CAPITULO 23

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El día fue normal. Por el momento nadie las había molestado y aquello era bueno, o eso pensó la pálida, hasta que llegaron a la cafetería durante la hora del almuerzo. Llevaba la mochila en su espalda y hablaba con Divina, intentando distraerla por si se encontraban con Yoko. Wednesday no había parado de sonreír en todo el día.

-Nosotras buscamos la comida y ustedes dos cuiden la mesa - les dijo Bianca guiñándole a Divina, se fue con Olivia, dejándolas a ellas dos.

-Bueno ¿Sabías que, según Olivia, Kent besa con lengua? - preguntó mientras se sentaban en una de las mesas, Divina la miró alzando una ceja.

-Ya se lo que intentas hacer, Wends - dijo acomodando sus brazos sobre la mesa, Wednesday abrió los ojos.

-¿Ah si? Porque hablo en serio, es la palabra de la pelinegra contra la nuestra.

-Descuida... yo aún no le he visto y cuando lo haga... igual la voy a ignorar - dijo bajando el rostro y Wednesday la hizo alzarlo, sujetándola por la barbilla.

-Ambas sabemos que esa es una gran mentira - dijo viendo como su amiga rodaba los ojos — Ella es una idiota.

-Si, es una idiota - repitió Divina, sonriendo.

Durante estos meses Divina le había hablado sobre Yoko y habían tomado como terapia decir que era idiota, cada vez que se sintiera mal.

Hablaron durante un rato, hasta que sintió la voz de Ajax en su oreja.

-Hola, rarita - saludó, rodeándole el cuello fuertemente con el brazo, Wednesday tosió varias veces — ¿No te gustaría comer con nosotros?

-No... suéltame - dijo apretándole el brazo, pero él no la soltaba.

-Déjala - Divina le dijo levantándose y queriendo darle una cachetada.

-Vamos, Addams. Todos te esperan - agregó el chico, levantándose y arrastrando a Wednesday con él, la chica parecía necesitar con urgencia respirar mientras la llevaban a la mesa.

-¡Oye! - le gritó Divina y los siguió.

-Aquí estamos - dijo Ajax sentando a Wednesday en la silla, junto a Rowan, aun rodeando el cuello de la chica.

-¡Wednesday, que sorpresa! - dijo Rowam riendo, al ver el rostro púrpura de la chica normalmente pálida.

Wednesday apenas si podía respirar e intentaba soltarse del brazo de Ajax alrededor de su cuello.

Observó que justo frente a ella estaba sentada Enid, que la observaba con los ojos abiertos y una notable preocupación en ellos.

-Ajax, déjala en paz - dijo observando con enojo a su novio, él se río cínicamente.

-Amor, ¿no te das cuenta de qué la rarita es una invitada mía? No le estoy haciendo nada.

Wednesday no opinaba lo mismo y cerró los ojos por un momento, ya que se sentía tremendamente mareada.

-¡Suéltala, las estás ahogando! -gritó Enid y Ajax la soltó con fastidio, Wednesday comenzó a toser.

-¡Cof, cof, cof! - se sujetaba la garganta mientras observaba de reojo a Enid.

La rubia parecía querer acercarse para frotarle la espalda, pero todos estaban mirándola. Enid tuvo que resistir la urgencia de tocarla y apretar las manos sobre el regazo, sin dejar de mirar los ojos cafés.

-Div... -murmuró Wednesday por debajo, pero no veía a su amiga.

Logró encontrarla, al verla salir por la puerta de la cafetería, seguida de Yoko. Wednesday se preocupó e intentó irse, pero Rowan le capturó la mano y la obligó a sentarse.

-¿A dónde vas, bonita? - le dijo sosteniendo su mano entre las suyas mientras Wednesday seguía tosiendo.

Enid clavó sus ojos asesinos en Rowan y este de inmediato soltó la mano de Wednesday, sentía un frío helado recorrerle el cuerpo y podía jurar que eran por los fulminantes ojos claros de Enid.

-¿Ibas con tu novia?- preguntó Ajax, riéndose, al ver la pobre cara de Wednesday.

Ella comenzó negar mirando a Enid a los ojos, quería asegurarle que no tenía novia y al hacerlo, la rubia sonrió de forma alegre. Ajax se dio cuenta de eso y la llamó.

-Amor, ¿sabes que te amo? - le dijo dándole un guiño y Wednesday hizo una mueca, quería irse.

Enid no lo miró ni una sola vez y asintió, sonriendo.

-Yo también te amo - dijo mirando fijamente a Wednesday a los ojos, la pelinegra sintió la piel cosquillearle y el corazón en la garganta

¿Se lo estaba diciendo a ella? Enid, después de haberlo dicho, abrió los ojos y se sonrojó como una loca, agachó el rostro y comenzó a balbucear — Yo... Mmm... supongo... bueno... también... bueno... claro - término con la cara roja, Ajax frunció el ceño, observando como las dos chicas se miraban.

-Bueno, rarita. Me contaron por allí, que estás enamorada - comentó burlón, y logrando que todos en la mesa soltaron un "Uhhhhh".

Wednesday no la dejó de ver ni un segundo.

- Yo... bueno, no te importa - dijo con el rostro sonrojado e intentó irse de nuevo, Ajax la tumbó por los hombros y la hizo sentarse.

-¿Quién es? Confiesa, ¿es Divina? - preguntó burlón, observando a su novia con intención. Wednesday lo pudo ver, en los ojos que tanto amaba había dolor.

-No y si fuera así no te lo diría - gruñó para luego volver a ver a Enid, la rubia le devolvía la mirada y no escuchaba a nadie más.

Ajax ya estaba sintiéndose amenazado por la estúpida cara que hacía su novia al ver a la pelinegra, no le gustaba la manera en que se miradan y su orgullo masculino estaba siendo dañado.

-¿No tienes amigas? Podrías largarte de una vez - le dijo irritado mientras iba al lado de su novia y se sentaba junto a ella, rodeándole los hombros con el brazo.

-Pero, tú... - comenzó un confundida por su actitud y sus ojos cafés se volvieron fríos, al ver el brazo del chico sobre Enid.

Ajax sonrió triunfante, pero, no duró mucho, cuando Enid se revolvió incomoda y se alejó un poco del chico, cortando el abrazo sobre su hombro. Él la miró sorprendido y después con enojo a la causante de todo esto, que ahora sonreía.

-Quita tu asquerosa cara de mi vista, antes de que te la rompa en dos - amenazó y Wednesday abrió los ojos, intentando por todos los medios levantarse.

-¡Ajax! - lo reprendió Enid, mirándolo con reproche y después volteó a ver a Wednesday, que ya se había ido, y soltó un suspiro.

Ella había salido corriendo rápidamente de allí, para volver a su mesa ¿Qué le ocurría a ese idiota? ¿Estaba en sus días o algo así? Que bipolar, fue mucho para el gusto de Wednesday, que seguía un poco alegre por haber visto a Enid. Lo mejor de todo era que esta vez no le había insultado. Tal vez, este lograra ser un gran año.

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Bueno me sentí un poco mejor así que decidí hacer este capítulo, aunque es bastante corto. Pido perdón

Si me sigo sintiendo más o menos, luego subo otro.

Wenclair - RivalesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora