Soy tu alfa y tu mi Omega

•15•

—¡¿Qué?! — gritó atónito.

—Fue atacado por unos lobos, se encuentra en el bosque — su voz se escuchaba temblorosa.

—¿Por qué no lo trajiste aquí? — preguntó exasperado.

—¿Cómo querías que lo hiciera, idiota? — frunció el ceño — Está herido, si lo muevo lo que haré es causarle más daño.

—Tienes razón, olvida lo que dije — se golpeó con su palma —Llamen a la curandera y que ella llegué a dónde está Jimin — volteo a los demás —Necesito que un grupo vaya conmigo y otro busque por los alrededores a los culpables — todos asintieron a las órdenes del futuro alfa —Ahora, vamos.

A toda prisa se dirigieron al bosque en dónde se encontraba un par de alfas que Yoongi dejo cuidando al Omega que se encontraba tendido en el suelo, lo que les confundió a todos fue ver a un cachorro llorando sobre su pecho y balbuceando cosas inentendibles por el llanto.

—Jimin... — Hoseok nada más dijo eso, la impresión le ganó al ver el cuerpo de su amigo tirado en el suelo sobre su propia sangre.

—No te quedes parado ahí y ayúdame a moverlo — le indico Jungkook y este asintió aún un poco ido.

Con ayuda de algunos alfas movieron a Jimin a una especie de camilla improvisada que habían hecho y cuando pensaron en llevará dónde la curandera está apareció.

—Aléjense un poco, den espacio para que pueda respirar — dijo la anciana y se acercó a Jimin para inspeccionarlo, reviso su respiración y pulso bajo la atenta mirada de los demás — Aún respira, pero es muy débil al igual que sus latidos — hizo una mueca — llévenlo a mi cabaña para comenzar a tratar sus heridas, si no lo hacemos empeorará.

Cuando levantaron la camilla todos quedaron en shock al ver la cantidad de sangre que había en el suelo, si no se apresuraban el Omega podría morir por la falta de esta.

Cuando se llevaron a Jimin el pequeño cachorro lloro desesperado al ver que lo separaban de él, Jungkook estaba confundido por la actitud del pequeño, en algunas ocasiones le vio en el orfanato pero este se notaba muy tranquilo, rara vez mostraba alguna clase de emoción, muchos decían que era debido al trauma de su infancia pero ahora verlo llorando de esa manera hacia que su corazón sintiera una horrible tristeza.

Sabía que por el momento no sería bueno hacerle preguntas al pequeño, estaba muy conmocionado y no respondería nada, ya cuando esté más calmado si le preguntaría.

—Vamos pequeño — todos voltearon a verlo —Se que no quieres alejarte de Jimin, así que te llevaré con él ¿Está bien? — el cachorro asintió aún llorando.

Lo cargo con suavidad y se fue detrás de los alfas y betas que llevaban a Jimin hacia la cabaña de la curandera, todos mantenían puesta su mirada tanto en Jimin como en él y no le sorprendía, por ahora no le tomaría importancia, lo único que verdaderamente importaba ahí era el omega.

🐾🐾🐾

Caminaba por el gran jardín lleno de flores celestes con tonalidades blancas sin rumbo alguno, solo quería caminar y distraer por un rato su mente. Aquellas flores que le rodeaban llamaron su atención así que se agachó y tomo una dándose cuenta que estaba en un jardín lleno de flores de Smeraldo, al verlas solamente se acordó de su mamá, cuánto desearía poder tenerla a su lado pero sabía que era imposible, ella está muerta.

Siguió caminando buscando algo, más no sabía que. Solo sentía el deseo de caminar pero no entendía porque estaba ahí, en primer lugar ¿Qué hacían ahí? ¿Qué era ese lugar? No le parece para nada conocido y duda que alguna vez lo haya visto.