Resignación I
Taehyung no se esperaba presenciar eso. Incluso entró en un pequeño estado de pánico al ver los pequeños cristales transparentes que se deslizaban por las pálidas mejillas del menor. Jungkook no podía tener otro episodio de descontrol y mucho menos en el hospital. De no ser así, las autoridades no tendrían piedad en encerrarlos.
—Kookie, cielo, respira, estás llorando hielo—le avisó tomándolo por su barbilla. Sus ojos brillaban en plateado, demostrando la presencia de su dragón. Gracias a la Diosa, en sus párpados no había cortes ni algo parecido.
—¿Llo-llorando hielo?—tartamudeó el menor. El contrario asintió a su pregunta. Llevó una de sus manos hacia sus mejillas, alcanzando a tomar uno de ellos antes que cayeran en su regazo, el cual no tardó en derretirse por su calor corporal—. Ay, no, ¿qué hago? ¿Qué hago?
—Respirar, tratar de tranquilizarte. Si te sigues alterando solo harás que te descontroles más rápido y esto termine en otro glaciar gigante—lo tomó de los hombros al ver como este comenzaba a respirar más agitado y, por ende, que la máquina que estaba conectada a él a través de cables, empezara a sonar indicando el cambio de ritmo de su corazón.
El joven dragón asintió, imitando la respiración de su pareja. En poco rato la suya y sus ojos volvieron a la calma, y Taehyung por fin pudo respirar aliviado.
—Mucho mejor—habló el peligris, dedicándole una pequeña sonrisa.
Pero Jungkook no se sentía mejor. La noticia de que ambos irían a juicio no le cayó para nada bien. Tenía mucho miedo y todo era por su culpa. No debió ir a la ciudad solo por su cuenta, tuvo que hacer caso a las múltiples advertencias de su padre y hermanos. Ahora no solo él estaba pagando por eso, sino también el alfa. Su alfa. No era algo justo.
—Lo siento... Lo siento, Tae, no debí... Joder, siempre es mi culpa... Siempre acabas en problemas por mí—comenzó agarrando las sábanas, arrugándolas en sus puños. Se ahogaba. Quería llorar mucho hasta quedarse sin agua, si es que fuera posible—. No te merezco, no lo hago, no soy bueno para ti, no soy un buen omega, no, no, no.
—Jungkook, basta—Taehyung usó su voz. No iba a permitir que su pareja se menospreciara de esa forma, mucho menos por razones que él no tenía la culpa.
El nombrado se calló de inmediato, subiendo su mirada para encontrarla con la de su acompañante, asustado. No lo sintió como esa vez en la casa Kim, ahora lo estaba regañando, no pidiendo que lo ayudara.
—Jungkook, no vuelvas a decir que no eres un buen omega para mi—habló mirándolo seriamente—. Las cosas que nos pasan están totalmente fuera de nuestras decisiones. No deberían cazarnos. Está prohibido hace muchos años, pero lo siguen haciendo y ellos pagarán algún día. Kook, yo no quiero que seas perfecto. Quiero tengas tus defectos, que me hagas enojar y amarte, que seas tú, genuinamente.
El mundo quiere que cada persona sea perfecta, sin embargo, es algo imposible de alcanzar a lograr. Nadie lo es. Todos tienen diferentes estándares. Nunca lo será, nunca lo seremos, nadie lo será.
Taehyung pudo comprenderlo a medida que iba creciendo, bajo las miradas juzgadoras de los "amigos" de su padre, que lo eran meramente por cortesía. No quería que el omega cayera en la búsqueda de la perfección, era tonto tener como meta algo así.
Jungkook no tuvo palabras para responderle. En lo que llevaba conociendo al alfa, nunca lo había visto tan serio como ahora. Sus ojos parecían haberse oscurecido y su ceño se mantenía fruncido, y su voz. El tono estaba más grave de lo normal. Lo ponía muy nervioso.
—Tú no me estás generando ningún daño, Kook... Te salvé hoy y lo haría una y mil veces más—acarició su mejilla, observando como los ojos de este volvían a aguarse—. Me lastimarías si me mantuvieras lejos de ti. Ahí sí deberías sentirte culpable. Pero estás conmigo, ¿no? Lo lograremos sobrellevar todo esto, juntos.
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Love of Dragons [Taekook]
FanfictionJeon Jungkook era el primer dragón omega de su clan, mientras que Kim Taehyung el último dragón alfa de su manada. [Historia complementaria del OS Dragon Eggs] ■ Ship: Taekook ■ Mpreg ■ No se aceptan copias ni adaptaciones.