Nunca representé una amenaza para nadie, tal vez solo para mí mismo.
Mis palabras nunca fueron tan afiladas como el filo de un cuchillo para nadie, quizás solo para mí.
Todo lo que podía ofrecer era auténtico y sincero, pero lo que me quedaba a mí eran los restos después de cada encuentro con alguien.
Nunca había herido a nadie con mis sentimientos, ¿o tal vez sí?
Al escuchar mis pasos y el sonido de la puerta cerrándose detrás de mí, me doy cuenta de que he dejado atrás un lugar oscuro debido a tantas luces perdidas, dañadas y subestimadas.
Nunca había visto tanta claridad en mis ojos.
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TODO SOBRE TI (✔)
RomantikEs cierto que somos seres únicos, y es precisamente en nuestras diferencias donde reside nuestro poder. Desearía que pudiéramos elegir nuestros pensamientos y sentimientos como elegimos nuestro almuerzo diario o nuestro atuendo para una cita, pero l...