Un silencio incómodo se formó entre los tres, Aemond mantenía su mirada fija en Aegon y el lo hacía de igual manera, Visenya esperaba el momento en que ambos se golpearan o volvieran a insultarse, pero no pasó
Aemond miro una última vez a Visenya en ese momento y la señaló
- Espero que tú amenaza sea cumplida en algún momento o en cuanto nazca ese bebé te mataré Visenya - sentenció de una vez el platinado - No te perdonaré está traición
- No juegues con ello o antes de que nazca mi hijo te mataré con mis manos - espeto rápidamente sujeta a Aegon - Debemos marcharnos, nosotros si tenemos algo importante que hacer
- ¿Cogerse? - pregunto una vez
- ¿Quieres unirte? - Visenya alzo la vista - Ah no, seguramente estarás ocupada con Helaena
Ambos dieron media vuelta y mientras se encaminaban a un lugar más lejano, Visenya podía sentir la mirada en la espalda, mirada acompañada por su culpa, la culpa de mentirle en el rostro a su esposo
- Pensé en algo durante el reclamo de tu hermano - Aegon miro a la platinada que caminaba a su lado atravez del largo pasillo - Alguno de tus hermanos debería saber que te irás...
Aquellas palabras dejaron pensando un instante a Visenya quien miro a los lados antes de parar el paso que llevaba
- Intentarán detenerme - Visenya dejo escapar un suspiro - No deseo que me detengan de irme, son mis hermanos pero poseen un grado de egoísmo dentro de su corazón
- ¿Y tú madre? - La pregunta hizo negar a la misma
- ¿Estás dudando? - Pregunto está mirándolo a los ojos - Si dudas en venir conmigo lo comprendo, puedo montar a mi Dragón con mi hija e irme
- Deseo ir contigo - Aegon tomo las manos de la misma para que lo mirara dandole una gentil caricia - Me preocupa Sunfire y Borghild, son demasiado grandes, ¿Dónde los ocultaramos?
- Si los montamos y emprendemos vuelo al amanecer podremos ir al otro lado del mundo, dónde nadie conozca a la familia Targaryen - Una sonrisa apareció en el rostro de la joven - Dharaenya, tu, yo y este bebé, se que será difícil esconder dos grandes dragones... Pero se que con lo que poseemos nos la arreglaremos
- Es una muy buena idea - Aegon beso la mejilla de la joven y coloco una de las manos libres en su vientre - Terminemos de hablar de esto en la habitación, aún no es buena idea el hablar de esto aquí
- Antes de irnos quiero sentarme en aquel columpio del jardín - Visenya hablo rápidamente mirando la mano de Aegon para tomarla
- Lo haremos - Este miro a los lados abrazándola rápidamente - Nos despediremos sutilmente y nos marcharemos
- Me parece bien, la cena con el rey podría ser la mejor elección, algo sutil y significativa para todos, aunque nadie lo sepa
- Mataremos a mi padre del coraje - Murmuró Aegon mirándola a los ojos
- Si el entiende nuestro motivo nada malo pasará - Una sonrisa apareció en el rostro de Visenya dándole un beso - Te mostraré algo
La puerta de la habitación se abrió de golpe y por ella atravesó Aegon acompañado de Visenya que lo sujetaba de las mejillas en un beso profundo, el mayor inmediatamente la recargo en la pared junto a la puerta sujetando la cintura de esta durante el beso mientras las manos de la princesa bajaron un par de veces sobre el pecho del principe buscando liberarlo de las prendas
- Visenya - Susurro el platinado separándose por un momento para mirarla a los ojos y entender el deseo de ella - ¿Que deseas exactamente?
- Prometiste ayudarme - musitó la joven tomando su mano - Yo te necesito está vez, no como amigo, no como mi tío - musitó la joven clavando su vista en sus ojos - Más bien como hombre
Aegon dudo un instante en recorrer la mano por su cintura para atraerla a el y darle un beso. Su mano derecha recorrió lentamente la tela del vestido mirando directamente los ojos de la plátinada
- No quiero faltarte al respeto - Murmuró - No eres cualquier puta de la calle de la seda, no te volveré mi amante porque eres más que eso
Visenya tomo el rostro del hombre y asintio en respuesta antes de empujarlo gentilmente a su cama, no lo dejo hablar antes de obligarlo a sentarse y tomar asiento ella misma en sus piernas
- Yo Visenya Velaryon, prometo respetar a Aegon Targaryen...
- ¿Que haces? - pregunto el platinado siendo silenciado por la joven
- Nos estoy casando, ¿no es obvio?- Está dejo escapar una risita - Prometo ante los dioses nuevos y los viejos, brindarte hijos sanos y una familia mucho mejor de la que hemos tenido, amarte y darte apoyo cada que lo necesites... Es tu turno
Las manos de la joven desendieron por el pecho del joven abriendo la ropa de tela verde mirándolo a los ojos
- Yo Aegon Targaryen prometo velar por ti y tus hijos, que se volverán míos apartir de ahora - este coloco el cabello de la joven del lado izquierdo de su hombro bajando la tela un poco - te amare y respetaré...
- Preferiría que me faltaras al respeto ahora - Visenya introdujo sus manos bajo la camisa blanca del principe jalandola para abrirla sintiendo el beso en su hombro
- Shhh es mi turno - susurro el joven dando un leve mordisco en su hombro viéndola - Te protegeré siempre.... ¿Aceptas?
- Acepto Aegon - La sonrisa de la joven iluminó su rostro dándole un beso pequeño en los labios atrayendolo a ella con fiereza
Las manos de Aegon viajaron rápidamente a los listones que ataban el vestido de la princesa en un intento de desabrocharla dejando escapar una risa en sus labios
- Es más difícil de lo que pense - murmuro levantando lentamente la falda de Visenya mirándola
- No importa - respondió la joven abriendo el pantalón de Aegon mirándolo para acomodarse
Visenya se levantó un poco, lo justo para que Aegon se acomodara y entrara en ella de una vez y luego volvió a tomar asiento lentamente siendo atrapada por sus labios en un intenso beso
Sujeto la mejilla de Aegon y comenzó a moverse lentamente de arriba hacia abajo apoyada por la mano derecha de este quien comenzaba a marcar un ritmo lento pero profundo dejando escapar un gemido
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Survivor [Aemond Targaryen Y Tu]
Fanfiction- ¡Porque la tienes que desear a ella! - Daemon Targaryen dió un golpe en la mesa de madera - ¿Cómo te atreves a desear a mi hija? - ¿Tú hija? - Aemond Targaryen sobrino del mismo Daemon dejo escapar una risa - ¡Visenya no es tu hija! ¡Visenya es h...