Un Pequeño Trato

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    —¿qué pasó contigo? — fué lo primero que dijo Error cuando vió que los ojos de Ink tenían formas raras y coloridas otra vez.
    ¿Qué iba a decirle? ¿Que iba a pensar si supiera? Había una razón por la que no había dejado que nadie se enterara que no tenía alma, nadie sin excepción.
    —eh.. No se suponía que nadie me viera así — respondió pasándose las manos por el cuello impulsivamente, dándose mas tiempo para decidir que iba a decirle.
    —¿pero que es "así"? Parecías muerto, ¿que te paso? — insistió. No iba a aceptarlo en voz alta, pero esta preocupado, muy preocupado de lo indefenso que lo había visto antes.
    Ink seguía dándole vueltas en su cabeza, empezó a llenar los frascos de tinta solo para trata de distraerse un poco del pensamiento contante de que Error iba a odiarlo, que todos iban a enterarse, y todos lo odiaría igual. Era un fraude, una gran mentira, un ser que ni siquera podía ponerse en pie por suu cuenta, ¿era realmente alguien? O solo un cascarón vacío.
    Su mirada temblaba, trataba de mantenerla fija en la tinta pero era inútil. Odiaba cuando esos pensamiento invadían su mente.
    —es... algo que pasa me quedo sin tinta — dijo evitando el contacto visual.
    Error se acercó un poco y se sentó al lado del río de tinta.
    —tus ojos no mienten— dijo mirándolo fijamente.
    Yo voy a decirlo de la forma en la que Error nunca lo haría. El amaba mirar a Ink directo a los ojos tanto que había aprendido a reconocer los patrones de sus pupilas de una forma mas exacta. Cualquiera diría "si son estrellas, está feliz, si es un signo de exclamación entonces está sorprendido", pero error se había dado cuenta que formas y colores tomaban sus pupilas cuando algo le daba risa, cuando no entendía algo, cuando tenía habre, cuando ocultaba cosas.
    —¿qué es realmente esa tinta? ¿Por qué te pones así si no la tienes? Es una tinta diferente de la que usas para tus ataques, ¿por qué es tan especial?— insistió otra vez sin darle tiempo de pensar.
    Ink se sentía acorralado, aterrado, no quería que la gente lo viera diferente al saber que no tenía alma, no quería que Error lo viera diferente, pero no era como si le sobraran opciones.
   —okey, te diré la verdad — aceptó forzandose a reír .
    Seguía dudando y vacilando, pero le contó como fué creado como un sans cualquiera de un AU que fué abandonado; como destruyó su propia alma cegado por el deseo de poder existir, ser real, formar parte del multiverso; y como empezó a usar esas tintas llenas de emociones como un remplazo de su alma desintegrada.
    No podría decir si era por que le parecía ridículo o por que quería negarlo, pero Error no lograba creer nada de lo que Ink decía mientras le contaba su historia.
    —entonces, dices que no tienes alma —  repitió cuando Ink terminó, aún con una pequeña esperanza de que dijera que estaba mintiendo, pero en sus ojos se veía la seriedad que delataba una verdad que costaba decir.
    Ink negó con la cabeza. 
    —y sin esas pinturas no eres capaz de sentir nada...
    —exacto. 
    —o entender las emociones.
    —ajá.
    —ni moverte por tu cuenta.
    —todos hacen todo movidos por emociones, sin ellas no hay ningún motivo para nada — le explicó, aún bastante retraído en su mente.
    Error le seguía dando vueltas a la historia, algo en ella no le gustaba para nada. No sabía como reaccionar en ese momento.
    Todo tenía sentido, todo era coherente, era la única razón posible.
    Ink no sabía que decirle, o si debía decir algo, solo lo miraba esperando alguna reacción, cualquiera, que le dijera que era un mentiroso, o quizá que eso no importaba. Solo quería una reacción, nada más, pero el no podía dársela.
   —eso explica por qué siempre volvías acá— murmuró con la mirada perdida, dándose la vuelta hacia un portal que acaba de abrir.
    Ink no estaba seguro, pero sonaba molesto.
    —¿a donde vas? — preguntó
    — puedes esta acá cuando quieras — respondió Error ignorando la pregunta — ya no te diré nada.
    —espera — pidió Ink casi como una suplica, pero Error ya se había ido.

    Normalmente cuando algo se rompe hace un sonido, como una taza o un plato, inculto una hoja o una masa. Es curioso como lo más notorio en un corazón roto es que deja de sonar.
    E Ink comprobó la teoría que había tenía siempre, si alguien sabía la verdad sobre su alma iba a verlo como una farsa, pero no culpaba a Error, le daba la razón, el era una farsa, simplemente algo que nunca debió existir pero aún así se esforzaba desesperado por ser alguien.

Code Control (Temp 1 Completa) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora