|Chapter 8|

504 61 2
                                    

~Lord del Este~

Dando un hondo suspiro y dandole un último golpe al demonio que tenia en frente Hiroyuki, se dispuso a ir a donde se encontraban las energias de los pocos humanos vivos en el lugar, después se encargaria de aquel misero demonio, por ahora lo impor...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Dando un hondo suspiro y dandole un último golpe al demonio que tenia en frente Hiroyuki, se dispuso a ir a donde se encontraban las energias de los pocos humanos vivos en el lugar, después se encargaria de aquel misero demonio, por ahora lo importante era rescatar a su gente, si su gente al final de cuentas pertenecian a SU Reino.

Agarrando por el cuello a unos de los demonios que seguia consciente y dandole una mirada intimidante hablo.

Habla, ¿Cómo puedo llegar sin problemas donde están los humanos?

—S-señor... E-ellos están en la parte más profunda del castillo principal del señor Tao Lî, l-lo llevaré ahí sin que él se entere...

—Pues más te vale que asi sea, si quieres mantener tu vida niño.

—S-si. —Mencionó temblando un poco por la presencia del demonio que tenia en frente.

—Bien.

Dijo sin más y el Joven demonio comenzó a guiarlo por los caminos que conocia para llegar donde los humanos sin que Tao Lî se enterase.

Pasaron por varios pasillos cada vez más adentrandose en lo profundo del castillo, el joven demonio miro con nerviosismo al de largos cabellos rojos como la misma sangre, ¿No le haria nada a los humanos ¿o si? Y se preguntarán porque un demonio como él le debe importar eso, pues la respuesta es muy sencilla, él entre los demonios era conciderado un tanto peculiar por no decir que raro, ya que a diferencia de disgustarle los humanos le gustaban pues creian que eran criaturas interesantes y le gustaba relacionarse con ellas.

Suspiro apretando sus manos entre si, hace poco más de un año habia llegado al Reino del Este y fue reclutado por el ejercito de Tao Lî por sus habilidades, se nego rotundamente pero al final termino aceptando pues habia notado el estado de los humanos que habitaban el Reino y aún sabiendo que no podria hacer nada útil porque no era rival para aquel demonio, se encargo de ayudarlos y brindarles alimento al menos para que no muriesen de hambre.

Se detuvieron en frente de una gran puerta de color negro, la cual tenia varias decoraciones un tanto extrabagantes.

—¿Es aqui?

—S-si, p-pero... —Dijo volteandolo a verlo asustado— ¿Q-qué piensa hacerle a los humanos señor?

—¿Umm? ¿Te preocupan? —Curioso alzando una ceja a lo cual el contrario asintió rápidamente— Vaya, que demonio tan-

—Raro... Lo sé, me lo han dicho muchas veces. —Bajando la cabeza.

—Iba decir que interesante, pero en fin, respondiendo a tu pregunta ... ¿Cuál es tu nombre?

—S-soy Kai Tenru, señor.

—S-soy Kai Tenru, señor

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
✯𝕽𝕰𝖄 𝔇𝔈𝔐𝔒𝔑ℑ𝔒✯Donde viven las historias. Descúbrelo ahora