Sangre de dos ||n.h||

Parte 48

- Niall, tengo que decirte algo...-me rasqué la nuca ante tanto nerviosísmo.- Verás yo...bueno...con Harry...ya sabes y...lo siento y...-soplé. Golpeé con la Palma de mi mano el reflejo del espejo, ósea el mío. ¿Y si no se lo digo y ya? Supongo que lo olvidaremos y lo arreglaré con Harry y bueno...
Aunque no creo que vaya a poder mirarle a la cara.
-Tengo que decírselo.-dije para mí.
-¿El qué?-me paralizé. Venga, tengo que hacerlo.
-Pues tenía que decirte algo.-dije al aproximarme a él.
- Pero déjame que te diga yo algo antes.-me cogió de las manos y me miró fijamente con esos ojos azul como el mar oscuro en la noche.-Gracias a ti, me estoy empezando a valorar como soy.-apreté sus manos y contení mi respiración agitada. Espero que no se diese cuenta aunque creo que tenía las manos sudadas.-Y aunque no seamos imánes, bueno, te quiero como eres, con tus malas y buenas cosas...-
-Niall...-interrumpí antes de romperme en mil pedazos.-Te he ocultado algo, de lo que no estoy orgullosa.-me sorbí y parpedeé para espantar las lágrimas.
-¿Qué pasa, Emma?-le miré fijamente y solté mis manos de su agarre.
Me senté en el suelo tras apoyarme en la pared y dejarme bajar. Miré hacia algún lado sin mirarle porque no podía.
- ¿Te acuerdas de una vez que Harry me mordió en vez de ser tú?-podía notar su tensión en los nudillos, creo que se podría haber hecho una ligera idea de lo que pasaba.- Harry y yo, mucho antes de que yo te conociera y entrara a la Universidad, éramos pareja, una pareja "estable"-me burlé de la palabra estable porque yo pensaba que Harry hubiese hecho todo lo que estuviese en su mano por quedarse conmigo. Me pellizco internamente por recordar como me besaba en el cuello y sentía su corazón latir en mi mejilla después de haber hecho el amor por primera vez los dos bajo un árbol.
***********************************
-Harry, ¿dónde vamos?-pregunté cojeando por el dolor de gemelo que llevaba encima.- La fiesta está abajo y no podemos alejarnos mucho, luego no podremos volver a casa porque no encontraremos el coche.-
-Deja de poner pegas y disfruta.-me cogió la mano y tiró de mí.
-¿Qué disfruté? ¿Cómo? Si parece que quisieras secuestrarme.-reí.-Eres un secuestrador, Harry.-giró hacia dónde estaba y con una mano cogiéndome la parte detrás de la oreja me besó.
-Soy tu Síndrome de Estocolmo, entonces.-rió.
-Mmm...-pensé.-A lo mejor te quedas con las ganas.-

Después de andar por más de media hora nos sentamos bajo un árbol con hojas caídas y de estatura considerable. Los dos apoyados con la espalda en el enorme tronco y cogidos de la mano.
-Emma.-susurro. Le miré sonriendo.- ¿Estás lista?-la sonrisa se desvaneció y miré nuestro agarre. Volví a mirar su rostro y sonreí. Me convencí de que él era a quien quería, a pesar de haber soñado con alguien que seguramente no conocería, pero Harry era el amor de mi vida. Me puse encima de él y lo demás es todo historia.
***********************************
Apoyé la cabeza en la pared y lloré. No sé cuánto tiempo llevaría llorando pero Niall ya se había ido, supongo que hacer lo mismo que yo.
Me levanté con dificultad y miré por la ventana.
《Ahora es cuando corres y huyes de todo esto, y empiezas de nuevo》
Cogí una cuerda y la agarré a la ventana, bajé con dificultad pero bajé. No sé que haría ahora.
"Te quiero tal y cómo eres."Me golpeaba todo el rato en la cabeza.
Soy una cobarde con nombre de valiente. Eso es justamente lo que soy. He hecho daño a Niall. Me he hecho daño a mí y ahora estoy quedándome sin lágrimas. He sido una estúpida.
Zayn quería alguien de mi familia para estar feliz, y matarlo. Yo me entregaría, aunque soy su debilidad y no sería capaz de matarme pero es capaz de violarla así que no creo que le resulte difícil deshacerse de mí.
Creo que Niall y yo somos sólo un secreto. Pero que no puede ser expuesto porque haría daño a cada uno. Y cada vez que estamos juntos, más no alejamos. Sólo cuando nos alejamos, es cuando nos descubrimos.
Al menos, me he quitado una culpa de encima. Pero me martiriza la cabeza.