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Jungkook no había dormido en toda la noche, igual que el resto de noches de los últimos meses, pero aquel día se sentía más descansado que cualquier otra mañana. ¿El motivo de ello? El chico que estaba durmiendo a su lado, prácticamente acurrucado a él.

Para él, tener a Jimin durmiendo como una fuente de aroma constante durante toda la noche, hizo que Jungkook se pasara la noche sonriendo y aspirando ese aroma que tanto le tranquilizaba. Por no decir, que algún que otro beso le robaba al chico.

Pero, ¿cómo habían llegado a compartir cama? Pues todo comenzó, después de que Jimin confesara sus sentimientos...

La noche anterior...

Jungkook no podía dejar de mirar a Jimin, en busca de un solo signo o gesto que le ayudara a indicar si Jimin le estaba mintiendo o no. Pero, después de varios minutos de silencio, Jungkook pudo asegurarse de que el chico frente a él no mentía.

-¿Qué? -se limitó a decir Jungkook, totalmente embobado y sin palabras. Lo que hizo, que Jimin soltara una pequeña risa y se sonrojara después.

-No pienso repetirlo, si es lo que esperas. -dijo Jimin, riéndose bastante bajito.- En fin... Solo quería que lo supieras... Mañana empiezo con mi nuevo trabajo, así que será mejor que vuelva a casa para que pueda darle la noticia a los chicos de que ya no llevaré ese estúpido uniforme.

-¿Puedo acompañarte? -dijo Jungkook, haciendo que Jimin se sonrojara.- Hace semanas que no veo a Seokjin hyung.

-Seokjin tiene 26 años, solo es un año mayor que tú. Yo me llevo cinco con él y no suelo llamarlo "hyung". Ni siquiera te lo digo a ti.

-Ni lo hagas, prefiero que me llames Jeon antes de que me llames así. -dijo Jungkook.- Me llamas hyung y te empiezo a llamar enano o niño.

-Entiendo tu punto... -dijo Jimin.- Pero, solo saludar. Luego, te vas, que tengo que dormir.

-De acuerdo, solo saludar. ¿Quieres ir en Bam otra vez?

-No, prefiero ir en Mochi. -dijo Jimin, el cual era un caballo blanco que Jungkook le había comprado para que pudiera ir y volver al castillo sin necesidad de correr durante una hora por el bosque.- Pero, puedes coger a Bam si quieres.

-¿Le has puesto Mochi? ¿Por qué?

-Porque se te escapó a ti cuando me comparaste con uno delante de tu madre, sin saber que estaba cerca escuchando todo. -dijo Jimin, quien escuchó la conversación cuando le enseñaba el castillo a su familia.- Así que, lo llamé así.

-Y... ¿Por qué escuchaste una conversación ajena? -le preguntó Jungkook, acercándose al rostro de Jimin.- ¿No sabes que es de mala educación espiar conversaciones ajenas?

-¿Y tú no sabes que es de peor educación hablar de alguien a sus espaldas? -preguntó de vuelta Jimin, sin perder la sonrisa.- No puedes ganarme, Jeon, así que te recomiendo dejarlo. Y vamos, que se me hará más tarde. Taehyung ya debe de estar preocupado y al borde del infarto.

-De acuerdo... -dijo Jungkook, antes de que los dos salieran de la habitación de este y se dirigieran al establo.

Durante el camino, Jimin saludó al guardia Junghyun, con el cual se habían hecho buenos amigos cuando comenzó a trabajar. Y Jungkook lo agradecía bastante, ya que Junghyun era un chico de su confianza y sabía que protegería a Jimin sin dudarlo sin que él mismo se lo pidiera. Aunque, en un principio, Jungkook pensaba que había algo más que una amistad entre Jimin y el guardia, lo que Jimin le acababa de decir quitó cualquier tipo de sospecha y celos que el duque sentía.

Aeternus [Kookmin Au]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora