CAPÍTULO 7

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ABOMINABLE

Horas del atardecer.

A sólo unos momentos para que el sol se ponga en el horizonte y el día para ellos comienzen.

Caminando por las calles de la cuidad sobre una zona poco concurrida y tanto evitada llegando hasta el edificio más destacado de este lugar.

Su aspecto es antiguo y rústico pero formidable en parte llamativo, ingresando en esta suena una campana colocado sobre la puerta de un vistazo al interior lo primero ala vista se nota que es una tienda de empeños de todo tipo de objetos.

Bienvenido.– Dice el sujeto del mostrador.

La persona que ingresa al edificio se retira la capucha que cubría su rostro de posibles informantes del enemigo o espias revelando una castañera de mejillas sonrojadas.

Disculpe vio el programa de ayer.– Ochako.

¿El de la mañana o el de la tarde?.– Mostrador.

El del medio día.– Ochako.

Solo veo el programa nocturno.– Mostrador.

Debería intentarlo, pero el de la madrugada es más entretenido y no olvide los bocados.– Ochako.

El sujeto del Mostrador presiona un botan bajo la barra y señala hacia la parte de atrás.

Dirigiéndose hacia el lugar entra en lo que parece ser una puerta oculta en la pared, bajando unas escaleras hasta llegar a otra puerta toca en estas y un orificio para la vista se desliza.

La persona del interior al verla habré las puertas mostrando en su interior un bar de bebidas.

Bienvenida de vuelta Uraraka-chan, no creí que te vería tan pronto.– Dice una persona vestido de guerrillero y con prótesis en todo su cuerpo.

Hola de nuevo John-san, solo fue ase una semana.– Ochako.

Lo se, pero ya sabes como soy, estar mucho tiempo aquí me aburre y no haya fuera matando chupasangres como en los días de mi juventud.– John.

Si John–san, ya me contastes cientos de veces en las que eras temido por los depredadores nocturnos.– Ochako.

Era tan temido que se necesitaron una brigada de nobles  hasta dos sangre real para matarme, claro los mate a todos  pero ellos terminaron matando mi carrera de Cazador.– John.

Ya me lo has contado, pero hoy vine para reponer algunas armas.– Ochako.

Claro lo siento si este viejo empieza a delirar, bien acompáñame y veamos que hay.– John.

Ambos avanzan hasta la puerta de una bodega, John las abre con unas llaves al ingresar parece un cuarto grande con docenas de armas de todo tipo colgado en estantes y en mostradores.

Los Cazadores necesitan cosas y no pueden comprar todo en una tienda cualquiera, el mercado negro no es una opción si sabes quienes lo administran así que ellos tienen su propia rama de comercio más oculta que la deep wed, con tiendas como estas en cada cuidad y Cazadores retirados ahora conocidos como Buhoneros para que los atiendan y dar consejos a sus compradores.

CAZADOR DE VAMPIROS Donde viven las historias. Descúbrelo ahora