Prometida al profesor

Capitulo #14

Lilas...

Cuando llego a casa y cerro la puerta a sus espaldas. Se dejó caer al suelo lentamente. Las emociones la embargaron con mucho fervor mientras los recuerdos de su profesor se repetían en su mente. Era difícil de creer como todo había cambiado en cuestión de semanas y que en poco tiempo sería la señora Snape.

—¡Hija!—Su madre corrió hasta ella preocupada y la tomó de las mejillas—¿Que fue lo que paso? ¿Estás bien?

Hermione la miró pero no hallaba las palabras para contestarle. ¿Si estaba bien?. Ni siquiera podía sentir las piernas. De todas formas se las arreglo para contestar que estaba bien.

Su madre la abrazo y la escucho sollozar en su cuello y balbucer cosas sobre que lamentaba que se encontrará en esa posición. Que debiera casarse con el para salvarlos.

—¡Esta bien mama!

Le respondió y se levantaron del suelo.

—El profesor es un hombre bueno, nos casaremos y seis meses despues me dara el divorcio.

Su madre asintió y dejó que se marchara con cierta culpabilidad. Hermione se alejo y  penso que lo mejor sería  descansar ya que tendría que trabajar mañana  pero no podía dormir, sus pensamientos regresaban a lo sucedido ese día. Después de varias horas intentándolo se dio por vencida y se levantó justo en el momento que escucho los picotazo de cierta ave en su ventana.

Hermione prácticamente corrió a la ventana y después de abrirla se encontró con una ave malhumorada por tener que regresar dos veces al mismo lugar desde lejos. Era una pequeña caja que suponía estaba hechizada para que fuera más pequeña y no pesará tanto. La curiosidad la estaba matando por que sabía que el remitente era su profesor y no le regalaría algun juguete tonto de Quidich o algo referente a una broma. Con un movimiento de varita la caja regreso a su tamaño y si corazón palpito al tener el justo tamaño de un libro.  Rápidamente se deshizo del lazo negro y su ojos no dieron credito al ver un libro que se llamaba "El origen de los encantamientos"

Si eso no podía conquistar su corazón, no sabía que lo haría. Aún más cuando encontró la nota que Snape le había dejado entre sus páginas. Una con la letra elegante al que estaba acostumbrada en el libro de pociones del príncipe mestizo que Harry se había quedado por un tiempo. Letras que ahora se dirigían a su persona.

Pensé que le gustaría tener un poco de lectura esta noche, se de su gusto por este tipo de lectura. Que pase bonita noche.

Hermione sonrio llevandose el libro al pecho y se sumergio es su interesante lectura por muchas horas como hace mucho no lo hacía. Hace mucho tiempo que había querido pasearse por una biblioteca para escoger algo de lectura al ya no tener la inmensa biblioteca de hogwarts a su disposición pero no había tenido suficiente tiempo en esos últimos meses.

Al día siguiente se levantó aún con libro en su regazo y pensó  su reciente compromiso. Aun no lo podia creer de no ser por la pesada joya en su dedo. Una que paso varios minutos  mirandola mientras recordaba ese magnifico beso que se habian dado. Si era sincera para si misma, el profesor se había convertido en alguien especial aun que era muy pronto para decir si eso era amor o no. No quería forzar a su mente a decidir  pronto, no cuando tenia mucho tiempo por delante juntos.

Ya en el trabajo la locura era evidente, el ministro de magia estaba a punto de dejar el cargo y los candidatos comenzaban a colgar grandes pancartas con sus rostros. Habían el doble de aviones de papel por todos lados y los magos y brujas no caminaban. Corrían. Sin embargo y en medio de todo ese caos las miradas de su compañeros estaban sobre ella. Compañeros que nunca antes les había hablado por no ser de su departamento pero que ahora parecía hasta saludarla.

No le quiso prestar mucho atención y continuo su camino. Pero le volvió a llamar la atención su escritorio. La cantidad de papeles en ella era muy normal pero lo que si no era normal era el montón de aviones en su escritorio a demás de un un vociferador.

El primer avión que abrió decía algo sobre querer una entrevista pero cuando estaba a punto de leer el por qué. Una de sus amigas del trabajo tiro su puerta y le tiro una revista de corazón de bruja. Su cara debió ser un poema. El profesor Snape no mentía cuando dijo que esa escarabajo de Steeker estaba muy cerca de ellos vigilandolos. Lo que si no esperaba es que la noticia estuviera en la portada de la revista corazón de bruja y que además tuviera un encabezado digno de la atención del público. "De profesor a prometido" "Un amor que surgió de la guerra o del aula de clases"

No quería leer más, no queria leer lo que se habia inventado a costa de que las personas compraran esa edicion. No quería saber de la forma grotesca habían pintado la relación. Dejó la revista por un lado, entendiendo las miradas de sus compañeros y temió que su reputación se fuera por el caño. Jamás tendría un buen puesto en el ministerio si las habladurías comenzaban. No lo merecia o si.

—¿No se supone que ibas a casarte con Ron Wesley?—Le pregunto su amiga y en su voz casi podía escuchar el reproche.

Hermione suspiro llevandose las manos a la cabeza y miro el vociferador. No le cabía la menor duda que ese pertenecía a su mejor amiga, a Ginny quien estaba muy ilusionada por que fuera de la familia. Ya ni siquiera sabía si entenderían que en seis meses sería libre o si de verdad quería ser libre.

—Es una larga historia, Elena.

Eleva estaba a punto de decir algo cuando entro otra de sus amigas, Parvati patil. Que llevaba en sus manos un ramo grande de sus flores favoritas. Lilas.

—¡No la molestes Elena, si un hombre no puede recordar cuales son tus flores favoritas, no la merece! En cambio el profesor es todo un caballero.—Dicho esto le paso el arreglo de flores el cuello tenia una tarjeta negra con letras plateadas.

Unas flores para que pienses en mi y no en la pésima idea de hacer pública nuestra relacion en una revista amarillista...

...

¡Hola mariposas!

¡Regrese!

A que no es todo un caballero...

Nos vemos pronto
Besos y abrazos
Lia Diso 🖤