Observó la humeante taza de café frente a él, tomó la porcelana entre sus manos y bebió un poco del amargo líquido, cuando la taza regresó a su lugar dirigió sus ojos a la persona frente a él.
Kirishima observaba su taza, su mirada estaba fija, parecía que ni siquiera parpadeaba, su cuerpo se veía tenso y su expresión afligida.
Bakugo suspiró —Vayamos al grano — dijo con notable fastidio en su voz.
Kirishima respingó y por primera vez miró al rubio frente a él.
Después de lo ocurrido en ese solitario callejón, ninguno de los dos habló sobre el asunto, Katsuki lo agradeció internamente, aunque nunca lo expresaría en palabras; pero cuando terminaron su jornada laboral, Kirishima le pidió abordar el tema el día siguiente.
Para el pelirrojo, el enamoramiento de Bakugo por su amigo de la infancia no era ningún secreto, hace años había descubierto aquello. Kirishima siempre había apoyado a Katsuki, era su mejor amigo después de todo, pero siempre estuvo preocupado por ese enamoramiento, había tanto en contra que le parecía casi imposible ser positivo al respecto y justo ayer una de sus mayores preocupaciones se había presentado.
No era ignorante, el Hanahaki era una enfermedad muy conocida, si bien no había tantos casos en el mundo y tenía una cura, sabía que era muy peligrosa si no se atendía a tiempo y ver esa rosa cubierta con sangre del rubio lo abrumó de sobremanera.
Suspiró —Me sorprende que, con lo diligente que eres con tu salud, no le tomes importancia a esto — comentó con seriedad.
El rubio frunció el ceño y desvió la mirada —Puedo manejarlo. Hasta ahora, no es algo que intervenga con mi trabajo —
Kirishima masajeó el puente de su nariz con dos de sus dedos, sabía que abordar el tema con el rubio sería difícil, Bakugo había cambiado para bien, pero a veces se asomaba ese maldito orgullo, ese que lo llevaría a su propia muerte.
—¿Hace cuánto comenzó esto?— preguntó tratando de tranquilizarse.
Bakugo pareció meditar antes de contestar —No lo sé — respondió aún sin mirar a su acompañante.
—¿Cómo no lo sabes? — comenzaba a sonar molesto.
—Te digo que no lo sé — gruñó, porque aquello también era frustrante para él.
Suspiró, en un vago intento por recobrar la calma —Bakugo — llamó con seriedad, aún así el rubio no lo miró —De verdad quiero ayudarte, pero no podré hacerlo si no me dejas —
—¡Nadie te pidió ayuda!—
—¡Basta!— alzó la voz con molestia, cosa que sorprendió al rubio —Sé que no pediste mi ayuda y sé que no la pedirás, sólo entiendeme maldita sea, estoy preocupado, sé que esto es serio y me molesta saber que no te importa —
El rubio apretó sus labios y clavó su vista en la taza frente a él, Kirishima no maldecía con normalidad, podía contar con los dedos la cantidad de veces que lo ha escuchado decir alguna mala palabra, sabía que el pelirrojo sólo ocupada dichas palabras cuando estaba demasiado molesto.
Soltó el aire que no se había percatado que estuvo conteniendo e intentó destensar su cuerpo antes de emitir cualquier palabra.
—De verdad no lo sé — trató de explicar de la manera más calmada posible, aunque aún había un ceño fruncido en su rostro —La tos comenzó hace algunos meses, no era tan intensa y era solo ocasional, los pétalos y la flor se presentaron cuando ellos... — se interrumpió a sí mismo, no era capaz de mencionar aquello sin sacar esos malditos pétalos de su boca, suspiró tratando de calmarse, hace semanas se había prometido que esa estúpida enfermedad no lo iba a superar —cuando ellos anunciaron su noviazgo — pudo sentir su garganta arder, pero pudo soportarlo.
![](https://img.wattpad.com/cover/298336763-288-k966854.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Hanahaki [KatsuDeku]
FanfictionTener la enfermedad del Hanahaki no estaba dentro de los planes de Katsuki Bakugo, el botón de rosa sólo salió de su boca sin pedir permiso. Pero él es el maldito héroe Dynamight, no va a dejar que una estúpida flor pegada a su pecho maneje su vida...