Alex
Estuve todo el día sin salir de mi habitación y sin dejar entrar a nadie, aproveche el tiempo para adelantarme con los apuntes de Mal y me volví a acostar
Salí al escuchar a alguien subiendo las escaleras, ya era algo tarde para que estuvieran fuera de sus habitaciones
— ¿Ben? — Pregunté al verlo caminando hacia su habitación con la cabeza baja
— Alex. — Levantó el rostro y me miró con una sonrisa — ¿Que haces despierta aún?
— No he podido dormir. ¿Estás bien? ¿Por qué llegaste tan tarde?
— Ah... Estaba en una cita con Mal, la dejé en su habitación y me quedé caminando por ahí un rato.
— ¿Estás loco? Eres un príncipe importante, no puedes ir por ahí solo y a esta hora.
— Necesitaba pensar.
Estaba triste, lo sabía, pero era algo raro, acaba de tener una cita con su novia, seguro se besaron y es muy raro que llegue así
— ¿Qué te pasa? — Pregunté acercándome a él
— No lo se yo... Creo que estoy enamorado.
¿Enamorado? ¿Cómo puede estar enamorado? La conoció hace muy poco, no llevan nada de novios, esto no es posible
— ¿Estás seguro?
Asintió
— Lo estoy.
Lo hice entrar a mi habitación y cerré la puerta con seguro, luego nos sentamos en mi cama
— Si están enamorados ¿Por qué vienes así? Deberías estar feliz.
— No estamos enamorados, solo yo lo estoy, se que ella no siente nada por mi, me di cuenta hoy.
— Pero aceptó ser tu novia, debe sentir algo.
— Eso pensé pero... — Soltó un pequeño suspiro — Hoy me di cuenta que no es así, no está enamorada de mi, tal vez solo estaba confundida cuando aceptó. — Se quedó un rato en silencio y una lágrima bajo por su mejilla — No entiendo cómo me enamoré, la acabo de conocer.
— Ben.
Lo abracé y lloró en mi hombro, sentí mi corazón partirse en dos y sentí su tristeza, es algo que ha pasado desde que somos pequeños, cuando el está triste yo también lo estoy y viceversa. Jamás lo había visto así por nadie, ni siquiera en todas las estúpidas discusiones que tuvo con Audrey
— ¿Cómo te diste cuenta?
— Simplemente note que no estaba segura de nada y también su rechazo, no acepta ninguno de mis besos y en su lugar me abrazó.
— Habla con ella Ben, tal vez solo este algo en shock, no sabes que ha pasado en su vida.
— Si... Bueno, iré a dormir.
— Descansa y porfavor no llores más.
— Está bien.
Limpie sus lágrimas y salió de mi habitación dejando la puerta cerrada
Me levanté y me quité la ropa de Mal, el fin de semana la mandé a lavar y secar cada día, era muy cómoda
Me puse mi pijama y me acosté de nuevo bajo las cobijas
[...]
Pasaron dos semanas desde lo ocurrido en la cita de Ben y Mal, mi hermano nunca habló de eso con ella a pesar de lo mucho que le insistí
ESTÁS LEYENDO
Nuestro "felices por siempre"
RastgeleAlex, la hermana de Ben, conoce a Mal, la hija de la más temible villana, sin imaginarse que terminaría perdidamente enamorada de ella