Break the rules ~ Tom Holland, Timothée Chalamet & tú

Capítulo 9

Camino en silencio como suelo hacerlo cuando vuelvo a casa luego de las clases en la universidad. A diferencia de otros días he decidido quedarme adelantando algunas lecturas en la biblioteca y no sé si he hecho bien, pues todo está más oscuro de lo que veía por la ventana. Subo el volumen de la música que me acompaña opacando el ruido de los autos que pasan de vez en cuando por las calles que me acercan a mí departamento. Sin embargo, el volumen no es suficiente como para ignorar los rugidos que produce mi estómago por hambre.

Unos cuantos minutos y ya me encuentro en alguno de los negocios que por suerte se mantienen un par de horas más abierto. No me complico en acercarme al sector de la confitería porque sé que unas oreo son una buena opción para salvarme durante lo que me queda de camino. Me muevo con confianza a pagar, y supongo que es mi concentración en aquel hecho la que no me permite notar que tengo compañía.

-Ha pasado un tiempo, ¿No crees? -esa voz traspasa la música que acompaña mis oídos y me deja estática.

-1 Libra -el vendedor ignora a la chica que se encuentra a mi lado. Supongo que es lo que necesitaba para reaccionar.

Le dejo el dinero sobre el mesón para agradecerle después. Doy media vuelta y con toda la velocidad que puedo tomar salgo de la tienda, más sé que no lo hago sola.

[...]

El muy increíble Danny ha quedado con su compañera de universidad, la que ha estado viendo más de lo que me agrada últimamente, pues siempre termina llevándome junto a él, como ahora.

-¿Puedes recordarme el por qué te acompaño? -pregunto haciendo mi molestia evidente.

-Su amiga, Timothée. Su amiga es mi objetivo -en cuanto termina de decir mi mano golpea su cabeza.- Auch.

-Eres un imbécil -espeto.- ¿Y ahora qué debes hacer por ella?

-Lo mismo de siempre, nada nuevo.

-Como sea, hazlo rápido. Las chicas están esperando en casa.

-Sí -eleva la vista de su celular.- Allí está -sigo la mirada de mi amigo y me detengo al igual que él.- Que raro, dijo que estaría sola.

-T/n -murmuro.

[...]

-Vamos, t/n. No puedes ignorarme toda tú vida -su voz deja entrever su frustración.

-¿Qué quieres, Jeaness? -me paro en seco al notar que no dejará de seguirme hasta que obtenga lo que busca.

-No... no sabía que te volvería a ver ¿Cómo estás?

Aquella calidez en sus ojos me traslada hacia el año pasado. Misma calidez que se mantuvo en su mirada cuando me dijo que lo que decían era cierto, que me había engañado, y no con una sola mujer, sino que con varias, porque eso me enseñaría a valorarla, porque eso me enseñaría que no era alguien a quien se le debía esconder, pues muchas la deseaban y ella podría tenerlas si así lo quería. Con esa calidez terminó por destruirme al decirme que mi familia tenía razones para no aceptarme, pues yo era cobarde, y lo sería siempre, y así como mi familia no me aceptaba, ella tampoco lo haría más.

-Bien, gracias.

-Cuando supe que te dieron el alta quise ir a verte, estaba preocup...

-Jeaness -el aire resuena al salir de mi boca.- Es tarde, debo volver a casa. Estoy bien si es lo que querías saber. Ahora por favor, no me sigas.

-Espera -su mano coge la mía.

Lamentablemente mi pesadilla no terminó al finalizar nuestra relación, al contrario, todo fue en aumento, como si de una bola de nieve se tratara, esta fue creciendo con cada caída libre que sufría.