I'm think you're trouble│BrightWin

Capítulo 8

Las espinas me enseñaron mucho más que cualquier cosa.

—¿Cómo amaneció mi hermoso ángel?

La voz del pelinegro entrar a la habitación hizo que el castaño apagara su celular para encontrarse con su mirada, dejo la bandeja con el desayuno sobre sus piernas buscando atenderlo de la mejor forma posible, con cuidado se acercó hasta el rostro del chico dejando un beso sobre su mejilla, la misma que deseaba besar cada mañana mientras sus hermosos ojitos cafés se abrían poco a poco.

—Bien, estoy muy feliz de haber despertado junto a ti — respondió disfrutando esa sensación tan placentera al sentir ese delicado beso.

Lo miro una vez más dedicándole una sonrisa sincera para después comenzar a degustar de la comida que había preparado su....¿qué eran en realidad? Era obvio tenían una relación bastante especial, pero no sabía cómo referirse a Bright exactamente, para él era absolutamente todo, su novio, su amante, su compañero, su amigo, el amor de su vida, pero si quería tener la seguridad de poder gritar la verdad a los cuatro vientos y que a Bright no le molestara.

El pelinegro se mantenía curioso por los motivos que hicieron cambiar la manera de pensar que tenía Win, aunque los sabía, quería escuchar como se había sentido, que era lo que pensaba sobre esa situación y sobre todo si en realidad lo amaba tanto así como él lo hacía, tenía miedo que sus sentimientos fueran diferentes y confundiera el amor con la única esperanza que tenía para escaparse de ese mundo.

—¿Qué paso anoche? — preguntó el pelinegro con un tono serio que hizo temblar al castaño por temor a que se confundiera — ¿Por qué cambiaste de opinión? ¿Acaso soy lo que necesitas?

Win soltó la chuchara para tomar la bandeja de comida y alejarla de sus piernas, se acomodó frente a él tomando su rostro con cuidado besándolo en la mejilla y después en los labios antes de responder a esa pregunta, debía disculparse por el dolor que había causado en él gracias a sus palabras. Porque no había otra persona que le hiciera sentir todo lo que Bright le hacía sentir, no necesitaba a nadie más que no fuera él.

—Lo eres — respondió con una mirada tierna recibiendo una sonrisa — Eres mucho más de lo que alguna vez pedí, solo que tenía miedo de cargar con el hecho que mis padres se fueran a la quiebra.

Bright se acercó un poco más a él tomándolo de la cintura, había pasado demasiado tiempo desde que estuvieron juntos de esa manera, que ahora no pensaba desaprovechar ni siquiera un solo minuto, quería escucharlo mientras él acariciaba su cabeza y seguía confirmando que pelear por Win era su mejor decisión.

—Entonces ¿por qué volviste?

Win suspiro antes de contar lo que había pasado, no quería que Bright aumentara el odio que le tenía a su supuesto prometido, mucho menos que se metiera en problemas solo para defenderlo, quería que las cosas cambiaran sin importar lo que tuviera hacer, incluso si podían escaparse en ese momento no lo pensaría, aceptaría cualquier cosa solo para conseguir su felicidad.

—Por qué Nani también me fue infiel y lejos de lastimarme — miro con ternura al chico con gesto sorprendido que estaba frente a él — Me hizo feliz, por qué si él tampoco está feliz con esto, yo también podre buscar mi verdadera felicidad — con cuidado se acercó a sus labios para besarlo — Junto a ti.

Bright cerró los ojos disfrutando de ese tacto tan único, ese que no quería que nadie más lo tuviera sin importar lo que tuviera que hacer, ese amor era algo que no alcanza a explicar, las sensaciones que provocaba en él eran especiales y que deseaba sentir por el resto de su vida.

—Me amas ¿verdad?

—Te amo Bright, eres el primer chico al que amado y el único con quien quiero compartir toda mi vida.