Capítulo 11: El poder de las palabras

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Sábado 7 de mayo

POV Poché

La semana había pasado volando, me habían dado las notas de los exámenes y al haber tenido mis prácticas en la clínica ya estaba todo hecho y por fin era enfermera, había recibido el correo esta mañana, aún no me lo creía... No lo hubiera conseguido sin Carl ni Dani, el lunes llevaré el correo y lo colgaré en la sala de reuniones, me va a encantar ver sus reacciones cuando estén tomando su café.

Hoy iba a ser un día bastante tranquilo, John y mi padre se llevarían a Alex a pescar, y Mafe, mi mami, mi hermana, Dani, Sofía y yo nos iríamos a comprar ropa y a pasar un día de chicas. Me había vuelto a levantar temprano por culpa de Sofía quien ahora jugaba en su corralito tranquila, apenas eran las 7 de la mañana. A las 8 venían a buscar a Alex y las mujeres iríamos sobre las 10 a la ciudad en mi coche. Me puse a preparar la mochila de Alex y a despertarlo para que vaya desayunando. A las 8 en punto tenía a los dos viejitos en la puerta esperando a Alex, les ayudé a acomodar la sillita en el coche de John, le di muchos besos a mi bebé que estaba muy emocionado por el plan. Sobre las 11 y media pasada llegaron mi madre y Mafe.

Marta: Buenos días – dijo contenta –

Poché: Hola señoras ¿Y Vale?

Marta: Durmiendo en el coche

Poché: Entiendo y ustedes ¿Por qué tan felices y llegando tarde?

Mafe: Bueno hermosa puede que tu mamá y yo llegásemos tarde porque puede que hayamos parado a desayunar y bueno se nos pasó el tiempo

Marta: Así es – dijo sonriente – la verdad habíamos quedado a las 8 cuando salieron nuestros maridos, pero empezamos a hablar, desayunamos y bueno se nos pasaron las horas rapidísimas.

Mafe: Pero lo importante es que ya estamos aquí ¿Qué tal todo?

Poché: Bueno parece que a Dani se le han pegado las sábanas y Sofía acaba de dormirse.

Mafe: No Dani no viene ¿No te avisó?

Poché: No ¿De qué?

Mafe: Anoche vino a cenar a casa y se encontraba muy mal cuando le toqué la frente estaba ardiendo, de hecho, la trajimos con John para que ella no conduzca, parece que agarró un resfriado. A las 5 me mandó un mensaje diciendo que se seguía sintiendo mal y que no vendría.

Marta: Que mal, podría haberle hecho una sopa si lo hubiera sabido

Poché: Iré a verla

Marta: Será mejor que la dejes descansar cariño

Mafe: Claro que sí, ella estará bien vamos a pasar un día tranquilo nosotras.

Subimos todas las cosas al coche y despertó mi hermana, me acerqué a ella para hablarle solo a ella.

Poché: Dormilona – le dije dándole un beso en la cabeza – Necesito que me hagas un favor

Valentina: Yo sabía que tanto amor era por algo, a ver dime

Poché: Me voy a quedar a cuidar a Dani, se encuentra mal y no quiero que se quede sola, necesito que conduzcas y cuides a Sofi.

Valentina: Hecho, pero – se señaló la frente, sonreí y le di otro beso – te amo

Poché: Te amo más, gracias.

Ambas bajamos del coche y ella se sentó en el asiento del conductor, mi madre y Mafe ya se habían sentado detrás con Sofia.

Marta: Sube cariño

Destellos en la oscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora