Laugh = Mad + Sad | soojun

(VIII) Peleas

Yeonjun llegó a su casa con ganas de llorar, había peleado en serio con Wooyoung y se sentía muy mal, había sido todo su culpa, había olvidado recoger el celular de Wooyoung de la cafetería después de terminar de recoger lo que rompió y de lavar los trastes como castigo, pero olvidó llevarse el celular consigo, por suerte un chico lo había guardado y se lo había dado a Wooyoung. Pero Wooyoung y San estaban molestos con él y no querían hablarle, incluso habían hecho que Karina y Yeosang lo ignoraran, solo Yeji le había dirigido la palabra, pero igual lo había regañado. 

El día anterior Yeonjun había tenido una charla con su madre y ella le había hecho darse cuenta de que San estaba siendo un poco egoísta con Wooyoung, porque era imposible que San no notara su actitud tan grosera hacia sus amigos, pero de todas formas no hacía nada, tenía a Wooyoung comiendo de la palma de su mano y rogándole atención. 

Cuando discutieron, Yeonjun terminó llamando egoísta y manipulador a San y Wooyoung le había gritado e insultado de todas las maneras que se le ocurrieron en ese momento, Yeonjun tenía el corazón roto, amaba a su amigo incluso más que a sí mismo y le había pasado muchas, pero eso era demasiado, él había cometido un solo error y ya era el culpable de todo, estaba harto, quería llorar y llorar hasta quedarse dormido. 

― Ya llegué. 

― Anda a saludar. 

― Buenas tardes. 

― ¿Qué te pasa? 

― Me duele la cabeza. 

― Oh, está bien, entonces ve a dormir un rato, tu madre ya mismo llega del hospital, te sirvo la comida cuando despiertes. 

― No, ya tomo la pastilla y se me pasa, además, quedé con Ryujin para ir de compras hoy, mejor sírveme la comida ahora por favor. 

― Bueno, pero si te duele mucho la cabeza me avisas. 

― Seguro. 

Y para rematar todo, Soobin había faltado ese día. 

― ¿Si vamos a salir? 

― No sé, estoy cansada, ya me mudo y vemos. 

― Bueno, iré a ducharme. 

― Como sea. 

― Solo dime si vamos a salir o no, tengo tarea. 

― Es que no sé. 

― Ryujin, no quiero perder el tiempo, decídete. 

― Está bien sí, pero en una hora, cuando ya no tenga sueño. 

― Entonces no, tengo más cosas que hacer, me voy a duchar. 

― ¡Pero te dije que sí! No seas tan dramático, estoy harta de tu personalidad de mierda. 

― ¿Y eso qué? No me importa, tengo cosas que hacer. 

― ¿Ves? Por esto es que no tienes amigos, esa gente solo te aguanta por pena, eres un idiota de mierda. 

― Lo sé, adios. 

Yeonjun entró a la ducha y terminó sentándose bajo la regadera, tenía su cuchilla en la mano y como si estuviera en automático, dirigió su cuchilla hasta su brazo e hizo un pequeño corte y luego otro y otro cada vez más profundo, paró cuando la sangre empezó a caer. 

― Sí, soy un idiota de mierda, ya lo sé, me lo recuerdo cada día, no necesitan decírmelo, no necesitan recordarme que no debí nacer y que soy un maldito error, ya lo sé. 

Yeonjun se sentía demasiado mal, pero salió de la ducha, se puso unas curitas y puso una buena cara o por lo menos lo intentó. 

Regresó a su habitación y se puso el terno de dormir. 

― No me mires así, ya hazlo, golpéame si quieres, no te devolveré el golpe, nunca lo hice. 

― Yeonjun. 

― Vete de aquí, tengo que cambiarme, si no vas a decir nada solo vete ―Yeonjun cerró la puerta con llave y se cambió rápido, hubiera deseado tener su escritorio en su habitación, pero no, estaba afuera, así que salió. 

― Yeonjunnie, escúchame. 

― No quiero escucharte, déjame solo. 

― Lo siento, no quería decir eso. 

― No te creo. 

Se sentó en su escritorio y se puso sus audífonos. 

― ¿Me perdonas? 

― No, vete de aquí, tengo tarea. 

Era por esas cosas que Yeonjun hubiera deseado morir esa vez que se ahogó en la piscina, es por esas cosas que cada día deseaba irse a dormir y no despertar, dejar de existir.

Era por esas cosas que Yeonjun creía que si existiera un cielo, quería ir allí y olvidar que alguna vez había estado en la tierra. 

Era por esas cosas que Yeonjun quería morir.