Uso de modismos mexicanos y ambientado en épocas antes de la revolución.
El matrimonio jeon era muy reciente, taehyung era un doncel que obedecía a su esposo sin reproches, las decisiones del mayor siempre eran acertadas. Ahora él regresaba de las tierras luego de un arduo día de trabajo.
Al llegar a la pequeña choza el olor de lo que parecía ser caldo le abrió el apetito. Su esposo estaba a un lado revolviendo la olla.
— Estoy en casa.
— Ve a sentarte ya casi está.
Él le ignoro para acercarse y darle un beso en la frente, poso su mano en el vientre apenas visible.
— Mejor ve tú a sentarte yo te sirvo.
— Pero vienes cansado...
— No, te ves pálido ve sentarte.
Taehyung hizo caso y se quedó paciente en espera de su esposo.
— ¿Tuviste ascos?.
— No hoy no tuve ninguno.
Dejo el plato frente a él y antes de que taehyung tomara la cuchara el la tomó soplando para darle.
— Debes comer un poco más mañana traeré un trozo de carne y te la prepararé.
El doncel asintió ante lo dicho por su esposo, Jungkook siempre era tranquilo no era como los otros hombres que tomaban cualquier excusa para golpear a sus parejas así que se sentía afortunado por eso, había vivido en un hogar donde su padre disfrutaba de maltratar a su madre y un día la mato. Quedó solo con su abuela quien le dio su bendición cuando le dijo sobre Jungkook, un muchacho que había conocido en el mercado cuando él llevaba elotes en un costal.
El miedo de ser un mal cónyuge se disipó con el tiempo, aunque el único palpable era del de perder a su bebé, algunas parteras siempre decían que el primer hijo casi siempre moría él tenía pánico ante eso y lo había hablando con Jungkook quien desde el primer momento le había dado palabras de aliento quizá durante la noche cuando taehyung dormía tomaba un rosario rezaba aunque él no se consideraba tan devoto.
Los meses pasaron cuando estaba a nada de dar a luz la hermana mayor de Jungkook se había ofrecido a ayudarle para cuando el bebé naciera.
Aquella noche el silencio era espeluznante solo los quejidos de dolor por parte de taehyung eran escuchados en la choza habían llamado a la partera, aún con la negativa de la mujer para no dejar entrar a Jungkook se negó por completo y sostuvo a su esposo limpiando su sudor y he intentando distraerle.
— Vas a estar bien tú puedes.
— Me duele mucho, demasiado.
El llanto de pequeño llegando al mundo sembró gran felicidad en el matrimonio, taehyung estaba encantando contando los pequeños dedos en sus manos y acariciando su carita.
La hermana de Jungkook los observaba sumidos en su mundo y antes de se dieran cuenta salió de la choza en dirección a la casa de sus padres.
— Es un varón nació a media noche.
El anciano sonrió con felicidad.
— Escúchame Lupe debes impedir que lo bauticen convéncelos de venir cuando Taehyung recupere fuerzas yo me encargaré de lo demás.
Sabía que lo estaban haciendo estaba mal pero aún con todo eso sé envolvió en su rebozo y salió de la casa.
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VAQUITAS|KOOKTAE|
FanfictionSolo ellos siendo felices en su bonita casa de campo y agrandando su familia. Porque para Jungkook lo más importante va a ser tener feliz a su vaquita. Hibridos Boy pussy Boy tits Lactancia Mpreg