Demonio De Bolsillo

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La mañana de noche buena había llegado y ambos chicos sabían lo que significaba. El más alto había pasado toda la mañana en la cocina, preparando todo lo que iban a comer y también preparaba el desayuno. Quería algo ligero para ambos pero que les diera la energía suficiente para mantenerse hasta la noche. Por otro lado Sae estaba terminando de envolver regalos lo mejor posible y los ponía debajo del árbol.

-Amor mío, ¿Qué estás haciendo?- preguntó Shido llegando al mismo sillón en que Sae luchaba con una cinta.

-Trato de envolver los regalos, pero está estúpida cinta no coopera-

Shido miro divertido como su novio hacia una rabieta con el papel que no se acomodaba y la cinta que no se despegaba de sus dedos - Déjame ayudarte- Sonrió y le quitó la pequeña caja de las manos

-Te ves algo estresado, ¿Por qué?- Sae creía que lo ocultaba bastante bien pero al parecer no era tan bueno como creía- Estoy nervioso por la cena. No he hablado con mi papá hace seis meses y si no lo hice fue porque no lo soporto. Te juro que si dice algo para arruinar la cena, lo voy a sacar de la casa y traeré a Rin a casa para que ese hombre se quede solo hasta su muerte-

Shido había estallado en risas que no le causaban tanta risa al pelirrojo. Cuando dejó de reír porque notó la clara mirada de su novio lo tomó de las manos- Lo siento, pero eres tan lindo cuando odias a las personas y haces corajes- Se abalanzó sobre él quedando recostados en el sillón uno sobre el otro y le dió un gran beso en la mejilla- Todo va a salir bien. Estoy seguro de eso. Además, si hace algo que no te guste, tú no tendrás que hacer nada, yo me encargaré de él-

Una vez más Sae estaba recordando el porqué usaba ese collar de pareja y el porqué compartía su cama cada noche con ese chico. -Esta bien. Entonces, aún tienes tu regalo asegurado- Shido se levantó rápidamente ¡¿Su regalo de navidad dependía de si hacia enojar a Sae?!

-¡Me quitarás mi regalo!- en un acto casi inhumano Shido brincó del sillón hacia los pies del árbol y los demás regalos y los cubrió con su cuerpo- ¡Jamás lo permitiré!-

Sae no pudo evitar sonreír. A veces Shido era realmente un niño. Caminó hacia Shido, con cuidado le quitó las cajas entre caricias y de a poco se sentó sobre las piernas del rubio -No hablaba de este regalo- Sae besó al chico. Ambos se perdieron en su mundo de besos y caricias durante un rato hasta que Sae se separó por un momento y dijo al oído- Estoy usando ahora mismo debajo de mi ropa, el regalo- Shido sonrió y presionó los muslos del chico sobre de él y este aprovechó el momento para, pasar sus brazos sobre el cuello de su novio, rodearlo con ellos y después gemir lo más provocativo que pudo en su oído. Ante este acto Shido se tensó por completo y justo cuando quiso ir más allá, el reloj sonó indicando que faltaba una hora para que sus invitados llegasen.

-¡Oh, mira la hora!- Sae se levantó y caminó directo a la mesa para comenzar a acomodar las cosas- Se hace tarde. No tardan en llegar-

Shido estaba perplejo y con ganas de más, intentó quejarse pero Sae no se lo permitió. Estaba claro que este solo era el pre de lo que sucedería en la noche. Sae quería jugar a provocar a Shido y Shido amaba ese juego.

La noche por fin había llegado. Sae había salido a recibir a sus invitados. La impresión de primera vista no había sido la mejor pero aún así, lo había dejado pasar, hasta que del auto vio bajar a alguien que no conocía.

Un chico delgado de cabello azul un poco más largo que el de su hermano y ojos azules bajaba con unas bolsas en la mano y entró detrás de Rin.

Sae estaba en shock total. Había aceptado que su hermano trajera a alguien más, pero creía que iba a ser una chica debido a su insistencia. Aún así decidió entrar a la casa en dónde Shido recibió a todos con una sonrisa enorme y les dió su lugar en la mesa. Una vez que todos estuvieron dentro Sae habló.

-Esperaba que pudiéramos comenzar a comer. Shido se esforzó bastante en hacer está cena, así que espero que la disfruten-

Shido había notado la pena y los nervios en su novio, así que cuando se sentaron a comer tomó su mano por debajo de la mesa, la apretó y le sonrió en un intento de dar apoyo silencioso.

-Dejemonos de tonterías. Dinos, ¿porqué querías que vinieramos?- Habló el padre.

Esto había sido un claro ataque directo al chico y el rubio lo había notado por completo. Su reacción había sido levantarse de golpe de la mesa, estaba a punto de tomarlo de la camisa y sacarlo de la casa pero Sae lo detuvo e hizo que tomara asiento.

-Queria tener una linda cena familiar e intentar arreglar esta relación de mierda que tenemos en esta familia por tu puta culpa. Así qué, ¿podrías sentar tu maldito trasero en la silla, comer y actuar como el buen padre que nunca fuiste por una jodida vez?- La voz de Sae temblaba y Shido lo notaba, cada vez se ponía más tenso el ambiente.

-Ahg, al carajo- El hombre volvió a sentarse y se perdió en su plato.

-Eh...-Rin habló - Bueno, yo quería presentarte a mi acompañante- Sae miró desconcertado. Lo había olvidado por completo debido a la los nervios con su padre. -El es Isagi Yoichi. Mi novio-

Isagi se levantó e hizo una reverencia saludando al pelirrojo.

La sorpresa fue tanta que Sae flaqueó y de no ser porque estaba sentado se habria caído. Rin también era gay y su padre no mostraba ninguna reacción por ello. Habían hecho esa cena para salir del closet con tanto miedo y ahora que alguien más lo había hecho antes y no veía la reacción, solamente lo confundía más.

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¡Hola! Aquí Dima haciendo aparición por primera vez en la historia.

¡¡Tengo muchas cosas para decirles!!

1.- Espero que les esté gustando tanto la historia como a mí escribirla. Había empezado como una historia tonta privada solamente para mí mejor amiga, hasta que ví que tenía diez capítulos escritos, fue cuando decidí hacerla pública.

2.- Amo leer sus comentarios ¡Son muy divertidos! Y de alguna manera me hacen sentir apoyada y que no hago esto en vano <3

3.- Ahora sí, a lo que les interesa 👀 Creo que la historia está casi por terminar, aún no lo sé, todo depende de que tanto más se me ocurra. Aún tengo un capítulo extra de reserva (capitulo 13) para poder subirles pero también quería hacerles el anuncio, sobre todo a las personitas que son tan atentas de dejarme saber sus reacciones tan divertidas en los comentarios.

Estoy a escasas dos semanas de regresar a la universidad y a la constante tortura que eso representa. Así que quería decirles que es posible que las actualizaciones después del capitulo 13 no tengan tanta frecuencia :( les prometo hacer mi mejor esfuerzo.

En recompensa por esto, planeo subir el siguiente capítulo el día domingo por la noche ¡TRIPLE ACTUALIZACIÓN!

¡Nos leemos en el siguiente capítulo, Dimaria fuera!