EL PACIENTE 376 ✔️TERMINADA✔️

TIEMPO PARA MATAR EL DOLOR

Pov.Ezequiel

Mi hija me preocupa cada día más, han pasado 5 días desde que llegó a mi despacho, 5 días que no sale de su habitación y mucho menos deja entrar a alguien, no se comunica con nadie y no come un bocado.

Raziel y yo la tratamos de sacar de ahí pero fue en vano, si la lograbamos sacar de su habitación simplemente se sentaba y veía a la ventana como si esperará el regreso de alguien por la puerta.

En cuanto la investigación hasta ahora nada, no se sabe quién fue la sangre del auto era de cerdo al parecer y lamentablemente el cadáver encontrado era de una pequeña niña que coincide con la edad de mi nieta.

En cuanto a Marcus..se esfumó, simplemente desapareció dejándole más daño a mi niña.

-Valery es hermosa ,¿No papá? - pregunta mi Alma con la vista fija en la ventana.

Siempre hace esa pregunta.

-Lo es.

Siempre la misma respuesta.

Según el médico que la atendió sufre un shock emocional, nada grave con el daño causado y será cuestión de tiempo para que regrese a la normalidad.

Es como su mecanismo de defensa para el dolor que sintió.

Y eso me preocupa más que nada, pronto dejaré el mando para dárselo pero necesito que se recupere.

Pov.Alma.

Dicen que el tiempo lo cura todo, incluso el dolor pero yo soy la prueba viviente de que no, 5 días y todos ellos veo a Marcus por la ventana jugando con la pequeña Valery.

En unas horas será el entierro tanto del pequeño cuerpo de mi hija como la caja vacía del que amé.

Raziel está para mí fingiendo no sentir nada con una máscara de tranquilidad pegada al rostro pero incluso hubo noches en las que lo veía sostener una manta de Valery en brazos y llorar en silencio hasta el alba.

Debo salir de esta burbuja..debo despertar..debo de matar a quien mató mi vida entera.

Mi padre también a estado para mí, justo ahora me trata de dar comida como un bebé.

Volteo a verlo sin rodeos y tomo el plato de sus manos para comenzar a comer lo que parece sorprenderle.

-Gracias papá.

No sabría cuánto poder tienen estás palabras hasta que una lágrima resbala por su mejilla.

-Mi niña, siempre estaré para tí,no pude hacerlo antes pero de ahora en adelante así será.

Asentí y seguí comiendo lo que parece una clase de carne mi padre ya la había partido la mayoría en pequeños pedazos para mí.

A menos hasta que otra voces se escuchan en los rincones de la habitación.

-Si lamentablemente la pequeña murió - dice una enfermera que lleva a mi madre en silla de ruedas.

-Pobre mocosa pero ya sabía que iba a terminar así.

Voltee y la imagen de mi madre mirándonos fijamente fue lo que recibí.

Al parecer no habían notado nuestra presencia en la habitación.

Mi padre trata de soltar palabra al igual que la enfermera pero hablo yo.

-Valery...su nombre era Valery haganme un favor de lavarse la puta boca antes de decir el nombre de mi hija.

-¿Tan cruel eres para no pensar en el daño que le hiciste?

Jajajaja

-¿Crueldad?, Tu tratándome así,por dios madre que hipocresía la tuya, tu qué me vendiste y que sabías perfectamente lo que iban a hacerme en ese lugar.

Ella me mira como si fuese la víctima y yo lo que siempre fui para ella..

Un monstruo..

-Tu eras grande ya sabrías defenderte.

Maldita,maldita, maldita.

-¡¡Solo era una niña!!,¡¡ Ese hombre me tocó en lugares que ni yo conocía!!.

Sentí a mi padre tensarse en su lugar y la enfermera simplemente salió tratando de no salir más perjudicada de lo que ya estaba.

-La culpa la tienes tú,siempre la tuviste,mataste al amor de mi vida.

Sentí como mi cuerpo se tensó y más manos hechas puño, la impotencia me nubla la vista y lo único que encuentro a la vista distorsionado es el arma en el pantalón de mi padre.

Sin dudar la tomo y apunto al fantasma de mi dolor.

-¡Alma, mi amor, hija, por favor perdóname! -dijo mi madre y juro ver el pánico en sus ojos .

No me habla a mi, habla desde el estúpido miedo de la muerte.

Mi padre trata de tomar el arma con cuidado y yo me aparto de el sin dejar de apuntar a mi madre .

-Dile al amor de tu vida que le mando saludos a él y al diablo.

El disparo salió y ni mi padre lo pudo detener, el cuerpo de mi madre cayó como si un muñeco de trapo se tratase.

Mi padre me mira con impresión y yo simplemente paso por su lado dándole el arma con cuidado de no apuntarle.

-Debemos sacar la basura -fue lo último que dije antes de salir a mi habitación.

Necesito un buen baño de agua caliente.

Mi madre siempre me vio como un mounstro y ahora que supo que me rompí aprovecho para tener su estúpida venganza y como siempre yo fui la vencedora.

Al entrar a la habitación veo a Raziel de espaldas viendo a la ventana mientras fuma un cigarrillo, al notar mi presencia fuera de ese trance solo sonrió de lado.

-¿Mataste a alguien preciosa?.- preguntó con cierto cariño.

-Si, el mounstro mató a mami.- me acerque a el y lo bese lentamente el no tardo en responder a mi beso para después separarnos por falta de oxígeno.

Me mira con cierta devoción haciéndome sentir extraña.

-¿Qué? - pregunté al ver que no tenía intención de dejar de verme así.

El solo alza los hombros y su sonrisa se hace más grande.

-Mi diabla a vuelto.

Y no se equivoca el dolor es insoportable pero bien dicen que lo que no te mata te hace más fuerte.

Holaa

Tuve que hacer pequeños arreglos ya que sentía que la historia estaba llendo demasiado rápido 🤧

Así que aquí estamos de regreso si no actualizo rápido me disculpo tengo algunos problemas personales pero ya estamos acá.

Se les quiere 🍎✨

CHAUUU☕