(XII) Final

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Soobin encontró un papel doblado en su escritorio cuando subió del recreo, no había visto a Yeonjun y eso le preocupaba un poco. 

― ¿Has visto a Yeonjun? 

― No, es raro que no esté aquí, pero seguramente está en la enfermería. 

― ¿Lo viste? 

― No, si tú no lo viste, imagínate yo. 

― Vete a la mierda Wooyoung. 

Soobin abrió el papel y enseguida reconoció la letra de Yeonjun. 

Me preguntaba cuando pasaría y como sería, pues ahora lo sé, se siente extraño, estoy al borde y puedo ver todo el puto colegio, es genial, me pregunto si se sentirá igual mientras esté cayendo, me pregunto si sentiré miedo, si querré aferrarme al último momento, quisiera que lo último que viera fueran tus ojos, pero eso sería muy cruel, no quiero que llores y no quiero llorar y arrepentirme, porque al final terminaré jodiendo nuestras vidas y no quiero eso. 

En fin, pareciera que estoy siendo bueno contigo, pero estoy siendo egoísta, estoy siendo muy egoísta contigo, dijiste que me amas y yo te dejaré, estoy siendo cruel, pero quiero ser egoísta, no me culpes, no me siento bien y es la primera vez que lo admito tan a la ligera, jamás me sentí suficiente para este mundo, tal vez nos veamos otra vez en otra vida, quiero creer que reconoceré tu alma y podré amarte sin estar tan dañado. 

Te amo y me duele escribirlo, te amo y voy a dejarte, así que tómalo como un hasta luego, porque nos volveremos a ver. 

― ¡Choi Soobin! 

― Tengo que irme ―Soobin tiró la carta y salió corriendo. 

Los gritos del profesor se oían, pero Soobin no hizo caso, siguió corriendo, hasta que encontró a Yeonjun sentado al borde de la azotea del colegio. 

― ¡Yeonjun! 

― No se suponía que vinieras.

― Yeonjun, por favor. 

― Vuelve clases, solo necesito un momento. 

― No me mientas. 

― Lo que escribí, no sé en que estaba pensando. 

― No me estás mirando a los ojos, estás mintiendo, Yeonjun. 

― No te acerques, es que de verdad, no quiero seguir, adiós. 

La alarma del simulacro sonó por todo el colegio, todos salieron y vieron a Yeonjun y Soobin. 

― San, aquí estás. 

― ¿Qué sucede? 

― Yeonjun. 

― ¿Qué pasa con él? ―Wooyoung no podía hablar, le mostró la carta a San―. ¿Dónde está? 

― La azotea, Soobin está con él. 

Yeonjun cerró los ojos, respiró profundo y se dejó caer. 

Soobin corrió tan rápido como pudo, pero no fue suficiente, un "te amo" leyó en los labios de Yeonjun. 

Yeonjun sonreía, en segundos su cuerpo impactó contra el suelo, estaba muerto. 

Soobin no sabía que hacer, así que se sentó ahí y lloró, pronto alguien llegó por él, parecía ser Yeji, creyó haber visto a Yeosang también, el punto es que lo llevaron a una de las aulas vacías del último piso, estaban hablando, pero no podía oír sus voces, no claramente, eran como ecos retumbando en sus oídos, no podía distinguir sus rostros y sentía que todo le daba vueltas, su corazón latía lento y no estaba seguro de estar respirando. 

Laugh = Mad + Sad | soojunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora