•-Figura paterna•- [Bonten-Mikey]

6

-¡Takeomi! ¿cómo está mí sobrina, está bien?- Preguntó Senju yendo hacia donde se encontraba su hermano. T/n se asustó y se puso detrás de Takeomi, Senju notó esa acción y se puso a a la altura de ella. -T/n, tanto tiempo ¿ya estás mejor?- Preguntó.

-Señorita con mucho respeto, pero me podría decir porque me llama "sobrina" si yo no soy nada suyo?- Preguntó ladeando la cabeza.

-¿Cómo que porqué? soy tu tía, tu tía Senju como me sabías decir antes de irte a vivir con tu padre- Nuevamente la pequeña la miró confundida, no recordaba que tuviera padre. -Takeomi hay algo que quieras decirme?- Le preguntó levantándose y poniéndose en su altura normal. El mismo se acercó a su oído y le contó. -....Eso quiere decir que no nos podrá recordar...?...- Senju estaba al punto del llanto, ella encerio la adoraba demasiado.

-Recordar que?- Preguntó nuevamente T/n. Senju no aguanto más, se puso a la altura de la pequeña mientras las lágrimas recorrían su rostro y la abrazo. -¡Se-señorita! que sucede, porque llora?... se encuentra bien?...- Preguntó un poco asustada ante la acción de la mayor.

-Tu quédate aquí con ella, yo iré unos minutos afuera, necesito estar sola...- Habló Senju al mismo tiempo que se separaba del abrazo e hiba al patio. Takeomi quedó en silencio unos segundos mirando al suelo, le dolía verla así aún más al nunca verla en ese estado.

-Hice algo mal?... La señorita Senju se puso así por algo que yo hice?... Si fue así lo siento!- Se disculpó T/n y Takeomi rápidamente negó poniéndose a su altura.

-Nada de eso, ella solo necesitaba unos momentos para estar sola no te eches la culpa por algo que ni si quiera fue tu culpa- Habló sacándole las pocas lágrimas que le habían caído con su dedo índice. -Ahora que te parece si te preparo algo de comer y comemos los tres juntos?- Negó.

-Gracias señor Takeomi, pero no tengo apetito, tal vez otro día...- En eso Senju entró, tomó a su hermano de la manga de la camisa de la camisa y se lo llevó con ella. -Hum... Supongo que los espero aquí...-

(...)

-¿Dónde está Sanzu?- Preguntó, pero Takeomi no respondió, sabía lo que quería hacer y no la dejaría. -¿Dónde está Sanzu?- Volvió a preguntar, pero está vez con un tono de enojo en su voz. -¿¡Dónde mierda esta Sanzu ahora mismo?!- Grito enojada al ver qué el no respondía.

-Prefiero mil veces no decírtelo a qué decírtelo y que vallas a hacer lío- Respondió serio mirándola a lo ojos.

-¿¡Porque?! ¡¡el tiene que pagar por lo que le hizo a mí sobrina!!— Grito Senju enojada mientras que con su puño golpeaba la pared. —No me digas que lo dejarás ir así como así. Por su culpa T/n perdió la memoria, no nos recuerda!! ¿¡entiendes que es eso?!... Yo la quiero mucho, me duele que no me recuerda... Al menos intenta comprenderme...— Dijo Senju con su miraba baja.

—Lo hago Senju, lo hago, pero no podemos hacer más problema del que ya tenemos, además que es inútil ir hablar con el no nos llevará el apunte. Ahora en lo que hay que concentrarnos es en T/n ella nos necesita, aún aunque no nos recuerde—

—Entonces haremos que nos recuerde— Dijo sería.

—Si ella puede volver a recordar lo hará no hay porque apresurarla, todo a su tiempo. También yo quería hacer lo mismo, pero viniendo me di cuenta que es inútil— Respondió. —Al menos una vez escúchame a mí y no actúes por ti sola ¿lo prometes?—

—Esta bien está bien, lo prometo... Pero te juro que si lo encuentro en algún lado lo mato— Takeomi suspiro mientras negaba con su cabeza y sonreía al mismo tiempo.

—Será mejor ir con T/n y pasar tiempo con ella— Senju asintió y ambos volvieron a la sala, en donde encontraron a su sobrina acostada en el sillón con la cabeza para atrás y su cabello tocando el suelo. —No hagas eso, puede hacerte mal— Dijo Takeomi mientras le veía.

—Lo siento— Se disculpó sentándose bien.

—No te preocupes, ahora porque no mejor jugamos a algo?— Preguntó Senju.

—¿A qué exactamente?— Preguntó Takeomi.

—Ya lo sabrás...— Respondió mientras lo miraba de pies a cabeza con una sonrisa.

(...)

«Lo que uno hace por su sobrina y hermana es totalmente impresionante...»
Pensó Takeomi viendo a ambas riéndose por el echo de el encontrarse vestido con el vestido de la princesita Sofía.

—Dios, esto es lo mejor!!!— Habló Senju riendo mientras veía a su sobrina, la cuál también se encontraba riendo. —¿verdad que sí pequeña T/n?— La nombrada asintió con una sonrisa en su rostro.

—Todo muy gracioso y lindo, pero esto se termina aquí— Habló Takeomi ya harto metiéndose nuevamente al baño para cambiarse, al mismo tiempo que escuchaba las risas de ambas chicas, este no pudo también evitar soltar una risa al verse en el espejo, encerio se veía ridículo.

(...)

Mikey había citado a Sanzu para hablar con el mismo. El no se encontraba en ánimos pero fue lo mismo, pensó que tal vez lo mandaría a matar a alguien como de costumbre pero al llegar lo que le pregunto le sorprendió.

—¿Cómo está y porque lo hiciste?— Pregunto dándole la espalda, pero el peli rosa no respondió. —Sanzu te pregunté algo, respóndeme— Habló con su voz sería.

—Esta bien, pero perdió su memoria tras el golpe que se dió...— Respondió con su mirada baja. Mikey se quedó unos segundos en silencio, con tan solo un día que estuvo con ella la misma ya se había ganado su corazón, además de que le había hallado un cierto parecido a su hermana ya fallecida.

—¿Porque lo hiciste, porque hiciste que se golpeara?—

—...No estaba consiente de lo que le hacía, ahora me pongo a pensar todo aquél infierno que le hice pasar y me arrepiento, pero se que es demasiado tarde...— Mikey se dió la vuelta y lo miró.

—No te pregunté si estabas consiente o no, o si te arrepentías, te pregunté porque lo hiciste— Habló serio.

—Me enojé y me dejé llevar ¿¡okey?!— Respondió.

—Se nota que te has enojado y dejado llevar bastante veces— Lo miró. —Quiero que cuando puedas me la traigas, la quiero ver aún aunque no me recuerde—

—Eso se lo tendrás que pedir a Takeomi, después de todo ella está con el y Senju— Respondió desviando su mirada.

—Bueno, al menos está con personas que la tratarán como se merece— Dijo mientras caminaba para irse, pero antes dijo —Espero y recapacites— Dicho aquello se marchó, dejando a Sanzu allí solo, perdido en sus pensamientos.

«Soy de lo peor...» Pensó para empezar a caminar.