Unattractive❌ (Ohmfluke)

Capitulo 15

Maratón
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El aparato electrónico fue lanzado con brusquedad sobre el escritorio.

—¡Maldita sea! —gritó Ohm, con rabia desbordante.

Fluke le había colgado sin decir una sola palabra. La oportunidad que Ohm había esperado para resolver el caos en el que se había metido parecía haberse esfumado. Había intentado ser lo más cariñoso posible, expresar su amor y todas esas cosas que solían gustarle a Fluke, pero no sirvió de nada. Fluke no contestó a ninguna de sus preguntas; solo se escucharon sus lamentos y, finalmente, el característico sonido de la llamada cortada.

¡Dios, estaba desesperado! ¿Qué debía hacer para que todo volviera a la normalidad? No tenía tiempo; los padres de Fluke llegarían en cualquier momento, y si veían el desastre en el que se encontraba, sería su fin.

Se levantó, tomó su saco, las llaves de su Lamborghini y se dirigió hacia la puerta, decidido a ver a Fluke de una vez por todas. Ya no le importaba lo que pudiera decir ese idiota amigo suyo. Abrió la puerta de su oficina, dispuesto a salir, pero se encontró cara a cara con Kao, que estaba a punto de entrar.

—Wow, ¿a dónde vas tan apresurado? —preguntó Kao.

—Ese es asunto mío, Kao. ¿No se supone que no vendrías hoy a la oficina? —respondió Ohm, con un tono de irritación contenida.

—Veo que no estás de buen humor, pensé que sería distinto —comentó Kao, sorprendido.

—Y no iba a venir, pero me estaba aburriendo en casa y decidí pasar a arreglar algunos pendientes. Así que necesito tu firma en estos documentos —dijo Kao, extendiendo unos papeles.

—¿Por qué pensaste que sería distinto? —El comentario de Kao sorprendió a Ohm.

—Bueno, Fluke me comentó sobre la sorpresa que te tenía preparada, así que supuse que tu humor estaría excelente después de eso. Pero a juzgar por tu expresión, parece que algo no salió bien, ¿verdad?—

Ohm se sorprendió al escuchar que Fluke había compartido detalles de su relación con Kao. No sabía que fueran tan cercanos, pero ahora se daba cuenta de que había cometido un error al subestimarlos.

—No compartiré asuntos de mi relación —dijo Ohm, con un tono serio.
—Te conozco, Kao, y sé que lo que más te alegraría es que Fluke y yo tengamos problemas. Pero no es así. Todo está bien y precisamente por eso voy a verlo en este momento, así que permíteme —añadió Ohm, tratando de mantener la calma y ocultar su desesperación.

—¿Y se supone que estás bien? —se burló Kao.
—Solo firma esto y podrás irte —respondió Kao, cediendo. Ohm, a regañadientes, tomó las hojas, sacó una pluma de su saco y firmó en los espacios correspondientes.

—Aquí tienes, ahora sí, permíteme —dijo Ohm, con prisa.

—Con gusto, hermanito —respondió Kao, sonriendo mientras se hacía a un lado. Ohm salió de la oficina a toda prisa.

Kao observó cómo su hermano se alejaba y una sonrisa se dibujó en su rostro. Desde que Fluke le había contado sobre sus planes, Kao había sentido un dolor profundo al saber que Fluke se entregaría a Ohm. Pero ahora, nuevas esperanzas volvían a unir esos pedazos rotos, haciéndole ver que, aunque lo negara, algo pasó entre ellos y no fue nada bueno.

A Ohm se le olvidó quién era y cómo lo conocía a la perfección. Cada expresión, cada matiz en su voz, le revelaba la rabia, desesperación y preocupación que sentía.

A partir de ahora, las cosas serían diferentes. Se había cansado de simplemente esperar a ver si algún día tendría una mínima oportunidad con Fluke. Ya no iba a conformarse con la incertidumbre. De ahora en adelante, Kao se plantaría con firmeza, tomaría la iniciativa y se daría esa oportunidad, sin importar las dificultades que se presentaran.