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" estúpido oso. " Juan 2022

Ambos latinos miraron confundidos al español.

—¿eh? ¿para qué?

— me he dado cuenta de lo rápido que se relacionaron con Quackity y Luzu así que supongo que sabrán de la guerra.

— Un poco, ¿y eso qué? — El argentino se veía claramente molesto por ser interrumpido en un momento tan bonito y pacífico en el que se encontraba con el castaño.

— Quiero que haya paz en karmaland, y además Quackity y luzu se aman, necesito hacer algo al respecto, y para eso necesito su ayuda.

El argentino estaba apunto de rechazar aquel favor para poder seguir disfrutando de su noche con el hechicero, pero bueno, Juan es.. Juan, así que el sonrió con emoción y tomo la palabra por ambos. - CLARO QUE AYUDAREMOS. - el oso miró con su ceño fruncido al chico de anteojos.

— Jua- — Fue interrumpido por la mano del hechicero que pasó a su boca para que así no dijera algo más. Sapo peta sonrió ampliamente.

— ¡GRACIAS! venid a mi casa y les comento el plan que se me ocurrió.

Juan se levantó con una sonrisa, extendiéndole su mano al oso para ayudarle a levantar, Spreen soltó un suspiro y se levantó, aceptando aquella mano del hechicero, sintiendo nuevamente una corriente eléctrica que se hizo presente al momento del tacto. Trató de ocultar su nerviosismo apartando su mirada, volviendo a colocarse sus lentes oscuros.

Y así, los tres se dirigeron a la enorme casa perteneciente a sapo peta, entrando en.. una sala donde había prácticamente droga.

— Un montón de merca, wtf.

— Sapo peta, te debes de dar la buena vida ehh.

— Puede que un poco, pero seguidme por aqui. - Sapo peta atraveso un cártel que decía "no pase", Juan se adentró detrás de él, y spreen se cuestionó el "no pase" por unos momentos para después seguir al castaño hechicero.

Ese cártel llevaba hacía una gran sala con una gigante maquinaría, spreen se veía 0 impresionado, pero Juan parecía un niño pequeño viendo una tienda entera de juguetes.

— LOCO, ESTO ESTA.. WOW, ¿QUÉ ES ESO?

— una maquina que borra la memoria.

— ¿Qué tenés planeado con esto?

— Borrar las memorias compartidas de Luzu y Quackity, así empezarán de 0.

— ¿Y qué hay de los demás? tipo boludo, van a quedar muy desconcertados por como actúen Luzu y Quackity.

— No importan, lo importante es que la guerra acabe.

— BIEN, ¿qué hacemos entonces?

— Necesito que les deís esto. -—Sapo peta sacó unas galletas y se las entregó a ambos chicos. — Son galletas con una pócima que les hará quedar inconcientes por una hora, en esa hora necesito que los traigan aquí y los encierren a cada uno en una de las cápsulas que hay allí.

—¿por qué no lo haces vo- — interrumpido nuevamente por la mano del castaño que evitaba que el oso pronunciara una palabra más.

—De acuerdo Sapo peta, ¿tiene que ser ya?

—No, no. Podéis descansar viajeros, puedo otorgarles una habitación de invitados, lastimosamente me queda desocupada solo una de cama de dos plazas, ¿no importa? — Mentía, realmente había escuchado toda la conversación de spreen y juan, así que más o menos sabía de que algún rollo había entre ellos dos, sapo peta cupido, definitivamente. Juan al estar tan cansado asintió suavemente y spreen, joder, spreen sentía demasiados nervios, pero es spreen, no iba a demostrarlo realmente así que igualmente asintió con su cara seria.