×Our World×

×18×

La semana de olimpiadas pasó y las clases se retomaron en Dragons High, nuestro grupo de protagonistas tomaban atención a la clase de biología y anatomía. El tema de hoy: reproducción humana. Tema que fue el detonante perfecto para que muchos chicos de la clase, incluyendo el grupo de Lucas, le lanzaran miradas lujuriosas junto a ademanes obscenos a las chicas.

-No puedo creer que ese idiota no haya sido sancionado.- murmuró Brutilda a su gemelo en voz baja, mientras asesinaba con la mirada a Lucas, quien coqueteaba con una de las porristas.

El rubio frunció el ceño enojado viendo la escena.

-Es un maldito acosador y se pasea por la escuela como un puto rey. Todo porque Grimmel lo consiente y no lo castiga.- espetó Brutacio un poco más alto que si hermana, haciendo que Astrid pueda escucharlo.

La Hofferson desvío su vista del pizarrón a su acosador, quien claramente sintió su mirada, pero él no volteó a mirarla de vuelta, puesto que también sentía la penetrante mirada esmeralda del Haddock. Astrid volvió a prestar atención a la clase, al mismo tiempo que apretaba con insistencia y frenesí; su novio la vió de reojo, pero prefirió ni decirle nada, sólo entrelazó su meñique con el de ella; la ojiazul dejó su ansiedad y de apretar sus labios para sonreír genuinamente ante el gesto de su novio.

Astrid ama el que su novio le dé el espacio que ella solicita, sabía que la razón principal por la que no le decía nada acerca del tema de Lucas, era porque ella misma le dijo que tocaría el tema con él cuando esté lista e Hiccup ha respetado esa decisión. En toda una semana, el ojiverde se aguantó las ganas de hablar sobre ese imbécil, sólo por ella. Él la conoce mejor que nadie, hasta se atrevería a decir que mejor que sus padres. El castaño sabe su carácter y su forma de solucionar las cosas, así que esperará a que ella decida que Lucas la ha superado y buscará su apoyo cuando esté preparada.

Justo en ese momento, la campana de la escuela sonó.

-No se olviden, chicos. Hablar de las relaciones sexuales no es sinónimo de escándalo o algo satánico, el sexo es algo muy normal en la vida diaria de los adultos y, porqué no, jóvenes como ustedes. Eso sí, todo con conscentimiendo de ambas partes.- les recordó su maestra, al mismo tiempo que los alumnos ya se retiraban del aula.

-¿Qué dicen?- una vez que estuvieron en los pasillos, Patán habló- ¿Día de chicos y chicas?- cuestionó emocionado pasando un brazo por los hombros de Patapez y el otro por los de Jack.

-¿Aún hacen eso?- preguntó Hiccup en una pequeña risa.

-¡Claro!- respondió Heather cruzándose de brazos con una sonrisa ladina- ¿O acaso crees que cuando se fueron se llevaron toda la diversión con ustedes?- dijo en broma.

-Me parece buena idea.- intervino Astrid alzándose de hombros. Había tenía una semana de mierda, le vendría bien pasar un día con sus amigas, antes de hablar con su novio- Pero es lunes.- agregó ya no tan segura.

-¿Y eso qué?- Tilda frunció el entrecejo.

-Por favor, rubia, a divertirse un poquito.- le dijo el Frost para animarla- Los chicos iremos a mi casa.- ofreció.

-Y nosotras a la mía.- habló Elsa posando su mano en el hombro de la Hofferson, quien le sonrió en respuesta.

-¡A beber!- gritó Tacio eufórico corriendo hacia la salida.

Obviamente, fue seguido por sus amigos entre risas y vítores. Mientras que las chicas los vieron salir entre carcajadas para luego ellas empezar su camino.

× × ×

-¿Y bien?- preguntó la peliblanca a sus amigas, una vez que estuvieran todas sentadas sobre su gran cama, con un montón de snacks en medio y música de fiesta en el fondo- ¿Algo que confesar, señoritas?- preguntó mirándolas con picardía.