Sin Rastro

(1)

PARTE UNO

CALMA ANTES DE LA TORMENTA

-Mamá, mamá. Cuéntame la historia.

-Te la he contado un millón de veces, cariño.

-Pero me gusta escucharla.

-Está bien, pero esta es la última vez que te la cuento y después te vas a dormir.

>>Cuenta la leyenda, que al inicio de toda la destrucción del planeta, existió una civilización que convivió en el Bosque Gris con una criatura llamada Tépas; un monstruo submarino que los protegía de las atrocidades de animales y otros seres humanos. Él era su protector. Estas personas eran llamados Tyflós, seres humanos mutados por la contaminación, castigados por las atrocidades de la humanidad y condenados a nunca más poder ver la belleza que una vez tuvieron y no lograron cuidar. Aeris una chica con el cabello de dos colores y la visión diferente a la de toda su comunidad, era la única que lograba controlar y conectar con el Tépas. La chica tenía habilidades extraordinarias pues podía curar a las personas, avisarles de peligros que solo se pudieran ver y no escuchar. Era su líder. Ella y el Tépas fueron inseparables, protegían a su comunidad de todo peligro...

Observo a mi hija quien ya tiene los ojos cerrados y la arropo hasta el cuello para que el frío de la noche no le afecte. Me agacho hasta su mejilla y dejo un efímero beso de buenas noches. Mi afecto la despierta y no duda ni un segundo en hablar.

-Sigue mamá- suelta acurrucándose a mi lado.

-Ya esta muy tarde amor, mañana terminaré de contarla. Además ya tienes sueño- dejo un segundo besó pero está vez en su frente y camino hacía la puerta.

-¿Mamá?

Freno en el marco deshecho y mal pintado de su habitación.

-Si cariño.

-Tu eres mi Tépas.

-Y tu el mio, cariño- sonrío con nostalgia.