muriera, te haré sentir lo que sentí cuando murió. —Dijo Marcio incendiado su mano y poniéndola en el pecho de Marcus, dejándole una mano marcada.

Marcus comenzó a mover la cadena que antes había hecho, lentamente hacia Thomas, la envolvió en una de sus piernas y lo lanzo al techo ahí lo enredo con la cadena evitando que se viera alguna parte de su cuerpo.

Con las rodillas golpeó a Marcio en la cabeza y aprovecho el movimiento para levantarse, golpeó en la cara a Marcio quien lo embistió ardiendo en llamas.

Marcus evadió la embestida y golpeó su costado lanzando lo hacía la pared, ahí lo inmovilizo y se acercó a él.

—Jamás creí que tendría que hacer esto —Dijo Marcus tomando a Marcio del cuello. Hizo presión provocando que de la boca de Marcio salieran burbujas de sangre.

Marcus vio como el cabello de Marcio se iba haciendo negro, se estaba convirtiendo en un Solaris. Puso su mano sobre la cabeza de Marcio y absorbió la oscuridad Solaris, provocando que el característico cabello blanco de Marcio volviera.

Marcus por su lado se comenzó a convertir en un demonio Solaris, volteó a ver a Thomas y absorbió la oscuridad de este tambien convirtiéndose al fin en un Solaris.