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Tomo del vaso de café que traía en sus manos y luego observó la camilla. Hoseok, su primo, se encontraba inconciente en aquella fría camilla.
Bebió otro poco y dejo el vaso a un lado, se puso de pie y se acercó a la camilla; despacio, temiendo que pasará lo mismo de haces unas horas.

En cuanto estuvo a tan solo centímetros, pudo apreciar como Hoseok abría lentamente los ojos.

—¿Ho-Hoseok?.

El nombrado parpadeo, acostumbrado a sus ojos a la luz artificial. Dirigió su mirada hacia aquella voz tan conocida, una leve sonrisa se dibujo en sus finos labios.

—Yo...YoonGi.

Su garganta se encontraba completamente seca. YoonGi rápidamente tomo la jarra que se encontraba en una mesita de aquella habitación y vertió un poco de agua en un vaso, rapidamente se acercó a Hoseok y le ayudo a beber el contenido.

—Gracias.

—Esta bien.

La habitación quedó en completo silencio después de que YoonGi dejo en la mesita el vaso ya vacío. Después de unos minutos en silencio, YoonGi no sabía cómo comenzar una conversación, tenía miedo que su primo reaccionara mal si mencionaba alguna cosa que no le agradará.

—¿Que hago aquí?.

YoonGi suspiro y cruzo los brazos sobre su pecho.

—Tuviste una descompensación en medio de un show de circo, te dió dos paros cardíacos y tuviste una hemorragia de nariz.

Hoseok frunció el ceño, negando.

—Yo estoy en perfecto estado de salud...

—Lo sé –interrumpio YoonGi–. Nadie sabe lo que pasó realmente.

Hoseok bajo la mirada a su regazo y nego. Hace tan solo unos días se había ido a hacer su chequeo semanal, jamás lo olvidaba.

—Hace días fui al hospital, y ellos dijeron que estoy en perfectas condiciones.

—Hoseok...–YoonGi se acercó y puso la mano sobre el hombro de su primo–. Estuviste en coma por más de una semana, tu situación no estuvo nada buena. Los doctores no sabían nada de la condición en la cual te encontrabas...además sucedieron algunas cosas, las cuales te contaré luego.

—No puedo creerlo –bajo la mirada a sus brazos, lo cuales se encontraban vendados y con agujas inyectadas en sus manos y brazos–.

YoonGi bajo un poco la guardia y se acercó un poco más.

—¿Estás bien?.

—Si –aseguro–. Es solo que no puedo creer que allá estado tanto tiempo dormido.

—Comprendo –asintio–. Pero lo bueno es que ya despertaste.

—Lo sé –subio la mirada y miro a su primo–. ¿Está todo bien?.

—¿Porque no lo estaría? –sonrio, forzado–.

—Porque...estoy seguro que ya me abrías abrazado, pero no –sonrio–. En cambio estás ahí todo quieto, y esa mirada... sólo la vi una vez.

YoonGi bajo la mirada. ¿Que debía de decirle? ¿Que hace unos días estuvo apuntó de matarlo?. No, de seguro eso afectaría a Hoseok y se pondría mal. Subió la mirada nuevamente y observó aquellos ojos, de pronto imagenes golpearon su mente, recuerdos de aquella pelea.

—Lo siento, es solo que...me siento preocupado por ti y yo...las cosas pasaron de pronto que yo...

—Tranquilo –le calmo–. Entiendo, yo tampoco contaba con esto, pensé que con aquellos medicamentos las cosas estarían mejor...pero veo que no.

En la caja •°HopeV°•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora