Blue Lock - One shots

Mikage Reo

Había vuelto a discutir con mis padres. No querían que cumpliera mi sueño. Veían imposible e inviable que me convirtiera en el mejor delantero del mundo. Solo me repetían una y otra vez "Reo, habiendo empezado a jugar tan tarde es imposible" entre otras tonterías. Que solo debía centrarme en heredar la compañía y toda su fortuna. Me negaba. Me negaba a vivir de las rentas. Me haré con la copa del mundial cueste lo que cueste y les demostraré que se equivocan. Estaba cansado de escuchar sus quejas, así que salí de la casa por mi cuenta. Caminé y caminé enfadado hasta donde los pies me llevaran.

Acabé llegando a un barrio un poco lúgubre, silencioso y desolado. No me hacía mucha gracia estar ahí, y menos cuando estaba atardeciendo. Dando algunas vueltas más por esa zona, me fijé en un bar que rompía ese silencio sepulcral. Se escuchaban gritos desde dentro, así que con la esperanza de ver cómo era la gente por esta zona y la curiosidad que tenía, me adentré en el local. Estaba bastante lleno y todos se encontraban mirando una televisión. En esta se estaba emitiendo un partido de fútbol; Yokohama F. Marinos vs Kawasaki Frontale. El bar se dividía en dos equipos, cada uno tirando vítores por un equipo distinto. Examinando aún más, me percaté de la presencia de una chica que me miraba desde la barra. Cuando nuestras miradas se cruzaron, me dedicó una brillante sonrisa y me hizo una señal invitándome a sentarme con ella.

- Muy buenas - me dijo con esa sonrisa deslumbrante - ¿Has venido a ver el partido? -.

- ¿Eh? Ah, bueno, no exactamente - dije desviando la mirada. Se veía muy ilusionada por este partido y tampoco tenía excusa para no decir "me he escapado de casa y he andado hasta acabar en este barrio de mala muerte. Ni sabía que aquí se emitía un partido aquí".

- Bueno, pues ya que estás aquí, ¡a disfrutar! - dijo dándome unas palmaditas en la espalda - ¿Con qué equipo vas tú? -.

- Ambos equipos son muy buenos - dije sin posicionarme por uno u otro.

- Anda venga, ¡no seas aburrido! - me dijo frunciendo por un momento el ceño, pero en unos pocos segundos volvió a su rostro la misma sonrisa que tenía cuando entré - ¿Seguro que no hay uno que quieres que gane? - esto último lo añadió dándome unos codazos en el brazo intentando que le diera la respuesta que buscaba.

- Si tuviera que apostar por uno, supongo que sería el Yokohama. Tiene muy buena plantilla, además de una fuerte defensa. Aunque el otro equipo tiene una táctica con mejor ofensiva, es difícil romper la defensa de Yokohama. Lo más probable es que el primer tiempo lo gane Kawasaki 2-1, pero se fortalecerá la defensa de Yokohama en el segundo, dándole más libertad a los delanteros para marcar, consiguiendo así la victoria - al final pasé de no querer mojarme a dar una predicción entera del partido. La chica se quedó unos segundos en silencio procesando todo lo que acababa de decir.

- ¡Guau! Nunca te había visto por aquí, pero sabes una barbaridad de fútbol - exclamó bastante ilusionada. Casi podía ver como tenía estrellas en los ojos - Soy ___, es un placer ver este partido con alguien tan entendido. Aquí todos disfrutan de ver los partidos, pero no saben mucho de fútbol. Son felices con un par de copas y la adrenalina del gol - su expresión cambió drásticamente de una emocionada a una un poco más seria.

- Es cierto, pero ese es en parte el éxito del fútbol comercial. La gente no tiene por qué pensar, sino celebrar la victoria. Pero no me parece mal, no es necesario ser experto en algo para disfrutarlo. Puedes llamarme Reo - le dije yo. Seguía con una expresión seria en el rostro, así que por unos momentos tuve miedo de haber dicho algo que no debía, pero no fue así.

- ¡Tú y yo si que nos entendemos, Reo! - dijo agarrando con fuerza mi mano y sacudiéndola con energía, relajando la tensión que se había generado en el ambiente - ¿Cómo es que no te había visto antes por aquí? ¿No eres de la zona? -.