13. Transformación

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Loki desde hace tiempo había preferido dejar de discutir con Thor, ya no valía su esfuerzo tratar de convencerlo de lo que él pensaba, el hecho de haber vagado por el universo durante un tiempo le dió momentos de cordura para pensar en las cosas y se dió cuenta de que jamás había tenido un amigo realmente, la gente con la que solía andar eran vividores del momento, les gustaba la fiesta y luego hacían como si jamás lo hubieran conocido, los demás eran amigos de Thor que solo lo molestaban en cuanto el rubio se volteaba.

Ahora era lo mismo solo amigos de Thor pero sin ningún vínculo con él, había estado resignado a quedarse solo pero estando ahí de alguna forma removía esos recuerdos que deseaba tanto enterrar y que dejarán de doler.

Regreso a su celda y se recosto para dormir un rato, las pesadillas aún lo atormentaban en ocasiones, pero por ese instante parecía ir bien, estaba en un sueño bastante lucido; su mente lo había llevado al lago de su infancia, día de calor, estaba jugando con el agua, nadando y corriendo por toda la zona, solía trepar los árboles que estaban al rededor, perseguir algunas aves o recolectar florecillas.

En algún momento aparecía Thor, con su espada a lo lejos corriendo de algo, parecía molesto, después enterraba su espada en él, no entendía lo que pasaba.

-Thor detente- gritaba -Por favor-

Se escuchaba en su voz adulta ya no era niño, se arrastró al lago donde su reflejo le reveló lo que no quería ver.
Era azul, de ojos rojos... Se alejo rápidamente de la orilla chocando con su hermano.

-¡Mataré a cada uno de ustedes, horrible Jötun!- alzó su espada de nuevo y la clavo en el corazón del pelinegro

Loki abrí los ojos de repente, sintió su corazón latir con fuerza, ¿estaba sudando acaso?
Tocó su frente y entonces la pesadilla se hizo realidad, era azúl, soltó un grito y el pánico lo inundó.

Corrió a mirar su reflejo en el cristal de la celda, su rostro era normal solo eran sus manos lo que parecía diferente, solo entonces pido respirar con tranquilidad y poco a poco su color se fue cambiando.

No quería asumir nada pero era evidente que algo malo estaba pasándole, por qué incluso cuando descubrió lo que era fue capaz de cambiar a voluntad frente al espejo para explorar ese cuerpo nuevo y ahora se le estaba saliendo de control, una aterradora idea cruzo su mente, ¿Odin sería capaz de quitarle la magia que lo mantenía como un æsir?







Hola, los capítulos están en desorden, lo siento.
Ya estoy tratando de solucionar el problema

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