El Jardín Del Recuerdo

Capítulo 31

Luego de tomar la decisión de hacer a un lado lo que estaba pasando, al menos hasta que el cumpleaños de Eloise pasara, nos pusimos a organizar una cena después del concierto al que asistiriamos solamente nosotras dos.

Por ahora, desde que nos confesamos nuestros sentimientos las cosas cambiaron, no se muy bien que sea lo que pasa entre nosotras pero ahora estamos más pendientes la una de la otra. Jamas creí que estaría con una chica y no porque no supiera mi orientación, eso siempre lo supe pero no me imagine que se sentiría mejor de lo que esperaba.

Optamos por aun no decirle a nadie hasta que estuviéramos seguras de que esto era lo que queríamos, para ella hablar sobre su orientación aún le costaba y no era tan abierta.

Y bueno, por fin llegó el tan esperado concierto; debo admitir que me llena de ilusión compartir esto tan especial con ella. 

Ahora me encuentro en mi habitación y como saben soy fan a usar blazers en todo momento y esta vez no fue la excepción, abajo de este llevo un top blanco junto a un short del mismo color y unas zapatillas deportivas con plataforma, obvio no podían faltar los accesorios.

Aun era temprano por lo que no me apresure tanto, podrán preguntarse si le obsequiare algo más a Eloise hoy y la verdad es que si. Por la mañana contacte a una florería y le envié un pequeño presente, aunque cuando vaya por ella le llevare un gran ramo de rosas rojas acompañado de otras cosas.

Cuando voy bajando las escaleras noto que le están entregando el ramo a Gia.

—Es hermoso—Dice anonadada

—Si que lo es

—¿Donde lo dejo?

—¿Sería mucho pedir que lo llevaras al auto?—Se da la vuelta para ir a la cochera

Por mi parte la sigo evitando que choque con algo

—Realmente te luciste Becca

—Es un pequeño regalo, nada realmente grande

—Ni tu lo crees, ella realmente te gusta

Desvío mi mirada al cielo hermoso para evitar la conversación. Gia se planta a mi lado haciendo lo mismo después de cerrar mi camioneta.

—Se que te gusta y tu a ella, no pueden disimularlo

—Lo sabes todo ¿Ah?

—Lo deduje—Se levanta de hombros y vuelve adentro

—Debo irme, nos vemos en casa de Alice

—Diviértete Ady, te quiero

—Yo igual Gia—Le lanzó un beso al aire

Antes de llegar a casa de Eloise me detengo por su bebida favorita. El lugar no esta tan lejos de mi destino por lo que no demoro nada.

Conduzco hasta la caseta donde el guardia me reconoce de inmediato permitiendo la entrada. Aparco frente al hogar de Eloise, aun no le avise que venia, espero darle una grata sorpresa.

El ramo es tan grande que opto por solo traerlo conmigo y después le enseñare lo demas. Toco el timbre como puedo, del otro lado escucho que gritan algo que no logro descifrar.

Al abrir la puerta se queda estática en su lugar admirando lo que llevo en manos, esta fue otra idea de Alice pero créanme que le agradezco por siempre dar en el clavo. Me abraza euforicamente mientras repite lo grandioso que es su regalo.

—¡Gracias, Gracias, Gracias! —Huele el ramo

—Feliz cumpleaños, enana

Su semblante cambia de inmediato, me fulmina con la mirada mientras intenta sostener su obsequio.