LO QUE UN DIA ME HIZO FELIZ, SE HARÁ ETERNO

CAPITULO 42 - LA MIRADA

Este capítulo tiene partes para +18 quien decida leerlo es bajo su responsabilidad.

Me levante más temprano de lo normal, apenas había dormido en toda la noche porque mi cabeza no me lo permitió. Necesitaba hablar con Pablo, y era lo primero que pensaba hacer ese día. Fui a la cocina a tomar un café antes de salir, al entrar Hilda estaba desayunando.

- Buenos días Marizza.- me saludo

- Buenos días Hildita.- le respondí dándole un beso

- ¿Dormiste bien?

- No mucho la verdad, ando un poco preocupada. ¿Y vos?

- Yo, sí. La pastilla que tomo me ayuda. ¿Qué te preocupa?

- Nada importante. – respondí sentándome a su lado para tomarme el café

- Si te quita el sueño si es importante. Pero si no me lo quieres contar, no pasa nada, respeto tu privacidad.

- Gracias mi viejita linda.- le dije con cariño

- Aun así te diré que me gusta ver que la pena se fue de tu mirada, no sé si Escurra tendrá algo que ver, pero sea lo que sea me alegro por vos.

- No entiendo Hilda, ¿a qué pena te refieres?

- A la que se instaló en tu mirada, cuando Bustamante murió. Yo sé muy bien como es esa mirada porque la veo cada día en el espejo desde que murió Hilario.

- ¿Te he dicho alguna vez cuanto te adoro?- le dije dándole un abrazo.- Tengo que irme, nos vemos al rato.

Hilda se había convertido en mucho más que mi profesora de historia, adoraba a esa viejita y la quería como a una abuela, siempre me daba buenos consejos y me daba un cariño muy especial.

Salí de la casa en busca de mi auto para ir a la casa de Pablo, pero antes de montarme, Pilar apareció.

- Marizza, ¿podemos hablar? – me dijo acercándose a mi

- ¿Es urgente? Voy con algo de prisa

- ¿Cuándo pensabas contarme lo de Tomas? – pregunto enojada

- Pilar... ¿Cómo te enteraste?

- Me lo dijo Lujan, ayer fui al comedor social en el que esta de voluntaria para hacer un reportaje y me dio la sorpresa.

- ¡Mira vos! Lujan ahora también es buchona. Mira Pilar, lo mío con Tomas es... es complicado y además no creo que tenga que darte explicaciones, él y vos ya no tenéis nada. ¿O me equivoco?

- No pero...

- Pero nada.- la interrumpí.- Cuando lo encontré estaba en la mierda, y ni vos ni nadie se había preocupado por él, así que no vengas haciendo reclamos que no te corresponden.

- ¡Vos eres mi amiga!

- ¿Y eso qué? Vos siempre me has dicho que ya no tienes sentimientos por él... ¿acaso mentías?

- ¡Pues claro que mentía! – Me grito.- ¡Tomas es el amor de mi vida! Pero después de todo el daño que me hizo no quería seguir teniendo sentimientos hacia él y por eso mentía a todos, incluso a mí misma, con la esperanza de que la mentira se hiciera verdad, pero eso nunca pasó.

- Entonces lucha por él. ¡Recupéralo! – le dije sin pensar

- ¿En serio? ¿Quieres que luche por reconquistar a tu novio? ¿Eso es lo que amas a Tomas? ¡No te lo mereces!

- Bueno... si... quiero decir que no es a mí a quien tienes que hacer reclamos... Yo no tengo miedo, puedes decirle a Tomas lo que sientes y que él elija entre vos y yo. Y ahora me voy, tengo cosas importantes que hacer.- le respondí y me subí al auto.