Hoy tenía que salir de casa porque necesitaba realizar unas gestiones en la empresa y tener una reunión presencialmente. Aprovecharía la oportunidad y hablaría seriamente con Mingi
—Sr. Choi tiene que estar en la sala de reuniones a las 9.00 am—. Dijo Hongjoong con la carpeta en sus manos.
—Hongjoong a mi despacho—. Los hombros del omega se tensaron al instante.
—Está bien.
Abrí la puerta de mi despacho y me senté en mi silla giratoria, mire a Hongjoong detenidamente y pulse un botón de mi teclado.
—Theo, por favor dile a Mingi que venga a mi despacho ahora mismo—. El secretario de Mingi soltó un pequeño sonido de aprobación.
—Señor Choi, yo creo que...—. La puerta fue abierta por el alfa de mechas azules.
—Bien, bien. Ya estamos todos aquí—. Hablé con seriedad.
Observe como Mingi se quedaba de pie mirando fijamente hacia la nunca de Hongjoong, tensó como nunca. Los dos lucían demasiado nerviosos, el omega no paraba de mover su pierna con insistencia y mirada gacha, mientras que el alfa no podía levantar la mirada y empezaba a oler a culpa.
—¿Por qué?—. El omega se encogió en su sitio, mientras que Mingi pasaba una mano por su cara con desesperación.
—No hay una explicación, simplemente pasó.
—Mingi eres mi amigo desde hace tantos años que nunca te vi capaz de hacer esta mierda, y menos cuando tu puto omega tiene a tu cachorro en su vientre. ¿Qué jodida necesidad tenías de engañarle y tirar por la borda a tu familia?—. Mi voz denotándose enfadada.
—San este no es tu puto asunto, no te metas—. Mingi empezó a gruñir mientras se acercaba hacia mi escritorio.
—Oh, claro que lo es, lo es desde que Yunho está en mi casa. Lo es desde que le dan ataques de ansiedad, lo es desde que le dan episodios depresivos y Wooyoung se tiene que quedar con en todo momento. Lo es desde que araña su vientre queriendo sacar de ahí al hijo de un traidor.— Mingi paro en seco sus movimientos, mientras que Hongjoong empezaba a soltar un fuerte aroma a tristeza y sus ojos se empañaban en lágrimas.
—¡Mierda, todo esto es mi culpa! Yo... lo siento, yo soy el culpable de todo esto, yo empecé a insinuarme hacia Mingi, aun sabiendo que estaba casado y con un hijo en camino... ¡Soy una persona horrible!—. Bramó el omega.
Mingi corrió hacia la puerta y salió de la habitación. Sabía perfectamente hacia donde se dirigía así que no tuve prisa por perseguirle. Me levanté de mi silla para pasar por al lado de Hongjoong.
—Lo que hiciste no está bien Joong, ni mucho menos. No te voy a despedir porque eres un trabajador excepcional, pero te voy a pedir que no te acerques más a Mingi y hables las cosas seriamente con Seonghwa—. El omega asintió en respuesta, mientras no dejaba de sollozar.
Camine hacia el pasillo y pulse el botón del ascensor, esperando pacientemente a que las puertas metálicas se abrieran ante mí, cuando se abrieron subí al ascensor mientras desbloqueaba mi teléfono y le mandaba un corto mensaje a Wooyoung.
"Woo, Mingi va para allá. No dejes que vea a Yunho hasta que yo llegue"
Cuando llegue al aparcamiento subí al coche y encendí el motor, rumbo a mi casa.
↳❄️」
Aparque rápidamente al lado del coche de Mingi, corrí hacia la entrada de la casa y pude escuchar algunos gritos por parte de Wooyoung.
—¡No vas a pasar!
—¡Es mi omega, estoy en todo derecho de verle!—. Gruñó el alfa.
—Después de lo que le hiciste, ni siquiera deberías considerarlo algo tuyo, maldito alfa mentecato—. Me acerqué hacia ellos, poniendo mi mano en el cabello de Wooyoung para calmarlo.
—Calmaos.
Peiné las hebras oscuras del omega para que todo rastro de enfado se fuera, Mingi no paraba de suspirar fuerte y apretar los puños.
—Te dejaré hablar con él, pero como le intentes hacer algo o le hagas llorar demasiado, te juro que te arrancaré los huevos—. Wow, Wooyoung de verdad estaba molesto.
Dejamos pasar a Mingi a la sala de estar, donde estaba Yunho, moviendo la pierna repetidamente con nerviosismo, sus manos en su vientre, intentando arañarlo. Wooyoung y yo nos quedamos en el marco de la puerta escuchando atentamente.
—Yunyun...
—No me llames así—. La voz de Yunho saliendo terriblemente helada.
—Anda mira, parece que se transformó en ti San—. Dijo el omega a mi lado.
—Yo no sueno así.
—No, solo suenas terriblemente frío y serio, la mayoría del tiempo—. Habló con burla.
—Yunho... lo siento mucho, de verdad que yo no quería...—La voz de Mingi empezando a quebrarse mientras Yunho cerraba sus ojos con fuerza.
—Quiero el divorcio.
En ese preciso instante sentí que deberíamos dejarlos solos, así que cerré la puerta de la sala cuidadosamente mientras empujaba suavemente a Wooyoung fuera de ahí.
—Deberíamos dejarles solos—. Empecé a caminar por el pasillo, rumbo hacia las escaleras del piso de arriba, cuando una mano en mi muñeca me detuvo.
—San...—. Me giré para enfrentarle, sus ojos transmitiendo algún tipo de sentimiento que no pude descifrar.
—¿Por qué eres así?
—¿Qué?—. Su pregunta me tomo con la guardia baja.
—Porque eres tan frío y serio con todos, incluso conmigo... yo...—. Su otra mano viajando hacia mi mejilla, sintiendo el calor de su palma, posarse con delicadeza.
—No es algo de tu incumbencia Wooyoung, a veces la vida no es como uno la desea y a mí no me trataron demasiado bien en el pasado. Es mejor estar solo para siempre que tener a alguien a tu lado—. Las cejas del omega frunciéndose con enfado.
—¿Y por qué me dejaste quedarme aquí?—. Lo miré fijamente a los ojos, pero no dije palabra.
Noté como mi muñeca era tirada con fuerza hacia abajo, haciéndome tambalearme, tirando mi cuerpo hacia adelante. Lo siguiente que sentí fueron los esponjosos labios del omega sobre los míos, abrí los ojos con sorpresa para segundos más tarde cerrarlos disfrutando del contacto mientras posaba una mano en la cintura del menor.
—¡San! ¡Wooyoung!—. Nos separamos rápidamente, como si de fuego se tratara. —Yunho...¡Él se desmayó! ¡Y...y... no sé qué le paso pero! Joder, él ha roto aguas!—. Corrimos hacia la sala, donde pudimos apreciar el cuerpo de Yunho tirado en el suelo.
—¡Llama a una ambulancia!
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𝗠𝗘𝗟𝗧𝗜𝗡𝗚 𝗢𝗙 𝗦𝗡𝗢𝗪
FanfictionSan, un Alfa con dinero, pero realmente infeliz, solitario y frío, es sorprendido un día por su amigo Song Mingi, que como regalo le lleva un Omega para que el Alfa por fin pueda emparejarse y no estar tan solo. San, que nunca en su vida experiment...