A Sweeter Place | Jintae AU

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Seokjin recordaba la última vez que estuvo ahí, sentado en el mismo columpio, observando la cafetería de la familia de Taehyung pero sin entrar.

Era lunes, sabía que Taehyung pasaba a la cafetería justo después del trabajo y  si no se equivocaba, ya debería estar dentro. Por lo que estaba tratando de reunir algo de valor.

—Esto parece un déjà vu —escuchó a sus espaldas.

Seokjin se puso de pie, justo como había hecho la primera vez, quizás lo único diferente era que ahora sabía perfectamente lo increíble que era estar a lado del otro.

—La primera vez que estuvimos aquí, te prometí que volvería para tomar un café.

El menor lo miró con expresión triste durante algunos segundos, en lo cuales Seokjin puso todo su esfuerzo para no borrar la tristeza de su rostro a besos tranquilos.

—¿Vino a despedirse? —preguntó, odiándose un poco por el tono tan desanimado.

Seokjin suspiró. Trató de ordenar sus ideas, ponerlas en claro para expresarlas y no dejarse llevar por la nostalgia del momento.

—Estoy aquí para pedirte perdón... por todo. No voy a excusarme con que todo lo que estaba pasando nubló mis sentimientos hacia ti, cuando el único culpable fui yo. Yo nos hice esto y por eso te pido perdón.

Taehyung se estremeció un poco en su lugar. Esto sonaba como una despedida definitiva, pero quizás, en lo más profundo de su razonamiento una luz de esperanza se encendió en él y decidió aferrarse, al menos por última vez.

—Lo siento... —murmuró inseguro—. Siento que sigo sin entender el motivo de su visita, no necesita forzarse a esto.

—Estoy aquí para tomar ese café que prometí y para cumplir todas esa promesas que rompí en las últimas semanas. Quedarme a tu lado y escribir un cálido futuro juntos debe ser mi favorita y la que más deseo.

Seokjin sonrió. Taehyung, por su parte, no dudó en envolverlos a ambos en un abrazo. Y lloró, pensando en que debía ser un mal chiste todas las lágrimas que había derramado en estas semanas. Sin embrago, estas lágrimas no cargaban ni la mitad del peso y dolor que le impedía respirar antes, estas parecían más bien ligeras y liberadoras.

—Está bien si no cumple su promesa del café hoy, porque no quisiera que mi hermano y mis amigos me vieran así y se hicieran ideas equivocadas.

—No hay problema, seguro deben odiarme ya, de todos modos —respondió separándose un poco para ofrecerle una sonrisa tranquila y dejar un pequeño beso en la punta de su nariz, haciéndolo sonreír levemente.

—En realidad... nunca le dije a nadie que terminamos— Seokjin lo observó sorprendido—, sentí que si lo decía se hacía real y era lo que menos quería.

—¿Estuviste sufriendo tu solo todo este tiempo, Taehyung? Lo siento mucho.

Aunque Taehyung no lo confirmó, tampoco lo negó y aquello le hizo sentir un poco miserable. Así que, buscando disipar el sentimiento, unió sus labios en un roce tranquilo y lleno de cariño y antes de que el beso subiera un poco más su intensidad, se detuvo con una sonrisa para decir algo que necesitaba sacar de su pecho.

—Te amo, Taehyung. Me arrepiento tanto de no haberlo dicho esa noche en mi departamento antes de que te fueras, pero te prometo, que de ahora en adelante me esforzaré por ser tan valiente como tú. Ya no tengo miedo, al menos no sobre nosotros y que siempre estuvieras ahí y verme a través de tus ojos, me ayudó a entender que jamás, ni por culpa de terceros, podría dejar de amarte.

Y bajo esa promesa y confesión, que en el fondo sabía, Taehyung sonrió y volvió a unir sus labios en un beso que terminó por sellar el verdadero comienzo de su historia de amor.

💫

feliz lunes, inicio de semana y casi navidad 🤠