Act 13.
A Tsubasa solo le costó algunos días agarrar el truco de caminar. Menos de cuatro días y ya ese niño ya estaba corriendo por la proa del Perseo persiguiendo sin descanso a las gallinas junto a sus pollitos queriendo tocarlos. Senku ya había pedido a Yuzuriha una cuerda y un arnés para el niño y es que no podía estar correteando a Tsubasa por todo el barco. Quien lo atrapó esta vez fue Ryusui, sentó a Tsubasa sobre sus hombros y lo sostuvo por sus piernitas, el niño estaba riendo abrazando la cabeza del capitán del barco. La emoción de Ryusui era palpable, faltaban solo días para zarpar y ya todo estaba prácticamente listo, la tripulación ya había sido escogida, los suministros empaquetados y reservados, faltaba terminar de colocar los animales en sus corrales. Razón por la cual aún se encontraban gallinas corriendo por la proa.
—¡Veo que estás tan emocionado como yo, Tsubasa! ¿Vas a ser mi pequeño grumete? —Tsubasa le responde con un chillido de alegría—¡Jaja! ¡Esa es la actitud! Aunque preferiría que un niño tan pequeño se quedará en la aldea, el mar no es apto para criaturitas tan frágiles.
—¡No dejaré a Tsubasa solo!—Senku llega a su lado, respirando algo agitado, estuvo correteando a su hijo por qué se le escapó de los brazos—, menos ahora que sabe caminar, este mocoso corre rápido para lo pequeño que es—, tomó aire apoyando sus manos en sus rodillas—¡Y más te vale tener cuidado mientras lo tienes en tus hombros!—Ryusui no pudo evitar soltar una buena carcajada escuchando eso. Senku era una madre excepcional, sin duda alguna.
—¡Tsubasa está seguro conmigo! Es mi grumete—, Dijo tan tranquilamente empezando a caminar—¡Vamos a ver la sala de controles, hombrecito!
—¡Okay!
—¡Espera! ¡No te lo lleves! ¡¿Por qué me hacen correr?!
Ukyo vio llegar a Ryusui con Tsubasa sentado en sus hombros. No pudo evitar reírse al ver cómo ese hombre tan excéntrico le hablaba a ese bebe sobre lo que había en el panel, aunque Tsubasa entendiera poco o nada de eso, pero aún así estaba interesado escuchando atento a su tío, el cual ahora lo sostenía por debajo de las piernas, acostado sobre su pecho. Era muy tierno ver a Tsubasa chupando su pulgar con esos enormes ojos inocentes tan pendientes de un alrededor desconocido para él.
—Tsubasa es realmente precioso—, comentó el rubio—, nuestro hijo será igual de hermoso. Eso es seguro.
—¡Ryusui!—Ukyo chillo apenado dándole un golpe en su hombro. Ryusui suelta una risa escandalosa, hasta que siente algo húmedo. Tsubasa estaba chupando su pezón sobre su camisa—¡Ja! Tsubasa-kun, ahí no hay leche bebé.
—Eso es lo que intentaba decir—, Senku se acerca a ellos, con cuidado toma a su hijo en sus brazos—, que a Tsubasa le tocaba su merienda. Siempre le da por comer a esta hora—, suspiró y miró a su niño, asegurándose de que no tuviera algún moretón. Solo tenía sus pies sucios por andar en cubierta—, ¿Dónde están las medias que te puse? Eres igual a tu padre y a tu dada, van por ahí descalzos. Son mala influencia.
—Es más fresco andar descalzo—, admite Gen acercándose a ellos, Senku ya se había bajado la parte de arriba y ahora tenía a Tsubasa tomando su merienda—, tengo dos cosas para ustedes, estos—, dijo mostrando las medias que se había quitado Tsubasa—Y esto, te lo mando Yuzuriha-chan—, indicó alzando su otra mano mostrando una correa y un pequeño arnés—aunque no sé para qué es.
—¡Ja! Ya lo verás—, Se colocó a un lado suyo—¿Limpias sus pies? Se le pasó persiguiendo las gallinas.
—Tsubasa-chan es un niño muy inquieto. Tiene energía de sobra.
—La que me falta a mi.
Luego de una limpiada de pies y una buena merienda, Tsubasa ya tenía sus pequeños calcetines puestos otra vez y antes de colocarlo de nuevo en el suelo, Senku le puso ese pequeño arnés, enlazó la correa al arnés y ató la otra punta a su cintura. La correa media más o menos dos metros, Tsubasa se echó a correr ni bien su mamá puso sus pies sobre el suelo de madera, pero no llegó muy lejos con la correa. Y así veían a Senku, caminar por el barco, revisando los planos y el mapa, dando órdenes, llevando de una correa a su inquieto bebé que a la mínima se ponía a perseguir a los animalitos que pasaban por su lado.
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DR.STONE (A/B/O)
Fanfiction-...Gen, no es un juego y además ¿Quien?-noto como aquel de cabello bicolor le miraba y le sonreía, como detrás de esa sonrisa había algo que quizás él quería no entender ni saber, pero que en el fondo era más claro que el agua-Oh...No, no y no -Sen...