Cap 05| Fantasía acosadora

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Era pasado de la siete de la mañana, mí cuerpo seguía agotado como si todas las horas de sueño que tomé fueran en vano. Bostezo largamente, comencé a desperezarme, mis párpados pesaban bastante dificultando abrir mis ojos con facilidad. Muevo mis manos debajo de las almohadas hallando mí varita, la agite haciendo que las sábanas se doblarán por si sola, casi eran un sobre esfuerzo mantenerme parado, y más lo es caminar hasta el baño, bostezo de nuevo, comienzo a despojarme de mi ropa con languinidez. La frialdad del agua ayudaba a despertarme mas no lograba acabar con la ofuscación, es pesado que los primeros recuerdos del día sean los que tanto me esforcé en alejar, aquellos recuerdos que no me dejaron tranquilo ayer, comenzarán a fluir ahogado mi mente.

El agua recorrer mi cuerpo eran caricias que se mezclaban con la imaginación creando falsas ilusiones, que todo conducía solo a recrear de nuevo la escena de ayer. Pasé mi mano por todo el rostro buscando concentrarme en otra cosa que no sean típicas fantasías, intento extraer cualquier otro pensamiento que no sea simple fantasía, pero no duraba mucho, siempre volvía al mismo escenario de cinco malditos segundo, una y otra vez desde que desperté. Lo peor es que mí cuerpo era receptivo, le encantaba las fantasías creadas por mi ingeniosa y traicionera mente, con el fin de satisfacer sus deseo libidinoso.

Que débil es la carne y que traicionera es el mente, solo el orgullo lograba imponerse entre esos dos.

Lo frío del agua quedó en el olvido con el considerable aumento repentino de mi temperatura corporal, mi piel era hipersensible y se estimula con el mínimo toque, apreté fuerte los labios cuando sentí la sensación de tirón en la zona sur. Que innecesario resultaba estás bajas pasiones cuando no existía la intención de cumplir su propósito, sin embargo la sensación de incomodidad me obliga a obedecer sus caprichos ¿cuan degradante sería tener sucumbir a algo tan... tan primitivo? Ni siquiera quería considerar en pensarlo, eso solo aumentará mi disgusto una vez que termine con esto.

Los dedos toqueáron la punta ligeramente viscosa, me estremeció esta sensación al cual no estaba acostumbrado. Suspiré ya rendido al saber que no podía seguir prolongado algo que ya no se podía evitar sentir, rodeé con la mano izquierda el falo erectil moviendo abajo y arriba repetidas veces. Maldición, ahora no soy tan diferente de Avery o Mulciber, esto es tan repugnante, pero debía seguir haciéndolo. Cerré lo ojos, no sabía si esto ayudaría a disminuir la vergüenza, empero funciona ya que me hizo sentir menos cohibido, en consecuencia mi imaginación volvió a trabajar. Ya no solo es la efímera sensación del recuerdo suave de sus labios unidos a los míos, es el olor que desprende sus rizos perfumados, de cuando tuve la oportunidad de enredar mis dedos en su esponjoso cabello, del como ella se veía tan vulnerable a mis intenciones, tan mansa como un corderito. Aaah... El rojo tan perfecto de su sangre, me enloquecía volver a pensarlo, o de como ella hundió sus garra en mi brazo, el color de sus ojos, del como se mueve sus labios cuando lee en silencio. Son todas una combinación de recuerdos, pensamientos y fantasías de ella que me llevan al culmine de mi placer.

𝙇𝙊𝙑𝙀 𝙄𝙉 𝙋𝙎𝙔𝘾𝙃𝙊𝙎𝙄𝙎 | 𝐓𝐎𝐌𝐈𝐎𝐍𝐄Donde viven las historias. Descúbrelo ahora