Capítulo 33

312 39 8
                                    

JARED

- Gracias por venir en cuánto te llamé – estrecho mi mano con la de Guido

- Llámame siempre que lo necesites

Asiento y se va del despacho, Guido es el policía que me salvó la vida y me llevó al orfanato cuando era pequeño, gracias a eso mis padres me conocieron y me adoptaron.

Años después lo conocí por qué papá investigó y supo que había sido él, desde ese día siempre ha estado ahí cuándo lo he necesitado

La puerta del despacho se abre y Edwin, Lui y mi padre entran por ella, mierda me van a matar 

- Tenemos que hablar – dice el alemán sentándose enfrente de mí cada uno en una silla - ¿Qué te traes con mi hija?

- Te crié para que protegieras a Hope - me mira mi padre 

- Lo hago

- No me interrumpas jovencito – me mira mal mi padre

- Desde antes de nacer nos estamos preparando para que ningún hombre se acercara a ella – habla Lui poniéndose de pie y apoyando las manos en la mesa de golpe -¿Qué hacemos contigo?

- Dejadlo en paz

Una voz se escucha desde la puerta y cuándo miro es mi pelirroja que ya está duchada y preciosa como siempre.

Camina hacia mí y me aparto del escritorio, se sienta en mis piernas y la rodeo por la cintura

- ¿Cómo estás pelirroja? ¿Te han curado la herida?

- Todo bien amor, ya no duele tanto – sonríe un poco y después de dejar un corto beso en mis labios mira a los tres hombres de enfrente que gruñen – parecéis perros

- Respeta a tu padre niña – me mira mal - ¿Quién sabe esto?

- Adonis, Romeo, Atenea, Morgan – digo pensando si falta alguien

- Mamá

Dice Hope y sonríe de lado cuándo su padre suelta un gemido de dolor como si le hubieran pegado. Edwin sale del despacho pero aún lo escuchamos

- ¡Nena! – grita

- ¿¡Qué!? – responde gritando la pelirroja mayor

- ¡Ven aquí, tu y yo vamos a hablar sobre mentirle a tu marido!

Hope se ríe y después miramos a los Rinaldi enfrente de nosotros, Lui se pone de pie y camina hacia la puerta pero antes de salir susurra

- Increíble, mis hijos ocultándome cosas

- Papá, estoy enamorado de Hope desde pequeño

- Yo también – me interrumpe mi chica

- ¿Por qué no nos dijisteis antes? – se queda pensando – no me jodas, cuándo Hope dijo dónde había sido su primera vez se te cayó el vaso, nos pareció raro pero no le dimos importancia 

- Yo fui su primera vez – miro a la pelirroja y mira mi mano mientras juega con mis dedos – aunque no la recordemos del todo

Mi padre asiente y después nos dice que se va a ir para asimilarlo todo, meto la cara en el cuello de la pelirroja para disfrutar de su olor, como la extrañé

Separo la cara después de darle un beso allí y la miro a los ojos, la cojo por la nuca acercándola a mi boca y nos damos un beso lento

- Cuéntame todo lo qué ha pasado – susurro poniéndome de pie con ella y nos vamos al sofá del despacho

Me siento mientras ella se sienta a horcajadas encima de mí y empieza a hablar

- Primero me tuvieron ataca a una silla pero días después prefirieron encadenarme a la pared como si fuera un perro, me tiraban cubos de agua para lavarme y... – empieza a relatar todo y a lo largo de la historia aprieto los puños con ganas de sangre – Roi mató al abuelo, fue todo una trampa

- Acabaremos con él – susurro cogiéndole la cara con ambas manos y asiente

Nos volvemos a acercar para volver a darnos un beso pero este ya es un beso más necesitado, la necesito

Se pone de pie caminando hasta la puerta y la cierra con pestillo, se gira para mirarme mientras se desabrocha los botones del vestido que cae a sus pies

- Preciosa el médico dijo que necesitas reposo

- El médico no tiene ni puta idea de lo que necesito

Me mira a través de las pestañas y después su sujetador acaba en el suelo junto el vestido, me saco la camiseta y cuándo la miro está desnuda del todo mirándome desde el sofá de enfrente en el qué se ha sentado

Suspiro sintiendo como me aprietan los pantalones y la miro a los ojos, cuándo quedo desnudo nos quedamos el uno en frente del otro

- Tócate – digo y la escucho gemir – abre tus piernas preciosa, quiero verlo

Mi mano está subiendo y bajando por mi miembro mientras hablo, hace lo qué le digo y echa la cabeza para atrás mientras suelta pequeños gemidos que me encantan

- ¿Te gusta? – gruño y gime asintiendo

Me pongo de pie caminando hacia ella, la cojo por la cintura, la apoyo contra la pared y entro en ella lentamente 

- Joder como te quiero – dice entre gemidos y le muerdo el cuello haciendo que gima más

Se escucha como tocan a la puerta pero no dejo de moverme dentro de ella que mete la cara en mi cuello para que no se escuchen sus gemidos

- ¿Sí?

- Los huéspedes han despertado – dice Adonis

- Vale, vamos ahora

- Estamos abajo – no respondo y escucho sus pasos alejarse

Me muevo más rápido encontrando mi liberación y la suya, me clava las uñas en la espalda y yo le aprieto el culo con fuerza.

- Maravilloso – susurra cuándo terminamos y salgo de ella

- Como siempre – me río y asiente

Nos miramos mientras nos vestimos y sonreímos

- ¿Lista?

- Vamos a matar 

Los Reyes Del Fuego [#1 Trilogía Herencias Peligrosas ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora