□ 12

15 2 0
                                    

12

12

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


═════════════

Mei estaba paralizada mientras estaba frente a su hermano mayor, no sabía dónde estaba ahora, pero parecía un tipo de castillo, pero se veía terrorífico, no se veía como en casa. Solo antes de estar aquí, se había encontrado su hermano Eiji y de pronto todo se distorsionó, ahora estaba en este tipo de salón.

—¿Me contarás de él, mi pequeña hermana? —preguntó Eiji mientras las hebras de cabello casi ocultaban parte de su rostro. Este se encontraba en la posición donde debe estar el heredero, ¿No debería estar su hermano Arata ahí?

La princesa estaba en silencio, quería hablar, pero no encontraba la fuerza para desatar el nudo de su garganta.

Eiji la observó detenidamente y luego pareció sonreír un poco—Pero que estaba pensando, ¿No has comido, hermanita? No te preocupes, ya te lo serviré.

La joven mostró incertidumbre cuando el mayor le dijo eso, entonces en la mesa frente suyo aparecieron aperitivos, pero cuando le dio un buen vistazo no pudo evitar gritar horrorizada. Todo en los platos era asqueroso, habían gusanos y otras cosas que no quería saber de donde provenían.

—¿Qué sucede? ¿No es de tu gusto? Debería gustarte, lo hice para ti.

Mei quería vomitar, se levantó y quiso salir pero su hermano apareció frente a ella repentinamente causando que se cayera de espalda.

—Eiji... Por favor, no debería estar aquí. Tú tampoco—Mei comenzó a llorar mientras intentaba alejarse del fantasma de su hermano—Debo estar en casa. Con Arata. Con nuestro pueblo.

—¿De qué hablas? Todos estarán aquí. Este es nuestro hogar. Mis tierras. Todos ustedes pertenecen aquí conmigo—Cada palabra de Eiji sonaba sin vida, tan indiferente que a Mei le estaba causando más terror.

Mei cerró sus ojos, no quería estar aquí.

Que alguien la salve.








.









La mano del monje salió de aquella zanja, luego todo su cuerpo. El hombre empezó a toser mientras sentía su cuerpo temblar, recordando detalladamente como fue absorbido. ¿Qué se supone que era ese demonio? Nunca antes había visto algo así o había escuchado sobre ellos.

Intentó reprimir sus sentimientos y se puso de pie con ayuda de su báculo. Ahora qué lo recordaba había estado soñando, estaba con Sango quien tenía un avanzado embarazo. Pero ahora está despierto, no cree que haya sido por voluntad propia.

—Necesito buscar a Inuyasha y a Shippo... deben estar en algún lugar de este tipo de dimensión—se decía así mismo. Observó que seguía en ese tipo de limbo, por lo que siguió caminando entre las ruinas de este lugar—Todavía me siento débil...

『 𝗕𝗢𝗢𝗞 𝟭: 𝖥𝖮𝖱 𝟥 𝖸𝖤𝖠𝖱𝖲 』Donde viven las historias. Descúbrelo ahora