Harry es un pediatra en un hospital de enseñanza, Louis es su residente.
Donde Harry quiere adoptar a un bebé del área de pediatría antes de que se vaya a servicios sociales.
O donde Louis tiene cariño por cierto bebé que su jefe quiere adoptar.
⚠️...
Pasaron las horas y Louis no encontraba a Harry en ninguna parte del hospital. Inclusive en varios ingresos que tendrían que trabajar juntos, Harry no aparecía, y en su lugar llegaba algún otro reemplazo de su parte, en su mayoría estudiantes a lo que ahora Louis se encargaba de enseñar.
No se sentía orgulloso de su actitud de antes, ni de lo que hicieron el día anterior. Sólo quedaba en su mente lo mal que se vio por actuar de una forma completamente diferente antes y después de haber estado juntos de una forma íntima. No le gustaba que Harry se quedara con la idea simple de haber sido usado por él.
Terminó sintiéndose agobiado por tantas cosas en la cabeza, tanto que prefirió ir a los vestidores y tener un tiempo de tranquilidad allí mismo. Por alguna razón Louis no era fanático de las salas de descanso, nunca se sintió completamente cómodo estando en ese lugar. Aunque fuera el favorito de la mayoría de los médicos.
Estaba sentado en el piso, con la espalda apoyada en la pared al igual que su cabeza. Sus manos juntas sobre sus ojos, ocultado la luz de su vista.
Se removió en su lugar cuando escuchó el ruido en la puerta y después en el casillero de estos, quitando sus manos para ver quién era y poder preguntarle si le molestaba su presencia y así irse.
Vio la puerta del casillero de Harry abierta, y parte de su cuerpo ahí mismo. Estaba seguro que él no lo notó y se sintió afortunado por ello. Finalmente podía tener la oportunidad de hablar con él, como Niall se lo dijo.
—H-Harry...— dijo con tono bajo y lleno de remordimiento.
El rizado tomó un largo suspiro, y exhaló de forma sonora. Haciéndole saber al castaño que su presencia no era muy bien recibida.
Éste cerró la puerta de su casillero, queriendo mantener el semblante neutro que Louis entendió como un semblante molesto y forzado a ser amable.
La voz de Harry lo interrumpió antes de continuar con su disculpa.
—Estaba pensando en ti.— Louis sintió un ligero cosquilleo en su cuerpo. —Iré por Faith a su apartamento. Para que le avises a Niall que iré por ella y no haya algún problema con la bebé.
Ni siquiera se tomó el tiempo de hacer lo que iba a hacer. Tomó sus cosas entre sus manos, dispuesto a salir de la habitación y tener el menor contacto posible con Louis.
El castaño reaccionó, apresurando el paso a su lado. Volviéndolo a llamar para evitar que saliera, a su suerte, Harry lo hizo.
—¿Qué?— preguntó fastidiado.
—¿Podemos hablar, por favor?— su tono era evidente. De verdad estaba siendo sincero con querer disculparse y explicarle las cosas.
Harry pasó su mano por su propia nuca, de un lado a otro mientras tenía su vista fija en el castaño. Louis creyó que éste accedería y se lo pensaba, sin embargo, la respuesta lo dejó sin palabras.
—No quiero hablar, Louis.— dijo en tono seco. —Al menos no en este momento. Ya hiciste bastante. Buenas noches.— emprendió de nuevo su camino, volviendo a parar a secas, girando sobre su hombro. —Mañana, cuando salgas de turno puedes ir por Faith a mi apartamento. No hace falta que me llames, con un mensaje es más que suficiente.— y salió de ahí dejando a Louis por segunda vez solo.
Sintió una fuerte oleada de tristeza y decepción. ¿Cómo tan rápido pudo arruinar su relación tan buena con Harry? Ese día pudo haber terminado con un chiste de su parte, al igual que risas, pero no. Tan sólo con un "Buenas noches" y algo más que Louis interpretó como "No me molestes más."
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El rizado llegó al edificio donde Louis. La imagen de los gestos de quien lo tenía lleno de ilusiones no paraba de pasar por su mente.
Lástima, duda, y para él también... algo de desagrado.
Acomodó el asa de la mochila en su espalda al estar delante del apartamento de Louis. Dio unos golpes en la puerta, a los segundos fue recibido por Niall con una gran mancha blanca en su pecho y ese olor que Harry reconocía de tanto tiempo en su área.
—Adivino, Faith vomitó en ti.— dijo Harry con una ligera sonrisa.
Niall rodó los ojos y miró de nuevo la macha. Hizo ese gesto de desagrado con su boca.
—Incluso en mi propia casa no dejan de vomitarme.— se quejó sacando una risa de parte de Harry. —Pasa. Ahora está durmiendo. — el rizado entró al apartamento. —Deja eso en el sofá. ¿Quieres algo de tomar? Louis me avisó que vendrías saliendo del hospital.
—Agua, por favor. ¿Cómo fue todo con Faith? ¿Ningún malestar de su parte?
Niall hablaba aún dándole la espalda, sirviendo agua en su vaso.
—No. Comió bien, durmió bien. Chequé su temperatura cada hora y todo normal. Y el vómito, eso es normal en ellos.
—Tan normal como que vomiten encima tuyo.— rio de nuevo, burlándose un poco de él.
—En cierto punto.
—¿Puedo ir por Faith a su habitación?
—Es tu hija, claro.— respondió con obviedad el rubio. Harry asintió yendo a por ella.
La encontró durmiendo plácidamente en su cuna. Sus bracitos extendidos a los lados y su boquita haciendo una O. Sus mejillas regordetas y coloradas. Ella despertó cuando Harry comenzó a hacer el intento de llevarla en brazos sin querer despertarla.
—Lo siento, mi amor.— susurró. —Vuelve a dormir, nena. Papá llegó para irnos a tu otra casita, ¿sí?— la menor movió su lengüita fuera de sus labios, algo que siempre llenaba de ternura a Harry.
Volvió a cerrar sus ojitos en los brazos de Harry. La arrulló de un lado a otro, esperando dormirla para caminar con ella en brazos.
—Oye, Harry.— lo llamó el rubio.
Harry lo vio entrando a la habitación, de brazos cruzados con un gesto dudoso.
—Sí, dime.
—Yo sé que no debo meterme en cosas tuyas y de Louis... no sé si él haya sido lo bastante estúpido para no hablar contigo pero... él no es malo, ¿sabes? Louis no hace ese tipo de cosas, él no usa a las personas para su diversión.
—¿Te contó todo?
—En parte.— no quería decirle que supo de algo íntimo entre ellos. —A Louis le corresponde decirte las cosas, aunque yo puedo decirte como su mejor amigo que sí es estúpido, pero no un imbécil con los demás. Y lamento que hayan tenido una discusión o lo que sea que hayan tenido que los dejó mal después de demostrarte un poco de interés. Si ustedes hablan, creo que llegarían a algo en buenos términos.