Freya, Bucky y Sam caminaron el resto del camino hasta el aeropuerto donde Torres los estaba esperando con el avión. Cuando abordaron, lo primero que hizo Freya fue dirigirse al baño y cerrar la puerta; se quitó el traje de combate y volvió a ponerse su ropa normal antes de mirar su reflejo en el espejo.
Érase una vez, pensó que tenía todo lo que podría haber deseado. Tenía un gran grupo de amigos a quienes les confiaba su vida, había logrado encontrar a alguien que la amaba y le mostraba que era digna de amor, y tenía una vida de la que se sentía orgullosa.
Ahora, sin embargo, sentía que todo eso se había reducido a nada. Ver a Walker portando el escudo la hizo dudar de todo, porque si Steve estaba equivocado al creer que Sam era lo suficientemente fuerte como para ser el nuevo Capitán América, ¿eso significaba que estaba equivocado con Freya?
Hace mucho tiempo se consideraba a sí misma como un monstruo, una víctima de los experimentos de HYDRA y una vida inocente convertida en una máquina destinada a nada más que ser un peón en el juego de otra persona.
No se dio cuenta de que estaba llorando hasta que escuchó un golpe en la puerta, y cuando Freya abrió los ojos, estaba acurrucada en el piso del pequeño baño, abrazando sus rodillas contra su pecho.
—¿Freya? —dijo Bucky en voz baja, sus nudillos golpeando la puerta—. Freya, ¿estás bien?
Freya se secó los ojos—. Sí. Sí, estoy bien.
—¿Puedes abrir? —preguntó Bucky. De mala gana, Freya se estiró y abrió la puerta del baño. Bucky entró, y por una fracción de segundo, estuvo confundido, hasta que vio a Freya sentada en el suelo y suspiró—. ¿Qué estás haciendo?
—Nada —respondió Freya tranquilamente.
—¿Te importa si me uno a ti? —preguntó Bucky.
Freya se encogió de hombros, presionando su cara contra sus rodillas. Escuchó como Bucky se detuvo, y luego escuchó cerrarse la puerta del baño. Cuando levantó la vista, Bucky estaba sentado con la espalda contra la pared opuesta a ella, y cuando vio que ella lo miraba, colocó su mano sobre su rodilla.
—¿Qué ocurre? —preguntó Bucky—. ¿Por qué estás llorando?
—No estoy llorando.
—No mientas —dijo Bucky—. No me gusta cuando lloras. ¿Qué pasa?
Freya se encogió de hombros—. No lo sé. Supongo que solo... siento que ya no soy buena para nada. Quiero decir, Steve creía en mí de la misma manera que creía en Sam, y ahora que lo pienso, ¿y si estaba equivocado conmigo?
—No estaba equivocado contigo —dijo Bucky en voz baja—. Porque si se equivocó contigo, eso significa que también se equivocó conmigo, y no quiero creer eso.
—Me siento tan... tan inútil —respondió Freya—. Odio sentirme así. Me siento tan sola, Bucky. Me siento tan sola en el mundo. Quiero decir, Nat se fue, Tony se fue, Steve se fue y ya no hay Vengadores y siento que no me queda nadie.
Bucky suspiró con tristeza, no le gustaba ver a Freya así. Por lo general, ella era la que levantaba a los demás cuando caían, pero ¿quién quedaba para levantarla a ella cuando tocaba fondo?
—Ya no quiero estar sola —admitió Freya con la voz quebrada mientras una lágrima rodaba por su mejilla.
—No estás sola —dijo Bucky—. Me tienes a mí, tienes a Sam.
—¿Y si ustedes también me dejan? —preguntó Freya—. Quiero decir, todos los que me importan terminan dejándome.
Bucky se movió torpemente hasta que estuvo sentado al lado de Freya, sus hombros tocándose en la proximidad del baño—. No te dejaré. Te prometo que no lo haré.
—¿Estás diciendo eso solo por la promesa que le hiciste a Steve? —preguntó Freya.
—¿Cómo...?
—Me di cuenta cuando empezaste a venir a verme —respondió Freya—. Parte de mi trabajo requería leer a la gente, y me volví bastante buena en eso.
—Al principio se trataba de cumplir la promesa de Steve —dijo Bucky—, porque sabía cuánto se preocupaba por ti y no quería verte molesta, pero luego de un tiempo era porque realmente quería estar cerca de ti. No te das cuenta, Freya, pero eres una gran persona y nunca he conocido a nadie con un corazón tan bueno como el tuyo.
El labio inferior de Freya tembló—. ¿En serio?
—Sí —respondió Bucky—. Quiero decir, si yo estuviera en tu situación, odiaría a Steve por lo que hizo. A veces lo hago, porque te hizo las mismas promesas que me hizo a mí, y nos dejó aquí sin ningún lugar adonde ir.
—Arriba —dijo Freya.
—¿Qué?
—Dijiste que no teníamos adónde ir —dijo Freya—... tocar fondo significa que solo hay un camino a seguir, y es hacia arriba.
—¿Ves? A eso me refiero —dijo Bucky—. Siempre encuentras en ti el tener fe, incluso cuando otros no pueden verla. Sin ti, Steve, e incluso los Vengadores, no podrían haber hecho ni la mitad de lo que hicieron. No te das cuenta de lo importante que eres.
—Gracias, Buck —susurró Freya.
—Y no escuches a Walker —dijo Bucky—. Ese tipo es un idiota —Freya se rió y Bucky sonrió—. Pero en serio, eres mucho más que cualquier imagen de ti que la gente haya creado en sus cabezas. Nunca olvides eso.
—Tú tampoco —dijo Freya, alcanzando la mano de Bucky y apretándola suavemente—. Eres más de lo que HYDRA te hizo. Steve tenía razón sobre los dos, y mientras creamos eso, no hay nada que pueda convencernos de lo contrario.
Bucky sonrió cuando Freya se acercó a él y lo abrazó. Todo lo que necesitaba era tranquilidad, porque a veces todo lo que alguien necesitaba era un suave recordatorio de que eran más fuertes de lo que creían.
Él le devolvió el abrazo y Freya dijo—: Deberíamos levantarnos porque estamos sentados justo al lado de un inodoro y es un poco antihigiénico.
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RADIANT | Bucky Barnes ⁵
Fanfiction― 𝒓𝒂𝒅𝒊𝒂𝒏𝒕 𝐞𝐧 𝐝𝐨𝐧𝐝𝐞 freya daniels regresa intentando encontrarse a si misma después de perderlo todo. ( bucky barnes x fem!oc ) ( marvel ) ( libro cinco de la serie iron women ) ( historia by @somekindofstardust )