Capítulo especial #4.

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Escuela secundaria Teiko.

Fujiwara Yomi salió de la oficina del director con un rostro de devastación. Dejando el lugar detrás de ella, Tendo Sayumi también reflejaba emociones negativas, pero a la vez cierta satisfacción brillaba por aquí y allá en sus facciones. 

El director las había hecho entrar a ellas dos primero, ya que según se reveló, eran las protagonistas del conflicto en sí. Estuvieron alrededor de quince minutos al interior del despacho del hombre, mientras los amigos de Sayumi, además de Mina y Akashi Seijuurou, esperaban afuera como se les instruyó. Ellos ingresarían luego. 

El pelirrojo se encontraba de brazos cruzados junto a una ventana, muy recto y con cara de amargura. Realmente odiaba tener que estar en esa posición. 

De repente, Sayumi se adelantó a Yomi, dándole un empujón disimulado, y la miró hacia atrás con una malvada sonrisa.

-Parece que te tocará bailar en casa- Le susurró a la castaña, quien ejerció presión con sus dientes y la observó rencorosa, deseando abofetearla. 

El director se asomó a la puerta entonces. 

-Los cuatro restantes, que pasen- Ordenó, en referencia a los "involucrados".

Ahora ellos debían dar su versión de los hechos. En cuanto se revisaran todos los testimonios, el director otorgaría su sanción final para el asunto, sopesando quién había tenido más culpa. Dependiendo de esto, ya les había adelantado a Sayumi y Yomi las consecuencias que podrían obtener cada una. Por eso la expresión angustiada de la castaña. 

Mina y los amigos de Sayumi compartieron un vistazo hostil previo a obedecerle al director y empezar a adentrarse en la oficina. Mina tocó rápidamente el hombro de Yomi en su trayecto, para intentar apoyarla sabiendo que la situación se había complicado, y hacerle saber que abogaría por ella en la charla con la autoridad de la escuela. 

La castaña ya sabía eso, y lo agradecía inmensamente, pero no creía que fuera suficiente para salvarse de la sanción con la que el director la había amenazado, la cual a ella le parecía terrible. A causa de eso, no reaccionó al toque de Mina... y en cambio, alzó su mirada para que chocase con la de Akashi Seijuurou, que le dirigió una expresión dura en tanto se acercaba a la puerta de la oficina. 

La verdad es que Yomi no se lo pensó mucho, estaba desesperada. Con su cuerpo, bloqueó el camino del pelirrojo y colocó las manos en sus hombros. 

-¿Qué haces?- Le cuestionó éste, frunciendo mucho su ceño. 

-Akashi, por favor- Replicó la castaña al acto, ejerciendo presión con sus dedos en el cuerpo del chico, que lució más enojado y se apartó hacia atrás. 

-¿Por favor qué?- Espetó. 

Yomi titubeó medio segundo, previo a avanzar un paso hacia él. 

Era su única opción. 

Es lo que pensó en aquel instante. 

-Habla a mi favor- Solicitó con un hilo de voz y ojos tristes. 

Seijuurou alzó sus cejas. A un lado, Tendo Sayumi observaba su interacción con desprecio y los nudillos blancos. 

A Yomi le pareció que transcurrió una eternidad hasta que el muchacho emitió una contestación a su petición, después de liberar un resoplido. 

-Sinceramente, no tienes cara- Pronunció él, volviendo a alejarse. 

-¿Qué?... ¿p-por qué?- Consultó la chica, atolondrada. 

-Me pides eso a mí- Resaltó Akashi muy tenso.

"¿Por qué no se lo pides a Haizaki?" Fue la frase que se paseó de modo inmaduro por su mente, más no la dejó salir. 

-Es que, es que...- Comenzó a balbucear Yomi. 

-Akashi, apresúrate- Apremió el director, vigilando aun desde la puerta. 

El aludido miró hacia allá y asintió, sabiendo que Yomi no le quitaba esos ojos de ruego de encima. 

-Eso es Akashi, apresúrate- Añadió Sayumi, con una sonrisa cínica. El chico ni siquiera la volteó a ver y nuevamente se dispuso a entrar al despacho, pero Yomi lo retuvo con un agarre oculto desde el brazo, que él ojeó con desaprobación. 

-Akashi, por favor- Repitió ella en un susurro. 

-¿Por qué tendría que hacer eso?- Encaró Akashi fríamente. 

-Solo por favor... te lo pido por favor...- Expresó de manera veloz. 

El muchacho se inclinó levemente hacia ella entonces, y no logró contenerse. Le reclamó. 

-Ya ni siquiera me hablas y te atreves a pedirme cosas. 

La castaña lució sorprendida. No creyó que él vocalizaría alguna vez su molestia respecto a ese ámbito. Le era confuso sin duda, pero bueno, tampoco tenía tiempo de excusarse por aquello en aquel momento y resultaba claro, a pesar de que de repente Akashi se veía deseoso de escuchar una razón para su comportamiento de las últimas semanas. 

Y de hecho, su corazón latía rápido, en lo que focalizaba a la castaña. 

Quería que ella le explicara, en verdad. Aunque paró de aguardar por esta explicación cuando los ojos rojos intensos ajenos empezaron a tornarse llorosos. 

Igual que esa vez en la clase, al instante de verla llorar, se le remeció su ser por dentro. 

-Me amenazaron con apartarme del club de baile. Por favor- Fue todo lo que ella logró pronunciar, su desesperación subiendo. 

Akashi ablandó su expresión en un abrir y cerrar de ojos. Sus sentimientos revolviéndose entre lo que debía hacer y lo que no. 

Demonios. 

-Akashi- Llamó de nuevo el director, más severo. 

Y Akashi, despertando de su trance de sentimientos y pensamientos, no tuvo más remedio que ir, compartiendo una última mirada potente con Yomi. 

Todavía sin decidir qué hacer. 

-Ustedes dos, vuelvan a sus salones- Dijo el director a Sayumi y Yomi-El profesor las acompañará. 

Apenas terminó esa frase, el profesor que había intervenido en la pelea salió de la oficina.

-Vengan conmigo, señoritas- Las instruyó. 

La rubia y la castaña se observaron de nueva cuenta con desdén, alimentando sin cesar esa tonta e inútil rivalidad de niñas que alargarían hasta el final de sus días en la secundaria Teiko, y procedieron a caminar con el mayor, una a cada lado de éste. 

Escuchando como el director cerraba la puerta del despacho a sus espaldas, Yomi se mordisqueó el labio inferior. 

Realmente, estaba consciente de que solicitarle eso a Akashi luego de que su comunicación se había detenido era raro y probablemente inadecuado, pero otra vez, sentía que no tenía opción. Con el apoyo de Mina no bastaría para que el director la perdonase, pero si el alumno modelo perfecto Akashi Seijuurou lo hacía...

Ugh. No era su intención utilizar al pelirrojo, pero necesitaba su ayuda en esta pasada.

Y bueno, si era honesta, también extrañaba y necesitaba hablar con él.

HOLA. REGRESÉ DESPUÉS DE MUCHO. EL PROXIMO PROBABLEMENTE SERA EL ULTIMO. SI LES GUSTA, NO OLVIDEN VOTAR O DEJAR UN COMENT ❤

Happy (Akashi Seijuro)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora