{Elsa}
Jack no paraba de moverse.
Le acababa de inyectar el antídoto que Tadashi hizo con su sangre.
"Tras inyectar el antídoto, se meterá en una horrible pesadilla con una persona muy importante para él. Será difícil así que no te garantizo que lo consiga" las palabras de Tadashi no paraban de resonar en mi cabeza.
Cuando Jack se desmayó agarré fuerte su mano y cada vez la apretaba más y más fuerte.
No podía evitar que las lagrimas descendieran por mis mejillas como dos ríos.
Nunca pensé llegar a apreciar tanto a un humano.
Admito que me equivocaba al pensar que todos son igual de malos. Jack no lo es y sus amigos tampoco.
De repente, Jack abrió los ojos asustado.
Sudaba y miraba a la nada hasta que su mirada se encontró conmigo.
Al verme se fue calmando poco a poco y entonces me abalancé sobre él para abrazarle fuertemente.
-No vuelvas a hacerme esto nunca. ¿¡Me oyes?! ¡¡Nunca!!
-Nunca...- contestó él devolviéndome el abrazo
Luego, me separé de él lentamente.
Jack agarró mis mejillas con sus manos y limpió mis lágrimas con sus dedos pulgares.
-Nunca llores por mí
-No me des motivos para hacerlo- le contesté yo sonriendo y él también sonrió.
Jack aprovechó que me sujetaba la cara para acercarme a él y darme un abrazo aun mas fuerte y cariñoso.
Le devolví el abrazo y me hubiera gustado quedarme todo el día pegada a él.
Noté algo en el pecho. Algo extraño pero no le di importancia.
Nos separamos sonriendo como dos niños pequeños.
-¿Que tal te encuentras?- le pregunté tocando su frente ya menos caliente
-Estoy bien tranquila. Solo fue un resfriado
¿Resfriado? ¿A caso no sabe lo que pasa?
¡Claro que no lo sabe Elsa! ¡Es un humano corriente!
-¿Tienes hambre? ¿O sed?
-Ahora me comería un buen bocadillo de atún- dijo él relamiéndose y masaje ando su estómago haciendo que ría.
-Enseguida vuelvo- le dije a la vez que salía de la habitación y me dirigía a la cocina.
En el salón estaban todos sentados desde Flynn hasta Mérida.
Al verme bajar se levantaron apresurados esperando una respuesta.
-¿Y bien?- preguntó Kristoff preocupado
-¿Cómo está?- preguntó también Anna a la vez
-Está bien. Solo está hambriento- conteste y ellos suspiran aliviados.
-Me alegro pero debemos irnos ya- contestó Hipo
-Jack quiere un bocadillo de atún- informé a los chicos a la vez que nos íbamos a casa.
Entramos en nuestra casa y encontramos a Tadashi en la cocina mezclando unos cuantos potingues de colores asquerosos y olores aún peores.
-¡Puagh Tadashi!- se quejó Rapunzel agitando su mano para remover el aire en su entorno
-¡Que asco!- protestó Mérida tapándose la nariz
-¿¡Se puede saber que haces cacho guarro?!- preguntó Anna enfadada
-Mezclo sustancias vampíricas para formar pociones que nos vendrán bien en un futuro. Ahora vamos al salón. Necesito hablar con vosotros.
Fuimos al sofá para sentarnos en él dejando atrás el olor pestilente de esas sustancias de Tadashi.
-Disney ha llamado para pediros un favor. Quiere que os encarguéis de unos cazadores que le tocan mucho las pelotas desde hace unos días. Dice que podéis encontrarlos hoy por la noche en su almacén a las 9. Quiere que los eliminéis.
-¿Y que ganamos?- preguntó Rapunzel
-Pues no me lo dijo pero seguro que algo sacáis. Solo os digo que no es bueno llevarse mal con Disney.
-Pero Elsa es la reina de los vampiros- replicó Mérida
-Pero Disney no lo sabe aun y es mejor que quede así. Me mandaron para ayudaros y lo mejor es ocultar que Elsa es la reina. Al menos por ahora. Para estar seguros vendrá bien tener a Disney de aliado.
-Está bien. Dile que allí estaremos-contesté yo
(...)
Estábamos en el almacén de Disney.
Todo estaba oscuro y silencioso. Muy silencioso.
Nos separamos para ocupar mas terreno.
Por lo que sabemos, hay un cazador para cada uno.
Yo caminaba por entre unas cajas de cartón colocadas en columnas muy altas.
De repente, escuche un sonido de una arma cargándose y me giré.
Saqué mis colmillos preparada para cualquier cosa que se presentase.
Detrás de mí saltó un chico encima de mí tirándome al suelo.
Me giré para caer de espalda y acabé con el chico encima de mí.
Tenía el pelo castaño, largo y los ojos verdes.
Le pegué una patada con los dos pies para quitármelo de encima y luego cogí impulso para subir de un ágil movimiento.
El chico estaba en posición de ataque cuando me lanzó un puñetazo de la nada dándome en la mandíbula.
Me enfadé y empecé a darle sin control.
Me tiré al suelo de cuclillas y estiré una pierna a la vez que giraba para tirar al chico al suelo.
Luego, me puse encima de él pero me pegó un buen puñetazo dejándome en el suelo tirada.
-¡Ahora veras zorra!- me gritó a la vez que se acercaba a mi amenazantemente.
Me dio una patada en el estomago cuando intentaba levantarme que me hizo escupir algo de sangre.
Me agarró de un brazo y yo me hice la rendida.
Pero justo cuando me iba a retorcer el brazo le pegué una buena patada en las costillas.
Me levanté rápidamente y le pegué una patada voladora a la vez que giraba para coger mas fuerza en el golpe.
Le di en la cabeza tirándole al suelo y le pegué un puñetazo en la cara dejándolo inconsciente.
A continuación, me fui a la entrada del almacén.
Anna, Rapunzel, Mérida e Hipo ya estaban allí esperándome.
-Vámonos- les dije y todos nos fuimos a casa caminando por las oscuras calles doloridos por la pelea.
Continuará...
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Cazador de colmillos
Fiksi PenggemarElsa y Anna son vampiros ancestrales aunque, para mantenerse a salvo de los cazadores de vampiros, conviven desde pequeñas con los "Blood's son". Un día se dan cuenta de que el bosque no es seguro para vivir pero ya es demasiado tarde. Elsa, Anna, H...