35. madres

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-llegamos tarde!- Alba bajó las escaleras a toda velocidad, mentalmente preparada para preparar desayunos, mochilas y abrigos en diez minutos.

- No mami, solo tú.- dijo Olivia, que estaba parada frente a Natalia que, con cara de dormida y entre vostezos, anroscaba con un cepillo y gel, rizo a rizo, el pelo de la niña.

- Mami, ¿puedes hablar bajito?.- el niño, al cual solo le faltaba ponerse las zapatillas, se encontraba sentado sobre la mesa con las pieras cruzadas y un libro en las manos.

- uy, lo siento... Buenos días mi amor- achuchó a la niña con cuidado de no descuidar el trabajo que tanto le estaba tomando a Natalia de definir su pelo.

- ¿café?- preguntó la morena después de que Alba dejara un beso en su coronilla.

- yo lo busco no te preocuoes.

- mami, hoy vienes a la escuela.

- no, hoy no va.- Dijo el niño levantando oa cabeza de su libro.

- sí...- replicó Olivia.

- hoy van los PADRES.

- y las madres cuando?

- las madres también- aclaró la madre.

- siempre se olvidan de decir madres.

El timbre los distrajo de lo que hacían.

-es mamá- dijo Alba mirando hacia la ventana.

- pero faltan cinco minutos o más...- se preocupó la niña.

- yo le abro.- Andy cerró el libro y corrió anla puerta mientras Natalia encendía la el secador de pelo para finalizar la labor de los rizos.

Veía a andy ponerse las zapatillas, a Alba y a Claudia hablando entre ellas pero no escuchó nada hasta no apagar la maquina que hacía um ruido infernal.

- ¿ya está?- preguntó la niña.

Natalia asintió

- gracias nati- le dio un abrazo que casi hace caiga de la silla.

- Olivia, con cuidado.- Alba casualmente entraba en la cocina para buscar el libro del niño, .

- lo siento Nati.- dijo la niña antes de correr a saludar a su madre.

- ¡Adiós Nat!- ambos se despidieron de la más alta lanzando besos y agitando sus manitas. Natalia hizo lo mismo.

- Alba, no voy a poder asistir a la reunión de hoy, luego llámame.- pidió Clauida con la temple relajada y antipática que la caracterizaba.- Adiós Natalia- se dirigió a la morena por primera vez desde su llegada.

- adiós.- dijo y una vez la mujer y los pequeños abandonaron la casa, Alba se echo a reír.- ¡Oye! ¿De qué te ríes tu, Eh?

la rubia la abrazó por detrás dejando besitos con aliento a café en su sien.

- le estás cayendo bien.

- ¿tu crees?- preguntó escéptica mientras estiraba la mano hasta lo último para no cortar el contacto con Alba que aprovechaba a juntar juguetes con su taza de café en la mano.

- ¿la has vuelto a ver?- sonrió al ver las televisión, Natalia sintió el calor subiendo por sus mejillas.

- sí.- dijo con la boca pequeña.- mola mucho... yo tenía una camiseta de ella cuando era niña y me flipaba.-

- ¿de la sirenita?

- no sabía que era una película, creí que era una camiseta y ya... ¿qué, no te gusta?

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⏰ Última actualización: Apr 01 ⏰

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