Y cuando quiso darse cuenta ya llevaban más de un mes conviviendo juntos en aquella gran mansión, las cosas cambiaron y sorprendentemente mo hicieron para bien, no sólo había notado como si hija estaba más alegre de lo normal, si no que él también lo estaba, la presencia del Heelshire le agradaba, y tal vez hasta algo más, era extraño esta sentimiento que poco a poco crecía en su pecho. Y por su parte aquel inglés se sentía extrañamente feliz, a veces se pregunta si lo que siente por aquel hombre lleno de pecas era amor, pero la verdad es que ni él sabe que es el amor.
El amor es algo que aún no había podido descifrar al igual que muchos antes que él, se preguntaron que es este sentimiento, poetas, escritores, músicos y personas ordinarias como él, algunos dicen que se trata de una dulce agonía, otros que no es más que un vil engañó, pero quien sabe lo que realmente es, ni las mentes más brillantes lo habían resuelto, además, cada uno tiene su propia definición del mismo, aunque él lo único que posee es la definición de otros sobre el tema, según Freud el amor se trata de la otra mitad de la vida de una persona; para Fromm, al igual que la libertad, el amor se trataba de un acto de voluntad; y para Edgar Allan Poe, el amor que él define sólo es posible en un día imaginario, un día puro. Es un amor inhumano, de dos seres celestiales desprendidos de su aparatosa mortalidad. Uno se acercaría al oído y le dirá que deberían quedarse así, entrelazados, como en un beso mistico, para toda la vida. Pero también habían otros como Gabriel García Márquez, quien dijo que el amor era un sentimiento contra natural, que condenaba a los desconocidos a una dependencia mezquina e insalubre, tanto más efímera cuanto más intensa.
Quizás, está era la más cruda de todas las anteriores, pero lo que tienen en común todos ellos es que el amor es y será un misterio para todos los seres humanos.
Cuando te enamoras es algo espontáneo, jamás palabras a quien a mar, tan sólo sucede de pronto, y de la persona que menos esperas, y con este par fue algo espontáneo, ellos antes habían sufrido por amor y creían que ya nunca más este sentimiento volvería a surgir, pero de no ser porque se mudó a esa gran mansión, tal vez ninguno de ellos hubiera vuelto a experimentar el amor.
Para uno de ellos surgió desde el primer día sin ser consciente de ello, y este amor había ido en aumento con el pasar de los días, lo fue conociendo cada vez más, viendo incluso ese lado ridículo de él, le fascinaba cada pequeña faceta del contrario, y cuando quizo darse cuenta de este sentimiento, ya estaba perdidamente enamorado de aquel hombre joven lleno de pecas. Y para el otro fue diferente, más complicado, había salido de un matrimonio difícil hace un tiempo y ahora, se había vuelto a enamorar, está vez de un hombre, y a diferencia de la última vez que estuvo con alguien está vez era mutuo.
Recuerda perfectamente que con su ex esposa él iba a terminar, pero el justo el día en el que lo iba hacer ella le anunció que estaba embarazada de Nila, y no tuvo más opción que casarse con ella por el bien de la niña, pero un par de años después terminaron por lo mismo, por el bien de la pequeña, por esa razón tuvo que llevársela con él a este país, en donde le pudo otorgar una mejor vida que la que tendría allí junto a su madre. Porque desde el instante en el que su pequeña nació, con apenas haberla visto sabía que haría todo por ella, hasta lo imposible, ella se convirtió en su todo en cuestión de segundos.
Esa tarde se desocupo rápido para poder llegar un poco antes a las clases de baile de su hija antes de que estás terminen, quería verla bailar, además, ese día eran al fin las audiciones para la abra de La bella durmiente, y Nial habia practicado arduamente para conseguir el papel de Maléfica, porque desde que habían visto esa película a su pequeña le encanto esta villana. Al llegar la pudo ver bailar, verla como se movía con agilidad y gracia, tal vez solo lo decía porque era su hija y demás, pero juraría que no había ninguna otra niña que supiera bailar con la misma pasión y dedicación que su hija.
