¡Estamos de vuelta! Dije que sacaría dos pero ahora estoy entre tres😵💫. Esta es la primera y la segunda no se exactamente cuando la publicaré pero espero que pronto y la tercera aún tengo que empezar a escribirla...
Ahorita es lo único que tendrán hasta el próximo martes, el 22 si no me equivoco.
Bueno... ¡aquí empezamos!
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POV Narradora
Varios años antes
-Miguel Arango, ¿recibe usted a Mia para ser su esposa, para vivir juntos en sagrado matrimonio, para amarla, honrarla, consolarla y cuidarla, en salud y en enfermedad, guardándole fidelidad, durante el tiempo que duren sus vidas?-habló el padre.
-Sí quiero-respondió el pelinegro con una sonrisa.
-Y usted Mia Colucci, ¿recibe a Miguel para ser su esposo, para vivir juntos en sagrado matrimonio, para amarlo, honrarlo, consolarlo y cuidarlo, en salud y en enfermedad, guardándole fidelidad, durante el tiempo que duren sus vidas?
-Sí quiero-contestó con una enorme sonrisa.
El padre también sonrió e hizo que intercambiaran anillos.
-Puede besar a la novia-dijo felizmente.
La pareja se miraron con sonrisas y el pelinegro levantó el velo para luego besar a la rubia tomando el último paso hacia el matrimonio.
En la multitud una pelirroja observaba la ceremonia con una sonrisa en la cara pero con un dolor en el pecho. No entendía porqué, ni le encontraba la razón.
Aún estando de mano con su novia no calmaba lo que sentía.
Nunca había sentido tanto dolor sin estar herida físicamente.
(...)
Tiempo después
-¿¡Por qué quieres ir a verlas!?-exclamó el hombre enojado.
-¡Son familia! ¡Y Roberta es tu amiga, tu mejor amiga!-respondió la rubia en el mismo tono.
-¡Si fuera mi amiga no se echaría a hacer todo lo que nosotros queremos! ¡Por lo menos podían haber esperado!
El hombre había querido tener hijos directamente después de casarse pero la rubia quiso estudiar causando algo de resentimiento por parte del pelinegro.
La pareja llevaba ya dos años intentado traer a un fruto al mundo sin éxito.
Al contrario de sus cuñadas que se habían casado hace menos de un año y habían dado la noticia que ya estaban en su propia dulce espera.
-¡Nosotros no somos nadie para dictar como o cuando esas dos tienen hijos!-gritó la rubia.
El hombre se pasó la mano por el pelo en frustración.
-Ojalá Roberta se hubiera quedado con Fernanda. Ella no quería hijos y siempre fue vocal con eso-dijo sentándose.
Mia negó con la cabeza. No entendía porque su esposo se molestaba por las cosas que hacían los demás. ¿Por qué no podía vivir su propia vida?
-Y porque fue vocal, fue porque terminaron. Roberta está feliz y está viviendo su vida. Nos toca a nosotros vivir la nuestra y dejarnos de preocupar por ella.
-Y para vivir, las quiero fuera de mi vida y de la tuya. Corta contacto con ambas-dijo seriamente.
La rubia lo miró como si estuviera loco.
-Miguel...
-Nada de contacto con ellas-dijo de nuevo.
-No me puedes pedir eso. Es nuestra amiga, es hija de Alma y yo... yo estoy feliz por ella. La vamos a lastimar si la cortamos como si nada.
-Si me amas, lo harías.
-¡Eso es injusto!
-Nunca has querido a Roberta así que tú decides. Ella o yo—dijo seriamente.
Y con eso dicho, la rubia tomó una decisión, una decisión que causará más daño que bien.
(...)
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Parte De Mi
FanfictionDos personas y dos corazones. Un amor que nunca floreció. Dos matrimonios, ambos con un fin diferente. Las piezas siempre estaban ahí, pero nunca las juntaron. ¿Qué pasará cuando se junten de nuevo? ¿Se darán cuenta de que siempre fueron parte de la...
