Hanahaki [KatsuDeku]

XVI

Estiró su espalda, provocando el tronar de algunos huesos y suspiró con cansancio, aunque realmente estaba feliz por terminar su jornada laboral con éxito.

Adaptarse a Japón no ha Sido una tarea fácil, si bien hay gente que lo adora por su contribución en el país en el pasado, en la actualidad hay muchos que desconfían de él y su poder.

Eso sin mencionar las diferencias culturales entre Norteamérica y Japón, ambos lugares eran tan diferentes.

Agitó su cabeza, se sentía agotado para seguir pensando en todo aquello.

Acomodó todo el papeleo que acababa de realizar y metió cada hoja en su folder correspondiente. Justamente acaba de terminar los reportes escritos de sus labores del día, esa era la parte tediosa de ser un héroe, aunque probablemente siente que es un trabajo pesado porque desde que regresó a Japón se la ha pasado trabajando en solitario, aún no le han asignado un compañero, pues ninguno de sus compañeros anteriores está laborando.

Uraraka cambió de agencia hace un par de años.

Y Mirio...

Era bastante duro lo que había pasado con el resplandeciente héroe rubio.

Saltó en su lugar al escuchar como la puerta de su oficina era golpeada, de inmediato posó sus ojos en la persona que estaba recargada en el marco de la puerta, pues él mismo había dejado la puerta de su oficina abierta, y sonrió ampliamente al rubio frente a él.

Era una coincidencia bastante grata.

-Hola, Midoriya - saludó con su inconfundible sonrisa.

Izuku sonrió de vuelta -Que gusto verte, Togata - dijo alegremente mientras se acercaba al rubio para saludarlo.

Mirio estaba realmente feliz de volver a ver a su antiguo compañero -¿Cómo te ha tratado Japón? - preguntó genuinamente curioso.

Izuku sonrió -Mejor de lo que esperaba, aunque a veces es - buscó la palabra adecuada para describir su situación -diferente - dijo con un poco de duda en su voz -Las personas son diferentes, no quiere decir que sean malas personas, en realidad son mucho más amables que los norteamericanos, pero la gente aquí es un poco más distante. Los criminales también son muy diferentes, aunque la gente mala siempre es mala, no sé si se entiende mi punto ¡Oh! Y la cultura, allá son bastante más liberales, hay lugares donde hace demasiado calor y la gente camina prácticamente en traje de baño -

Mirio soltó una sonora carcajada, interrumpiendo las palabras del pecoso.

Midoriya enmudeció mientras su rostro se tornaba rojo por la vergüenza.

-Lo siento - dijo mientras trataba de controlar su risa -¡De verdad lo siento! Pero extrañaba mucho tener estas conversaciones contigo - admitió con genuina felicidad.

Izuku sonrió comprensivo -También extraño a mi compañero - dijo de manera melancólica.

El semblante alegre de Mirio titubeó por un milisegundo, el rubio siempre fue bueno escondiendo las cosas que lo agobiaban.

-Solo será temporal, al menos hasta que las aguas se calmen un poco - sonrió, aunque está vez su sonrisa era mucho más pequeña.

Izuku quiso decir algo, pero no se le ocurrió nada que lograra reconfortar al rubio.

Después de la jubilación de Endeavor, el retiro voluntario de Hawks y la muerte de Best Jeanist, el puesto de héroe número uno había pasado por diferentes héroes, pero ninguno parecía "dar el ancho" o al menos así fue hasta que ese puesto recayó sobre los hombros del heroe Lemillion.