Terminada las prácticas no pudo evitar aplaudir en ovasion a su niña, atrayendo de inmediato a atencion de todos al ser el unico que aplaudía. Algo avergonzado se sento y espero ansioso por la desición de la maestra, sonriendole a su pequeña cuando está volteo a verle, estaba nervisosa, lo podía notar en sus ojos.
Se levanto de inmediato cuando vio a su hija correr hasta donde el se encontraba, llevando puesta la mejor de las sonrisas- ¡Lo conseguí papi! ¡Lo conseguí! -no paraba de repetir dando pequeños saltos de festejo- ¡No puedo creer que lo conseguí!
Podía sentir las miradas de las demas madres, de seguro pensaban que ella habia conseguido el papel principal, no se molestaria en corregirlas, que piensen lo que quieran, él no dira nada la respecto, estaba de muy buen humor como para que esas mujeres lo arruinen con uno de sus comentarios fuera de lugar.
- ¿Que te parece si vamos por algo de helado para celebrar? -dice, tomando la mochila de su pequeña.
- ¿Pero que hay del señor Heelshire? -pregunta.
- ¿El señor Heelshire? -repite aún sin saber que tenia que ver este con el helado.
-No es justo que los excluyamos de la celebración-aclara-, vamos a tener que llevar el helado jasta la mansión así los tres celebramos.
No pudo aguantar sonreír con ternura-Me parece una idea estupenda.
- ¿Crees que le guste el de chocolate?
La pequeña fue divagando el resto del camino hasta la heladería acerca de que sabor de helado le gustará al señor Heelshire, era una niña bastante considerada, no lo podía negar, al igual que no podía negar que a él también sentía curiosidad de cual sabor le gustaría- ¡Que sea de frutilla! -exclamó a ver a otro niño llevar un helado de dicho sabor, cuando antes ya se había decidido por el de crema americana-Papi compra el de frutilla, porfis-uspirando con pesadez ordena el tarro de helado de sabor frutilla, con mitad de chocolate cabe destacar, en caso de que al Heelshire no le guste el de frutilla. Al salir de la tienda su hija no dejaba de mirarlo con recelo-La chica de la tienda te coqueteaba mucho como las mujeres en las películas.
- ¿Eh?
No lo había notado, había estado tan absorto en sus pensamientos que no lo noto, era preferible no pensar en ello más, aún tenían que llegar a la mansión para así poder celebrar los tres juntos como una familia...
Se sorprendió de su propio pensamiento, tan solo llevaban un par de meses conociendo juntos los tres, él y Brahms se había vuelto algo unidos se podría decir, y Nila lo adoraba, no, más bien lo admiraba, y sí, incluso se sentía algo celoso de aquel hombre por ello, pero no importa en realidad, lo único que le interesa es el bienestar de su hija.
- ¡Trajimos helado! -exclama sonriente, al ver al Heelshire.
Además duda poder lograrlo con él aquí, no podía seguir ignorando lo que sabe, pero piensa mantener la boca cerrada, por ahora, no estamos seguros.
[NOTA DEL AUTOR]
¡CHAN CHAN CHAN!
Tremendos efectos de sonido mandé, pero es para poner más suspenso y drama a esta bella historia, porque si damas y caballeros, en el siguiente capítulo Greta Evans hará acto de aparición.
Y no significarán cosas buenas, pero no diré más para dejar el suspenso.
Así que sin más que decir me despido aquí, nos leemos en otro momento, besito, besito, chau, chau 💕💕
ESTÁS LEYENDO
Señor Smith ᴮʳᵃʰᵐˢ ᴴᵉᵉˡˢʰⁱʳᵉ
FanficUn padre recién divorciado, se muda a Inglaterra junto a su hija, dispuestos a olvidar el pasado. No eran conscientes del gran peligro que corrían al mudarse a la mansión Heelshire, el mal acecha las paredes de su nuevo hogar, y deberían de seguir...