¿Es un manager?Sí, y se supone que no debería gastar dinero a la ligera, pero Uli, es así. Ay mi caillou.
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Agg, que asco, sigo sin encontrar a Ulises y solo veo mierdas. No sé cuantas mujeres he rechazado ya. La puerta es lo único que me ubica de dónde estoy. No me gusta este siti-. ¡Lo he visto!
-Ulises, Uli- Me muevo empujando a la multitud. Como me lo imaginaba estaba en las tragaperras.
-ARNAU- Me ve y me abraza. Huele a alcohol, creo que está borracho.
-Ulises, ¿Tienes suelto?- Ulises me mira y cambia la cara de una alegría a cansancio
-¿Me encuentras y lo primero que dices es si tengo suelto?
-Amm sí
-Que imbecil eres, toma- Me da tres euros, le agarro la mano y lo llevo a la puerta.
Pongo el dinero en la puerta y se acaba abriendo. Entramos a un pasillo oscuro. ¿Qué putas es esto? Seguimos andando, cuadro de abuela, cuadro de abuela, antorcha rara, cuadro de abuela, puerta, y... Au me acabo de chocar con una pared. Ulises se ríe de mi.
-Cabrón me he hecho daño- Empiezo a reírme también
Abrimos la puerta encontrandonos algo aún peor de lo que había detrás. Trafico de mujeres -y niñas- lo peor de todo es que lo llevan algunas mujeres. Una de ellas se acerca a nosotros.
-Buenas noches señores ¿Buscais a alguien?- Trago grueso, me duele lo que voy a decir.
- Venimos buscando a la señorita Hernández- La mujer cambia la cara y nos mira seria.
-Ella no está a la venta, ¿Cómo sabéis que está aquí?- Mierda, mierda, mierda y más mierda.
-Nos lo anunció el jefe, no venimos a comprarla- Ulises mi salvación, te amo guapo.
-Está bien, tch, vosotras, novatas traedla- Uf, voy a poder verla después de días no me lo creo.
Pasan un par de minutos y nos cierran la puerta. ¿Qué? ¿Por qué? Ni idea pero Ulises me arrastra pasillo fuera.
-¿Qué haces? La ibamos a ver.
-No Arnau, nos iban a traer a otra persona- Parece que se le ha ido el alcohol del cuerpo.
-Vale..- se me acaba de ir toda la ilusión.
Uno, dos.. ¿Y Karchez? Me falta un crío, ¿Dónde lo deje? Ah sí, en las mesas. Vamos a volver a intentar sacarlo de allí. Espero poder hacerlo, me siento un inútil. No encuentro a Lía, no he podido sacar de las mesas de póker a Karchez, casi caigo en una trampa.. Estoy siendo inútil en el "rescate". Vamos a las mesas de póker, yo con la cabeza gacha. Llegamos y Uli me tira de la manga para que mire. Miro donde señala y veo a Karchez como... no sé en que estado estará pero sobrio no es uno de los que podrían ser. Nos acercamos a su mesa, me toca improvisar a mi o a Ulises. Miro al Caillou y este también me estaba mirando. Él asiente, dandome a entender que hable yo.
-Carlitooos, nos tenemos que ir ya, los viejos nos reclaman en la limu.- Karpeta me mira extrañado, y al cabo de unos segundos reacciona, se levanta de la mesa, esta vez si se lo permiten
-Ciau, señores, he de irme- Se despide y uno de ellos sonrie alviado.
Salimos del casino y al fin tomo aire fresco. Nos esperamos a que Kar deje de estar en.. ese estado.. unos minutos después sigue igual pero mi paciencia se agota. Me giro hacia Ulises y este ya me estaba mirando.
-¿Y si volvemos adentro?-Propone Ulises
-Pero no tenemos nada de información, además hemos dicho que nos esperaban fuera, si nos ven dentro de nuevo qué haremos- Hablo yo, Kar solo nos mira.
-¿Volvemos mañana?-Anda mira me va a dejar de mentiroso, ahora se ha metido en la conversación.
-Está bien.
Nos montamos en el coche y llevamos a Kar a casa.
-Arnau, ¿Puedo quedarme en tu casa? Es que me da miedo estar en la mía solo- Habla dudoso
-Sí, no te preocupes, quedate.
Y así conducimos hasta mi casa, le doy la llave del garaje y aparcamos dentro. Una vez parado el coche, subimos a mi casa y yo me tiro al sofá. Se que estoy preocupado, y.. y esto no va a significar nada, solo quiero desestresarme, lo juro. Le digo a Ulises que venga y se siente a mi lado. Pongo algo de música cualquiera y le miro.
-Arnau, me pones nervioso mirandome así- Le pongo la mano en la pierna.
-Perdón, es que- Dudo si decírselo o no, mejor no, más tarde si eso.- Si quieres comer algo
-No gracias.
Nos pasamos un rato hablando de cualquier cosa, aún estan esas ganas ahí, pero me alegra volver a estar como antes. Pensando y pensando me acuerdo de mi pequeña esperancita. Nunca me paré a preguntarme cómo la conocí.
Fue un día, hace muchísimo tiempo, yo tendría unos 7 u 8 años, iba de camino a mi casa, me pareció ver una chica sola en un parque y me acerque a ella, Arnau chiquitito eras tonto. Ella me dijo que estaba sola porque no tenía amigos, todos la dejaban de lado cuando decia su sueño. Al final me acabe haciendo amigo suyo. Ibamos todos los días a jugar al parque en el que la conocí. Ahora debe estar sola, como ese día, seguramente asustada o agobiada lleva ya unos días allí.
Cuando salgo de mi viaje astral, volviendo a la realidad veo la mano de Ulises siendo agitada hacía mi.
-Arnauuu, ¿Me estas escuchando?
-Am no, ¿Qué decias?
-Nada, ya nada.- Ammm vale, supongo, esta raro este señor.
Ulises mira mi mano, ¡Hostia no me había dado cuenta tengo la mano puesta en su pierna aún! La quito cuando me doy cuenta pero el la pone de nuevo, su mano puesta en la mía, él subiendolas despacio, no sé que hacer la verdad, llega hasta arriba y se para. Ahhh no se que hacer.
Quiero besarle. Es verdad, llevo deseandolo hace tiempo, pero no encuentro el momento ideal. A lo mejor los momentos ideales no existen, y las personas que te dicen siempre: "No dejes para mañana lo que puedes hacer hoy". A lo mejor ahora es el hoy.
Me acerco a él, lo veo de cerca. Él también se acerca y acabamos besandonos. El beso con el paso del tiempo pasa de ser un beso delicado, con ternura, a uno desesperado, llevamos mucho tiempo los dos deseando esto.
