Teacher! Can I Kiss your baby? Please.

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Todos habían salido juntos a tomar helado, era muy gracioso ver a los empleados yendo de un lugar a otra tratando de atender a dos o tres al mismo tiempo, más cuando les tocaban los menores ya que estos no se decidían y los hacían cambiar de gustos a cada rato.

Geonhak estaba sentado al lado de Yuqi y Dongju, el mayor ya había aceptado "una alianza de paz" únicamente por la omega.

Dongmyeong se sentó frente a ellos, junto al gran ventanal de la calle con su bebé y su destinado. Yuqi y Hwanwoong hablaban sobre bebés mientras Myeong miraba la gente pasar. Nunca se espero que un chico apareciera de la nada frente a él y golpeada el vidrio con sus dedos con una gran sonrisa en sus labios.

— ¿Lo conoces?— preguntó Dongju y él negó con la cuchara de helado en sus labios aún.
Aquello hizo que su destinado pasará su brazo por sus hombros protectoramente mirando al chico que río al ver aquella y se alejo dando saltitos alegres.— Vaya hermanito, se nota que heredaste el encanto Hwang.

— No sé de qué hablas.— negó mirando a su bebé con una gran sonrisa ya que este tiraba su camisa para llamar su atención. Lo tomo en brazos quitandolo de las piernas el mayor y lo coloco en las suyas.— Mírate nomás esas mejillas todas manchadas.— río dándole un beso en la frente.— Eres una cosita muy tierna, amor.

— Lo sé, cariño.— respondió Hwanwoong con una sonrisa juguetona haciendo reír a todos menos a Dongmyeong porque se le paró el corazón en ese instante por la respuesta.

— ¡Riki, Jeongyeong dejen de hacer renegar a los encargados!— regaño Minho a los niños que seguían haciendo sufrir al pobre chico con las elecciones de sus sabores de helado.

— Ustedes dos también.— regaño Changbin a los mellizos mientras le daba de.comer helado a su pequeño Dada.

— Bueno, papá.— contestaron al unísono.

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— El viernes tengo partido.— susurro Myeong mientras caminaban por el centro comercial.— De fútbol... La final.

— ¿Me estás invitado a tu partido?— preguntó juguetón tomando su mano.

— Sí.— asintió sonriéndole nervioso. Ellos solo habían llegado a eso, a tomarse las manos, pero ahora se sentía distinto, quería más, como lo de la cafetería.

— Bueno, si el capitán del equipo me lo pide no puedo negarme.— Dongmyeong sintió su corazón acelerarse a mil y sonrió tan grande como nunca antes lo había hecho.

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El gran día había llegado. El viernes estaba soleado pero con una brisa fresca, anunciando un muy buen clima para aquel partido de fútbol tan esperado.
No habían tenido clases en la escuela ya que era la gran final intercolegial y toda la escuela quería asistir para apoyarlos

Terminó de preparar sus cosas mientras sus hermanos y hermanastros terminaban de alistarse.

— Yuqi no se siente muy bien hoy así que Dongju quiere quedarse y Felix también se quedará aquí con uno de los autos.— aviso su papá HyunJin a todos.— Tendremos que hacer dos viajes así que espero que estén todos listos en diez.

— ¡Sí papá!— contestó y también escucho desde otras partes de la casa gritar lo mismo.

Se colocó su bolso en el hombro y se miro al espejo sonriendo justo cuando el timbre sonó.

— ¡Dongmyeong, tu novio vino!— escucho gritar a Riki y salió corriendo escaleras abajo para ver a Hwanwoong junto a su bebé, este último estendiendole las manitos bien lo tuvo en frente.