Hemoglobina [namkook]

Lacrimogena

-Buenos días, Jungkookie ¿Esta bien si te digo Jungkookie? -Entró Namjoon a la habitación como un huracán, de prisa y agitado por su retraso pero de muy buen humor. Sin embargo, su paciente no estaba en su cama y todo parecía apagado -¿Jungkook?

-P-por favor, haga q-que pare -Escuchó apenas su respuesta estrangulada, degradandose en una fea tos seca y sin control -Duele

Namjoon encendió las luces velozmente con un extraño sentimiento viajando por sus extremidades. Siguió su voz hasta conseguirlo de rodillas a pies de la cama, las gotas de sangre cayendo de su rostro haciendo un fino camino hasta las baldosas donde apenas de apoyaba.

-Jungkook ¿Que sientes? Estás sangrando, déjame ver -Se arrodilló junto a él. Con calma, intentó apartar las manos de Jungkook sobre su cara mientras este las retorcía sobre sus ojos violentamente pero no le dejó moverlas.

Su rostro estaba rojizo e hinchado, las gotas rojas bajaban por sus mejillas. Namjoon había imaginado ese momento en su cabeza pero, en la realidad, nunca lo había visto llorando. Sentia muchísima curiosidad, pero el episodio frente a él no era sólo un llanto. Su respiración estaba dificultada en extremo, su voz apenas audible, sus lágrimas salían y él se quejaba con agonía -Dime que pasó

Jungkook bufó con molestia, hizo el intento de reclamar pero su garganta estaba en llamas mientras sus ojos cruzaban el infierno, volvió a gemir sin remedio. Su vista era inútil, sus pulmones buscaban aire con desesperación pero cada vez que tomaba un respiro ardía lo suficiente para no querer respirar en absoluto, sentía que estaba muriendo.

Buscando algo en que sostenerse solo atinó a apoyarse en él pecho de Namjoon, tirando de su bata blanca para estrujarse los ojos y la nariz con agresividad. El dolor no daba tregua

-Haz que pare, ya

Namjoon sostuvo a Jungkook cerca por su cintura, alzando su menton con seriedad y apartando sus manos a la fuerza. Sus ojos inundados en rojo respondían bien a la luz, pero las lágrimas salían en cascadas, sus labios ganando tonalidad azulada. Apenas respiraba. Namjoon negó con frustración y buscó el comunicador -¿Hye? Necesito oxígeno y una camilla en la habitación A12, vamos a hospitalizar ahora

-Enseguida, doctor Kim

-Que es... -Namjoon, en un intento furioso por adelantarse escaneo la habitación en segundos y notó una ampolla en la papelera: Clorobenzilideno malononitrilo -¿Es eso?

Jungkook parecía saber de lo que hablaba y asintió con dificultad -¿Como mierdas te cayó eso? -Jungkook, en su estado, fue capaz de lanzarle un pequeño golpe en el costado y Namjoon nunca se había sentido tan aliviado de que alguien tenga el ánimo de golpearlo -Está bien, está bien, no es tu culpa. Eso debe dolerte horrores pero estarás bien ¿vale?

Volvió a tomar el comunicador -Hye, date prisa por favor. Aparte necesito antiacido diluido en agua, hidróxido de magnesio e hidróxido de aluminio. La necesito ya, en este momento

-Vamos en camino, doctor

-Dejará de doler ¿ok? Lo estás soportando bien. Ahora, respira como te indicaré

Jungkook se sentía en todas partes pero escuchó esas palabras con mucha atención, y supo que el daño ya estaba hecho. El creía en esas palabras, él tenía el pecho apretado y dolorido pero las palabras de Namjoon llegaban como anestesia. Ya creía en Namjoon, creía en él, en los brazos que lo sostenían, en un corazón que acababa de conocer, estaba jodido.

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*: Clorobenzilideno malononitrilo: polvo blanquecino, es un muy famoso gas lacrimógeno. Irrita las membranas mucosas de los ojos, nariz, boca y pulmones lo que provoca estornudos, tos, llanto, dificultad para respirar, inflamación de la piel y mucho dolor.