20. Dulce sueños

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Frigga trato una y otra vez hacer que el consejo se retractara de la sentencia, pero todos estaban convencidos de que su hijo no era un buen ejemplo para sus enemigos y si le daban beneficios ya no los tomarían enserio.

La reina salió frustrada de la junta, hecha una fiera, salio a sus jardines a tomar aire fresco encontrando a un Thor mirando al horizonte.

-¿Interrumpo?- pregunto Frigga
-No para nada, ¿Cómo te ha ido con esos ancianos?- pregunto
-Nada bien me temo- preocupada
-Tú eres la reina, solo pídelo y ellos tendrán que obedecer- sugirió
-Ojala fuera tan fácil cariño- tomo su mano -¿Cómo está Loki?-
-Parece neutral- no supo que responder

Frigga asintió con la cabeza, el semblante de Thor estaba tan decaído y ell ase sentía tan impotente por no poder hacer nada.

-Loki menciono algo que me pareció una locura pero cree que Sigyn es la consejera de padre- comento en medio del silencio
-¿Sigyn?- extrañada
-Así es- afirmó
-Sabía que algo era extraño en esa chica- pensando -Su magia es bastante fuerte a decir verdad-
-¿Puedes hacer algo?- pregunto Thor
-Me temo que nada antes de mañana- Decepcionada
-¿Mañana? ¿Que va a pasar mañana?- pregunto preocupado
-Cariño... Loki el va dormir algunas decadas- dijo apenada -Fue su sentencia- dijo llorando

Las palabra de su madre alarmaron a Thor, salió corriendo a las celdas con Loki pero ya no estaba, los busco por todos lados hasta que una de las puertas se abrió, salían los hechiceros de ella y Thor se decidió a entrar.

Las personas se lo impedían, el conjuro que mantendría a Loki dormido estaba culminando, mientras el luchaba por entrar, el pelinegro volteó a verlo y con la mirada cansada y los ojos apunto de cerrarse trato de ponerse de pie cayendo al suelo pero sin dejar de mirar al tronador.

-¡LOKI!, ¡NO TE DUERMAS LOKI, NO LO HAGAS!- grito
-Thor...- dijo a modo de suspiro

El tronador logro zafarse de los hechiceros llegando a tomar a la mano de su pelinegro que había por fin quedado dormido, lo abrazo y algunas lágrimas cayeron de sus ojos.
De inmediato el enojo lo invadió, coloco al pelinegro en la superficie donde estaba recostado y llamo a su martillo, sus manos sacaban chispas no había duda de que habría problemas.

Tomo a Amora del cuello y la azotó contra la pared muy bruscamente.

-Diles quien eres- hablo entre dientes
-No se de que hablas- fingió inocencia
-¡Diles quien eres!- grito más furioso
-Thor suéltala ahora- dijo el padre de todo
-Confiesa o te hago cenizas ahora- Amenazó
-Hazlo y pasa toda tu larga vida viendo dormir a tu hermano- sonrió con superioridad
-Correré el riesgo- molesto

Su martillo saco rayos, estando apunto de golpearla la hechicera lo detuvo y salió volando al otro lado de la habitación.

-No creerás que es tan fácil vencerme ¿o si?- burlona
-Amora, basta- dijo Odín
-Basta tú anciano- lanzó un ataque

El ataque dió justo en el pecho de Odín, sin que pudiera evitarlo, hiriendo su cuerpo de gravedad, apenas si podía sostenerse.

-Ya es tiempo de que Asgard tenga una nueva reina-

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